¿Seré Suya? 1° Parte

Capítulo 34

Así como dijo el piloto, al bajar del avión fue preso el idiota que me quiso violar, y yo muy tranquila pude irme a buscar un hotel para descansar.

Al encontrar un hotel reconfortante (en el sentido de acogedor) lo primero que hago es dormir un poco, es que el viaje fue muy agotador, y más si en el mismo avión que vas hay un hombre que te desea violar.

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Se me va el sueño al carajo al oír como suena mi celular "trinck, trinck" lo tomo con el pensamiento de "¿Quién carajos arruina mi preciado sueño ahora? " quién sea que sea tengo pensado mandarlo a comer mandarinas con el diablo.

—"Halo".

—"¡Baby!"

Me alejo el celular del oído instintivamente.

—"¿Catalina?, ¿eres tú?"

—"Sí amor."

—"Oh, por Dios. No puedo creerlo."

—"Sofía te vio pasar por la callé ¿Estas en Florida?"

—"Sí, aquí estoy."

—"¿Adónde te encuentras quedando?"

—"En un hotel."

—"Mándame la dirección me encuentro con Skarlett y Sofía."

—"¿Y Lucas? "

—"Esta con su mamá."

—"Ok, te mandaré la ubicación ahora."

—"Ok."

Me cuelga, nunca dice "adiós" o "buenas noches, buenas tardes, buenos días" es una mala educada... pero así la amo yo a esa loca. Le mando mi ubicación por WhatsApp y de una me aparece activa.

Dejo el celular y me meto al baño, necesito un baño urgente.

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Después de unos quince minutos suena el timbre de mi puerta, y al abrir no hay nadie así que salgo al pasillo, y reviso los alrededores. No veo nada o alguien así que vuelvo a la habitación...

—¡Buuu! —gritan al unísono.

Yo solo me pongo la mano en el pecho, creo que perdí el habla.

—¡Jajajajaja! —Se burlan.

Eso me confirma que no han cambiado en nada.

—¡Casi me dan un infarto! —me quejo.

—Hay baby no puedes negar que fue divertido —chilla.

Le regalo una de mis miradas amenazantes.

—Ok, acepto que nos pasamos un poquito —suelta juguetón.

Doblo mi rostro como el exorcista hacia Lucas.

—Ok, si nos pasamos —dice tranquila.

Miro como la llorona a Sofía.

—Pensé que no podías venir Lucas, ¿qué paso? —pregunto más tranquila.

—Ya sabes cómo es Catalina, me fue a secuestrar adonde mi madre con la excusa "somos mujeres no podemos andar sola en la calle de noche, anda hermanito" —dice inmitándola.

—Jajajajaja, pero en realidad quieren tu cartera y tu auto —suelto entre risa.

—Exacto —dice riendo—. Lo difícil de ser hombre y tener tabajo.

Después de esa pequeña charla fuimos a mi cama y nos acomodamos en ella los cinco, es cierto que "Skarlett, Sofía y Lucas" son mis más grandes amigos pero, a Catalina la conozco desde que tengo uso de conciencia, nos criamos juntas, hasta que se tuvo que venir a Florida a vivir con su papá, pues sus padres son iguales que los míos en el sentudo de que no están juntos "su padre un mujeriego sin freno, su mamá una puta de las grandes" literalmente unos padres tóxicos, pero igual tiene dinero hasta su muerte por parte de ambos.