cuadragésimo sexto

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-¿Y?

-Gracias, yo también ando muy bien por acá.

-No seas tonto-se rió nerviosa.-, no te haces una idea de lo ansiosa que estaba para que llegue este día.

-Segundo lugar, perdón.

"¿Perdón?"

-Ay, mi vida no tienes porqué pedirme perdón.- se preocupaba un poco al decir verdad.

Del otro lado se oyó un suspiro y un golpe, como si se hubiese tirado cansado en la cama. Qué agotado tiene que estar.

-Es que, uhg no sé, estaba tan empeñado en llevarte un trofeo.

Es tan tierno, lo quería abrazar hasta asfixiarlo y llenarlo de besos. Tan cursi como siempre, Iseul.

-Hace unos meses que yo ya gané un trofeo, pero uno para la vida.

Del otro lado se escuchó una risa y se imaginaba su carita poniéndose roja como lo hacía cada que ella le adulaba los pectorales. Vergonzoso, hasta ella lo sabe.

-Bueno, me voy a dormir, esta noche ya viajamos. Te hablo más tarde.

-Suerte y más te vale que no te saltes las comidas, eh.-regaño.

Después de colgar hizo un gran esfuerzo para así borrar de su mente a Xiumin por un rato. Se concentró en terminar el ensayo el cual había pausado para contestar su llamada. Según la consigna debía tener más de trescientas palabras y apenas iban cuatro párrafos cortos.

****

-¿Hacemos algo hoy?-le susurró Jisoo mientras la profesora estaba en otra fila recogiendo las tareas.

-Esta tarde voy a ir a buscar a Junggie.-le respondió del mismo modo.

-Yo me apunto.

-A menos que quie...

-Park Ji Soo-le llamó la atención la docente acargo. Ella elevó la vista sorprendida por el tono que puso.-, por hablar en clase cuando no se lo pido.-le hizo entrega de un papel rojo.

-Pero señora...

-¿Quieres otro papelito?

Por la situación, Iseul nunca mantuvo tan bien las ganas de reír. Tampoco quería venir a detención o menos un acta o que le quiten puntos, pero la cara de su amiga lo decía todo. Hasta los estudiantes más calmado y serios estaban en la misma.

-Mientras hacen el examen sorpresa, corregiré algunos trabajos prácticos-avisó mientras dejaba los mismos en su escritorio y repartía una cantidad de hojas por fila. Nadie se quejó porque conocemos su carácter y más cuando está enojada.-. Son simples preguntas, no es mucho.

-Lo dice ella porque ya se recibió.-murmuró por lo bajo Jisoo.

***

La muchacha estaba cansada. Era de las últimas y tenía la mano dolida de tanto apretar y escribir rápidamente para que le alcance el tiempo. Ni bien terminó abrochó la hoja, colocó su nombre todo rápido y desprolijo y se acercó a la docente.

-Kim Iseul-dijo recibiendo el trabajo. Ella asintió y siguió hablando bien calmada y con una sonrisa que (según cuenta la leyenda estudiantil) no aparecía desde que cumplió los veintiocho años de aporte al trabajo.-, me encantó tu ensayo.

Ella ocultaba las manos sudadas de nervios detrás suyo y sonreía. Dio una pequeña reverencia, que al cavo no tenía sentido porque no era la gran cosa.

-Tienes un distinguido; te esforzarte mucho. Así me gusta, ya puedes retirarte.

Agradeció y fue a su asiento a juntar sus cosas. También fue testigo unos segundos como sus compañeros aprovecharon la charla con la profesora para pasarse respuestas. Que envidia, a ella no le salía bien copiarse.

-Jisoo estaba feliz porque la castigaron, ¿entiendes eso?-se acercó un tanto preocupada Chaeyoung.

La miró casi sin expresión pero su amiga supo que no entendió nada la referencia. Así que, acostumbranda, prosiguió a explicarle:

-Creo que está feliz de estar fuera del alcance de sus padres.-se rió un poco.

-Es horrible el castigo de acá. En otras aulas por lo general te hacen perder tiempo, pero acá nos hacen limpiar el patio.

-Al menos ayudamos, prefiero esto a estar todo el tiempo sentada. Es ayuda a la comunidad, supongo.

Lo que decía su amiga no tenía sentido (como casi todo en la vida) pero ya para no seguir tocando el tema hablaron de otra cosa, luego de otra y así. Hasta que antes de girar cada una en sus respectivos caminos para ir a sus hogares ella preguntó:

-¿Te casarías si te lo propusieran ahora?

No iba a decirle que era muy random la pregunta porque así era siempre la charla de ambas. Pero esta vez el tono cambió; parecía seria, curiosa, como si guardase un secreto.

-Soy muy joven, no creo.

-Pero piénsalo, hay chicas de nuestra edad que ya están comprometidas o que esperan un hijo.

Y tenía razón, pero hablar sobre el futuro era algo que a Iseul no le iba bien.

-Es decir, sí quizás me veo compartiendo la vida con alguien. Pero no sé si casados o con hijos. Tampoco me quiero embarazar.

-Kris me dijo que quiere una vida conmigo-siguio con su tono serio pero le añadió tristeza. Ella pasó un brazo por detrás de su espalda hasta apoyarlo en el hombro de su amiga.-. Y no es que no quiero, sucede que a veces siento que sólo me quiere por el arreglo.

-Si fuese un "arreglo" enserio no sería él quien te lo diría, lo haría tu madre. Quizás solo tienes que hablarlo con él, entenderá, es inteligente.

Suspiró cansada. No dijo nada por un corto momento y luego la miró.

-Si tan sólo todos tuviesen tu simplicidad, amiga. Ugh, quizás ahora esta en casa así que iré a hablarlo con él.

Ahora que lo mencionó, y también después de que se retiró, recordó que no le preguntó si se había hablado con Jongin. Además, si bien él tenía sus intenciones para llegar hasta su casa, le parecía raro que no intentase entablar una amistad de nuevo con Chaeyoung. Iseul tampoco se molestaba en pensar en si él la vino a "conquistar" porque desde que debutó tuvo en mente que tendría a su alcance a mil chicas más hermosas que ella. Si bien ambos no son de los que se fijan en las apariencias, las tentaciones estaban.

the trouble it's me ||Kim Minseok||Where stories live. Discover now