Capítulo 14.💄

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Complicaciones

Después de ciertos infiernos, no cualquier demonio te quema. -Anónimo.



Alessandro

Sigo mirando la botella vacía de whisky escocés que bebí en cuestión de pocas horas. Estoy enojado y dudo que alguien me suba el humor o siquiera pueda hacerme cambiar las forma de ver mi situación ahora mismo.

Joder, solo quiero que todos mis problemas se acaben.

Comencemos con el hecho de que Gianna no se aleja de ese tipo. No me importa si se acuesta con alguien más, la razón de mi enojo es que ese tipo le arruinará la vida y no solo a ella. Si firmo esos malditos papeles, el hijo de puta me arruinará a mí.

Ya sé que Marino sabe más de lo dice y estoy dispuesto averiguar todo. No solo se está metiendo con temas de Gianna, se está metiendo en mi territorio y eso le costará muy caro.

No voy a dejar que vea la luz del sol. Voy arrancar sus ojos y le volaré la cabeza.

Segundo. Mi madre está empezando a cuestionar mis decisiones, algunos miembros más cercanos de la familia están empezando compararme con Fabrizio y que terminaré siendo igual que él.

Papá no fue un mal líder, solo que se volvió un poco loco en los últimos años y dejó todo de lado cuando empezó a consumir la mercancía, pasaba ebrio la mayor parte del día y violaba a las niñas con las que traficaba. No soy como él, yo tengo todo bajo control, yo sé lo que hago y cuando las piezas se junten se darán cuenta de que siempre tuve la razón, que siempre hice las cosas bien. Y si creen que soy un cobarde al dejar a esa mujer con vida —como dijo uno de mis tíos— que soy un débil y que no sé cómo actuar en estas situaciones.

Bien, les daré el gusto y seré el hijo de puta de siempre, él que he estado ocultando solo por decepcionar a mamá. No mataré a Julia y solo hay una razón, ella es mi carnada y sé qué un día de estos la buscarán. Ella es una pieza clave para mí caída.

Y cuando ellos lleguen, yo estaré muy preparado.

Seré ese ser despiadado qué todo el mundo conoce, esta vez sin restricción a nada. Estuve calmado por años solo por mamá, porque ella era quien me aconsejaba para no ser tan malvado. Ahora ella me dejo sin su guía, entonces eso haré. Haré lo que se me dé la gana.

La mirada se aparta de la botella cuando la pantalla de mi celular se enciende. El nombre de Gianna aparece.

Me río sin ánimo. No pienso hablar con ella, no hasta que termine con ese hijo de perra, o solo que sufra un poco más antes de poner en orden mi cabeza.

Aun no entiendo cómo es que me pone de mal humor pensar que Gianna esté cerca de él. Quizá no debí revisar sus historias de Instagram...

La vista ahora se me desvía de mi móvil, justo a la puerta de entrada de mi oficina, donde mi hermano menor aparece con una sonrisa que conozco y me molesta. Solo me quedo en la silla sin moverme y tampoco aparto la mirada de su delgado cuerpo. Aunque quiero.

—Debo decir que nunca he visto que una mujer te ponga así —parece burlarse.

—No entiendes —me río cansado.

—Su novio será un dolor en el culo y lo sabes, solo mátalo. Se mete donde no debe, si sabe más de lo que nos hace creer.

—No es tan fácil. El hijo de perra tiene información valiosa y quiero saber que tan lejos puede llegar.

Nella Mafia © | ITALIA 1|Where stories live. Discover now