Extra-Jackson Belov

149 21 48
                                    

ADVERTENCIA: Este capítulo contiene temas como abuso de sustancias.

12 de julio, 2012

Nueva York, Estados Unidos

Jackson

Los viejos sillones de Gabriel son la mierda más incómoda del mundo, me encuentro con unos conocidos consumiendo algo de marihuana. Vanya salió de casa con su novio, mi madre trabaja y para no aburrirme en casa acepté la invitación de William, el castaño a mi lado.

─Esta mierda no me pega casi nada ─se queja este. Irónicamente es quien se ve más drogado.

Paul, el más viejo del grupo, nos ofrece algo más fuerte, pero no acepto, tengo suficiente con la bolsita de cocaína en mi bolsillo. Suelo consumir solo marihuana y cocaína. Mientras yo me niego, los demás aceptan la pastilla que este les ofrece. Voy a la cocina en busca de una cerveza.

Vanya no soporta a mis "amistades" y la entiendo, si fuese al revés yo estaría furioso, pero la realidad es que ninguno de ellos me obliga a consumir. Los conocí hace unos años en una de las fiestas de universidad a las que fui cuando aún estudiaba, son lo más cercano a un amigo que tengo, irónicamente nuestra amistad no pasa de algunas juntas para consumir, al único que considero mi amigo es Milton.

Mi teléfono vibra con un mensaje de mi hermana. Es una foto de ella con su novio en algún restaurante. Sonrío al ver su cara de emoción, me gusta como sonríe a cada rato cuando está con Freyr, debo admitir que al principio le hice la vida imposible al pobre, pero resistió.

Le respondo con un "¿Qué haces con mi hombre?". Me gusta bromear con mi cuñado y él me sigue el juego para fastidiar a Vanya. Mamá al principio se opuso a una relación entre ellos, sospecho que solo fue para molestar, pero gracias a mi intervención, los ha dejado en paz. Mi madre no es la mejor en su papel, conmigo siempre ha sido buena, por el contrario, con Vanya siempre ha sido borde y eso es algo que me crea molestia.

Mi pequeña hermana es mi adoración, no importa cuántos años pasen, siempre la veré como la bebé que mamá trajo a casa, aún recuerdo las palabras de papá "esta es tu hermanita, Jackson, tú serás su héroe y ejemplo a seguir, cuídala" dijo y eso he hecho desde hace diecisiete años, la he cuidado de idiotas, la cuidé de los malos tratos de mi madre desde que soy un niño, pero para lo que nunca me preparé fue para cuidarla del abandono de nuestro padre.

Mi padre fue mi héroe durante años hasta que se fue. Me duele imaginarlo viviendo una feliz vida sin nosotros mientras mamá ha caído, Vanya se niega a admitir que le duele y a mí me ha destrozado. El hombre que me enseñó a jugar futbol fue el mismo que me enseñó a no confiar en nadie. Él dijo para siempre y nos dejó sin mirar atrás. Patéticamente, lo llamo cada noche a su antiguo número, dejo mensajes aun sabiendo que nunca los escuchará, le cuento de mis días sabiendo que no le importa una mierda.

Sé que es injusto culparlo, pero yo tenía sueños antes de su partida. Sé que mi manera de sobrellevar las cosas es una mierda, solo que una cosa llevó a la otra y aquí me ves siendo solo una coraza vacía.

Las constantes peleas entre mis padres, el alcoholismo de mamá, la responsabilidad que pusieron en mi desde que soy un niño porque prácticamente yo eduqué a mi hermana. Fui yo quien la instruyó cuando llegó por primera vez su período, le enseñé todo sobre métodos anticonceptivos, fue a mí a quien acudió cuando supo que estaba enamorada por primera vez; también fue a mí al que le dijo cuando tuvo su primera vez, yo la llevé a cada chequeo con su ginecólogo.

Vuelvo a la sala con una cerveza en mi mano.

─Paul, dame una de esas pastillas ─Pido, pensar en mi padre me pone de malas, necesito olvidarme por un rato de él.

Si no es suficiente, déjame ir (#1) COMPLETAWhere stories live. Discover now