Capítulo diez

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23 de enero, 2013

Vanya

Tomo el café entre mis manos con cuidado e intento beberlo rápido sin que me queme la lengua. El ruido del claxon de un auto me hace apresurarme, dejo el bendito café a la mitad y tomo mis cosas antes salir. Hago un conteo mental queriendo saber si se me queda algo, salgo cuando creo que no he olvidado nada.

El frio de enero me eriza la piel a pesar del gran abrigo que llevo puesto. Camino con cuidado para no caerme por la nieve, aunque hoy la removí la que estaba de la casa sigo teniendo riesgo de caerme.

Llego victoriosa al auto y subo al asiento trasero.

─Millie ─grito alegre abrazándolo por detrás mientras está en el asiento del conductor.

Mi primo ríe con mi efusividad.

─Mi rusa demoníaca.

Ruedo los ojos.

─Eleonor ─digo entusiasmada. Despeino su cabello ganándome una mirada de muerte de su parte como planee, me gusta molestarla.

─Oye, venimos a patear un trasero por ti, trátame bonito.

Sonrío ante su confesión, sabía que una parte de su oscuro corazón tenía afecto por mí.

─Aww, gracias por venir, sinceramente no pensé que quisieras involucrarte.

─Escucha pequeña Campbell, la única persona que te puede hacer la vida imposible soy yo y quien intente usurpar mi lugar lo mandamos al diablo.

Eleonor cada día me sorprende más.

─Muchas gracias, Ele.

Me regala una sonrisa, Milton quien observaba el intercambio me da una mirada de "te dije que no era mala". En realidad, no es necesario aclarar porque siempre lo he sabido, solo soy un grano en el trasero la mayor parte del tiempo.

Me acomodo en mi asiento y pasamos el trayecto hasta el instituto charlando sobre el altercado con el profesor, aunque ya saben la historia porque ayer llamé a Milton para informarle. Mi primo se ofreció a venir cuando le conté lo sucedido, está realmente molesto por el comportamiento del profesor Clark, tan molesto que vino con el propósito de hablar con la directora para exigir que se tomen medidas contra profesor.

Reviso mi celular queriendo saber si Newt recibió mi mensaje, se supone que pasaría por mí, pero con la llegada de Milton no era necesario que lo hiciera.

─¿Vanya, me escuchaste? ─la voz de mi primo me saca de mis pensamientos.

─Estaba distraída ¿Qué dijiste?

─Te decía que bajaras del auto porque ya llegamos.

Observo el exterior para confirmar. Con rapidez tomo mis cosas bajando del auto seguida de ellos. Ni siquiera note cuando pasamos la caseta de seguridad del instituto.

─Escucha, lo más probable es que te hagan preguntas frente al profesor, pero si no quieres responder alguna puedes mirarme y yo me encargo.

Asiento.

─No soy abogada como tu primo, pero puedo defenderte como si fuera una.

─No lo dudo, Ele ─declaro sonriéndole.

Emprendemos el camino hacia la oficina de la directora, su secretaria nos atiende pidiendo que esperemos unos minutos. En la sala de espera para no aburrirnos le ayudo a Eleonor a escoger unos vestidos que desea comprar por internet. Le aconsejo escoger un vestido color vino muy hermoso que termina comprando uno de su talla y de la mía porque según ella nos veremos muy bonitas con ellos.

Si no es suficiente, déjame ir (#1) COMPLETAWhere stories live. Discover now