Rose Valley boys IV
No es necesario leer el resto de la saga para avanzar con esta lectura, pero se recomienda para una mejor comprensión de la historia.
Magnífica portada creada por @imfleurie ❤️
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MACKENZIE
Había llegado el momento de regresar a Oxford y se sentía horrible saber que la burbuja de tranquilidad y felicidad podía llegar a su fin en tanto pusiera un pie en el avión. Las responsabilidades volverían, tendría que trabajar ocho horas al día en un empleo que no me gustaba y estar en el mismo país que mi padre. El lado bueno era que Theo y yo tendríamos más privacidad y podríamos saber con seguridad si queríamos estar juntos o era una sensación provocada por las fiestas de fin de año.
ꟷAvisen cuando lleguen ꟷpidió Genesis y nos dedicó una sonrisa a todos mientras abrazaba por la cintura a su novioꟷ. Y no hagan muchas locuras.
ꟷCorrección: no tenemos que hacer locuras ilegales ꟷdijo Tylerꟷ. Bien, fue un placer verlos, pero nuestro vuelo sale en unos minutos.
El castaño y Emma comenzaron una ronda de abrazos y despedidas, en los rostros de ellos se notaba la verdadera tristeza y me sentí mal al ponerme en sus zapatos. Acababa de conocerlos; sin embargo, era obvio que para los cuatro era difícil estar lejos y mientras Taylor, Tyler y Genesis vivían en el mismo país y podían verse con más frecuencia, para Theo eso era imposible.
ꟷCuida a mi amigo, zanahoria ꟷme pidió mientras me dedicaba un abrazoꟷ. Te extrañaré.
ꟷCreí que habíamos acordado que no me dirías zanahoria.
ꟷUna última vez no daña a nadie.
Se alejó de mí y despeinó mi cabello mientras sonreía ampliamente, los hoyuelos enmarcando la curvatura de sus labios. Emma llegó entonces y, al igual que su novio, me abrazó.
ꟷEspero volver a verte pronto.
ꟷLo mismo digo, Em.
Terminadas las despedidas, los dos se alejaron de la mano hacia la puerta de embarque de viajes nacionales. Taylor y Genesis tenían que esperar un poco más por su vuelo y se habían quedado con nosotros para hacernos compañía, aunque en pocos minutos también íbamos a tener que despedirnos.
Permanecimos en el café que habíamos elegido para pasar el rato hasta que fue obvio que era tiempo de despedirnos. Aproveché los abrazos para agradecerle a la pareja por su apoyo y amistad durante esas vacaciones y les prometí que seguiría sus consejos al pie de la letra, algo que los tres sabíamos que no haría.
