Manipulado » Hiccstrid [Adap]

Epílogo

Después de aquel día, todos, absolutamente todos se enteraron de lo que había sucedido entre ellos dos y nadie pudo estar más feliz y contentos que ellos.

Jack estaba completamente feliz porque Hiccup había dejado finalmente de lado el odio y la amargura y se animó a decirle lo que sentía por ella. También porque Astrid finalmente había dejado su orgullo y temores de lado y le dijo que sí al amor de su vida.

Nada podía ser más perfecto... pero por desgracia no todo dura para siempre. Astrid sólo pudo estar con Hiccup un día y medio debido a que el martes en la tarde, él y Jack tenían que viajar para volver a la universidad.

Hiccup estaba completamente devastado. Por fin había podido estar al lado de ella y ahora tenía que partir. Había prometido no dejarla ir y ahora estaba haciendo exactamente lo contrario.

- No tengo porque ir —le confesó una vez que vio la fila para abordar. — Puedo abandonar y volver a comenzar en septiembre, contigo.

- No —negó. — Tú ya tienes tus notas, ya todos te conocen, no tienes porque volver a repetir el semestre solo por mí. 

- ¡No es todo! Es solo una parte —tomó ambas manos de la joven—. No quiero apartarme de tu lado.

Astrid le regaló una sonrisa y colocó su mano en la mejilla de él.

- Esperamos mucho tiempo para estar juntos… ¿qué importan dos meses más?

- Prometí que no te dejaría ir.

- Y no lo harás. Podemos escribirnos mensajes, chatear, ¡está Skype y otras apps! No tienes porque ponerte mal. Nada podrá separarnos, ¿entiendes?

Él simplemente asintió. - Sí.

- Ahora ve, sube al avión que se hace tarde.

- Te prometo que vendré cada fin de semana a verte.

- ¡No! Tú tienes que estudiar. Si en alguna ocasión estás libre puedes venir pero primero quiero que te enfoques en no perder el período. ¡No quiero que repruebes para estar conmigo!

Hiccup dejó escapar una pequeña risa. Lo había pillado.

- Está bien.

- Cuando llegué el verano estoy autorizada a asistir a la universidad para arreglar algunos papeles antes del comienzo de clases. Nos veremos allí y podremos pasar un tiempo juntos.

- ¿lo prometes?

- Lo prometo —le sonrió.

Hiccup le regaló una media sonrisa e inmediatamente se acerco para besarla en los labios. ¡Maldición! Como extrañaría besarla, tocarla, poder abrazarla y sentir el calor de su cuerpo contra el de él. ¿Cómo sobreviviría dos meses sin poder hacer todo eso?

Fue entonces cuando la voz de una mujer sonó en toda el área anunciando que el vuelvo que iba directo estaba a punto de despegar.

- ¡Rápido, Hiccup! —le gritó Jack desde la otra punta.

- Nos vemos pronto —dijo mirando a Astrid y rápidamente le robó un beso antes de salir corriendo.

- ¡Te amo! —le gritó la joven saludándolo con la mano.

- ¡También te amo! —le gritó de vuelta.

Astrid vio como Hiccup llegaba junto a su familia y comenzaba a despedirse de ella. Una vez que saludó a todos y convenció a su mamá de que estaría bien abordó el avión junto con Jack. Después de eso, Astrid no supo nada de él hasta la noche, cuando él le envió un mensaje diciéndole que habían llegado bien.