Uɴᴇxᴘᴇᴄᴛᴇᴅ Sᴘᴀʀᴋs? /SᴜᴘᴇʀCᴏʀᴘ / AU

XII - Ancllah Digital Dynamics International

El desayuno del día siguiente implicó una enorme variedad de tostadas, frijoles, tocino y huevos. Todavía era difícil acostumbrarse al gran volumen de materia comestible que endurecía las arterias de los hermanos.

–Entonces, ¿qué están haciendo todos hoy?– Jeremiah preguntó mientras se servía un café negro.

–Haciendo eso en el trabajo de John del que hablamos–, dijo Lucas entre bocados. –Casa abierta.

Los ojos de todos giraron hacia John. Se sonrojó por debajo de la línea del cabello, el tono debajo de la camisa en el cuello.

–¿Oh?– Dijo Kara. –¿Por qué hacen eso?

–Es su primer aniversario de la apertura de la planta–, dijo Lucas. –Invitaron a todos a llevar a sus familias. Pensé en echarle un vistazo desde la luz del trabajo hoy. Mostrarle a Johnny un poco de apoyo familiar.

John untó la tostada con mantequilla y no levantó la vista.

–¿A qué hora está pasando?– Kara preguntó.

–Diez hasta el mediodía–, dijo Lucas. –Pero no tienes que ir. Es solo para cualquiera que esté interesado en dónde trabaja, algunos discursos y todo eso ...

–Excelente–, interrumpió Lena. –Por mi parte, me encantaría hacer un recorrido por la división de Utah de Ancllah Digital Dynamics.

–¿Lo haces?– Meemaw preguntó, frunciendo el ceño.

–Oh, definitivamente–. Ella miró a Kara. –¿No lo harías?

Kara captó su mirada aguda y asintió. –Sí. Estaremos allí con las campanas puestas. Por John.

John les dio a ambas miradas perplejas antes de tomar un trago apresurado.

–¿Sabes quién está dando los discursos?– Kara preguntó. –¿Algún VIP?

Meemaw dejó de colocar la comida y las miró a ambas con dureza. –Muy bien, ¿qué están planeando ustedes dos?

Lena fijó su expresión en neutral, decidiendo que decirle la verdad de que estaban investigando una historia probablemente no les ganaría ningún aliado en esta mesa. –Aprender más sobre la industria dónde trabaja mi cuñado.

Kara agregó: –Los autos eléctricos suenan bien.

–Kara Danvers–, dijo Meemaw, –te conozco demasiado como para saber cuándo estás planeando algo. Y tú...– Miró a Lena con recelo y luego la señaló. –Solo puedo adivinar cómo se ve tu cara problemática, pero sospecho que la estoy viendo ahora mismo. Simplemente no comience nada que pueda causar problemas. A John le encanta ese trabajo.

–Nos comportaremos–, dijo Kara. –No hay problema–. Se giró hacia John. –¿Diez?

Él asintió pero parecía aún más confundido.

–Excelente–. Ella le lanzó una sonrisa, luego dio un mordisco a su desayuno.

* *

Después del desayuno, Lena se ofreció como voluntaria para los servicios de lavado de platos, y una Meemaw horrorizada la sacó de la cocina justo cuando llamaron a la puerta.

–¡Lo conseguiré!– La voz de Kara llamó, ya a mitad de camino por el pasillo. Un momento después, asomó la cabeza hacia atrás en la cocina y le hizo señas a Lena. –Hola, vamos. Hay alguien a quien debes conocer.

Lena la siguió hasta la puerta, que reveló a un joven delgado con emocionados y brillantes ojos marrones. Estaba adornado con un elegante traje azul. Un perfecto triángulo púrpura de seda sobresalía del bolsillo del pecho.