▪︎41▪︎ 3/4 Maraton

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Naomi supuso desde el primer momento que la muerte de la anciana, se debía a algo o más bien de alguien. Una carta que había encontrado en esa casa, decía todo, la mujer se desahogo en ese pedazo de hoja, dirigida especialmente para la peligris por qué, su abuela sabía que Kim vendría tras saber de su muerte.
Una anciana que la cuidaba de chiquita la cual Naomi siempre adoraba jugar y pasar la tarde junto a ella, era su abuela materna.
El final de la carta, causó que las lágrimas fluyeran como cataratas otra vez.




"Mi querida nieta, le has llorado todo este tiempo a la gemela idéntica de tu madre, Analia planeó hasta su propia muerte y ahora la mía también está en sus manos, tú madre sigue viva y se a convertido en un ser despiadado. Todo comenzó cuándo tu padre mató a su amante, el único amor de su vida. Quizás hallas descubrido lo que hacía contigo, entiendo que la odies, yo también odio a mi propia hija.... Perdón por todo mi niña."





Naomi se sintió furiosa, triste, despreciada y sobre todo culpable de no haber sido capaz de darse cuenta la doble cara de su madre poseía, culpable de la muerte de sus amigos como la de su abuela.




— ¡Maldita seas la madre que me parió!— destrozó lo último sano que quedaba de la casa.




—Naomi.. por favor tranquilízate.— el joven con miedo, intenta una vez más que se tranquilice sin saber aún por qué destrozo todo ese hogar.




¡Déjame Stiles!— aspecta mostrándole su gran llama.




—¡Dios!— cae al piso sentado al piso asustado, se aleja de apoco de ella.— E-esta bien, me iré.... me voy. — señala la puerta, se levanta para salir, bajo la fogosa mirada de furia de la mayor.


Kim está tan cegada en su enojo y tristeza que no ha notado que sus llamas se tornaron negras.
Sus lagrimas de lava ,  causan que la madera del hogar se encendiera, logrando hacer cenizas en poco segundos el lugar, la única casa que tenía un buen recuerdo.



"Sangre, sangre"



No-no.— se agarra de la cabeza.


"Matar, matar, .matar."




–¡No! ¡no!— proporciona golpes en sus sienes, queriendo dejar de oír aquellas voces. Se esfuerza en pensar algo bueno y entonces es cuando recuerda la noche que Klaus la hizo suya, las veces que beso sus, inconscientemente sonrió.
Sus llamas volvieron a su color normal, se apagó pero sus pensamientos buenos se esfuma al caer en la realidad, ella en medio de cenizas y algunas maderas aún quemándose.


"Stiles "


Lo busca rápidamente con la mirada y ay lo vio, escondido detrás de unos árboles. Sé sintió mal de nuevo pero esta vez por haberlo gritado y verlo temblar del miedo. Aún así, no mostró expresion alguna, camino hacia el coche y subió esperando al humano, quién entendió que no lo haría daño, por eso también sube al coche en silencio y maneja de regreso a la manda.




Chica En Llamas ( The Originals) KMWhere stories live. Discover now