décimo cuarto

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—¿No te parece demasiado ir a su casa?—interrumpió mi lectura Chaeyoung.

   Iseul suspiró dejando el libro en su lugar, ella sonrió porque logró distraer a su amiga quien había estado tensa desde que llegó a la universidad por un examen.

—No lo sé. A veces hago las cosas sin pensar.—añadió.

—¿A veces?—preguntó inquisitiva. Ambas rieron un poco y la más pequeña golpeó levemente el brazo de la otra.

—Ya déjame estudiar un momento. No he tenido la mente clara estos días—abrió su libro en la página que tenía marcada y luego añadió con pesadez—: me enteré de este examen ayer.

   Y es que esa era la desastrosa noticia para sus notas. Desde que Minseok se quedó en su casa e Iseul empezó a pensar que gustaba de él, su cabeza estaba en otro mundo.

  Si no fuese porque ayer un compañero le preguntó los temas para el examen de física, ella vendría como si nada a prestar presencia. Que era lo único que hacía esta semana.

   Y no es que su vida dependiera de un muchacho. Pero últimamente quería saber cada vez más acerca de él. A la vez también entendía que el chico no hablaría mucho, no es como ella en muchos y diversos aspectos. Él es diferente a todos los chicos de la secundaria con los que salió o conoció.

—¿O quizás soy yo la diferente?—dijo en voz alta sin darse cuenta.

   Su amiga levantó la mirada de su cuaderno de álgebra y le arrojó un borrador que cayó de nuevo en la mesa. Luego de que la más pequeña se quejara, ella espetó molesta:

—¿Hiciste que me callara sólo para ponerte a pensar en él? Ponte a estudiar o tendrás que trabajar de cocinera en el servicio militar.

¿Habrá ido al servicio militar antes fe la universidad?—pensó.

   Era un caso perdido la verdad.

***

   Ya habían salido todos los alumnos y cada uno más impresionado de la postura y el tiempo que había llevado Iseul sentada en esa silla mirando la hoja. Al terminar la clase su maestro de literatura se acercó y le preguntó sacando a su alumna del trance:

—¿No hizo nada?

Levantó la vista y vio a su maestro cuarentón favorito. Estiró su hoja, la cual agarró el señor Choi.

—Terminé hace rato solo que estuve pensando nada más—guardó sus biromes y se colocó la mochila—, perdón por retenerlo unos minutos más de su hora.

  Realizó una pequeña reverencia y salió del salón de clases encontrando a un Jongin preocupado.

—¿Qué sucede?

—Nada, vine temprano a buscarte para salir a tomar un helado pero como Chae dijo que tenías un examen pensé que tardaría sólo unos minutos más—Iseul lo miró esperando que siguiera contando lo que pasaba mientras caminaban.—. Saliste última, osita.

  Iseul pasó una mano por la cintura de Jongin y él colocó su mano en el hombro izquierdo de ella.

—Perdón, no sabía que me estabas esperando, sino hubiera salido antes. Terminé primera pero me quedé pensando durante todo el examen.

   Él rió un poco por lo que estaba por contarle a su amiga.

—Tenías que ver la cara que todos tus compañeros ponían: "Kim no terminó aún, ¿viste como estaba?"

   Logró sacar risas de ambos y más de Iseul al imaginarse a sus compañeros de siempre pensando cómo es que no salía primera. Digamos que hasta el mismo maestro estaba sorprendido de no verla irse.

   Entre risas y miradas de otros hacia ellos por su cercanía salieron del establecimiento. Su local favorito, no estaba tan lejos de sus hogares así que podrían ir y no ser reprendidos por llegar tarde.

—¿Qué pasó con unnie? Desde el receso no la vi.

—Terminó antes su horario y fue a su casa porque la mamá la necesitaba no sé para qué—contestó su amigo. Luego añadió—: creo que tiene novio.

   La más pequeña abrió los ojos un tanto exagerados. No podía creer que su amiga no le dijera.

—Igual no está confirmado—añadió el moreno.—. Primero la vi muy cercana a Luhan, el amigo de tu hermano. Por eso asumí que era él.

   El tomó de su batido haciendo sufrir a una Iseul impaciente y ansiosa por saber lo que seguía. Sonrió al ver la cara de la pequeña.

—¿Y, qué pasó?

—Cuando salí con mi madre a hacer las compras, la vi siguiendo a un chico. No vi quien era pero Younggie se ocultaba e iba detrás.

   Iseul suspiró, ya imaginandose de quién se trataba, pero no quería levantar sospechas y que Jongin se entere. Siguió tomando su batido mientras él le contaba como había sido su semana y, mientras tanto, craneando excusas por si preguntaba dónde estuvo esta semana que no la vio.






the trouble it's me ||Kim Minseok||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora