The Look In Her Eyes

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JADE'S POV

Recuerdo que muchas veces me dije que no necesitaba su ayuda, que era inadmisible la posibilidad de que alguien me dijera que de no ser por Tori, tal vez no habría logrado tal cosa, porque era muy orgullosa, al menos respecto a ella, para admitir que de no ser por su paciencia y lo que en ese tiempo consideraba "Sus ganas de mostrarse como la mosquita muerta que no hacía nada a nadie", quizá no habría producido la obra que después de un buen tiempo me dejó ver a mi padre, porque de verdad consideraba que su ayuda era innecesaria.

Sin embargo aquí estaba, con ella a mi lado, poniendo todo en orden mientras yo parecía estar a punto de morir por un colapso a causa del estrés que me produce la gente que no hace las cosas como se las pido, con el segundo ensayo general a medias, el cual no era necesariamente obligatorio y fue forzado por mi espíritu perfeccionista, y varios chicos de postproducción y efectos especiales terminando de ubicar cosas aquí y allá. La presentación se había movido una semana antes por sugerencia del docente en jefe, y yo no tenía otra cosa en mente distinta a la inserción de mis tijeras en su cuello, a mi manera de ver todo estaba fuera de control... Pero Vega tenía otra perspectiva.

—Hey, mírame.— me giro para encararla con el entrecejo fruncido y las mejillas llenas de aire que expulso poco a poco por la boca, ella deja unas cuantas caricias en mi mejilla y solo hasta ese momento siento que puedo relajarme otra vez.

—Beck está listo, aunque no he logrado saber por qué decidiste darle ese papel.

—Porque Beck es el chico guapo y musculoso, y porque no iba a darle mi protagónico a Robbie y André ya me había pedido el papel de policía.— le sonrío viéndola reír, sus mejillas están sonrojadas por el calor y creo que un poco por la forma en que mis ojos se clavan fijamente en ella.

—¡No me mires así!— cubre su rostro con una copia del libreto haciéndome reír.

—No estoy viéndote de ninguna...

—¡Jade!— bufo, Robbie está enredado con un arnés que nunca tuvo que haberse puesto en la cinturilla de los jeans.

—Voy a matar al afro.— camino a pasos largos y logro llegar hasta alcanzarlo, lo atraigo a mi cuerpo tomándolo por el cuello de la camisa y sus ojos se llenan de temor.

—Robbie, Robbie.— lo suelto ocasionando que se estampe contra un muro por la fuerza con la que Beck tira del cable para ayudar a deshacer el nudo, me río al verlo golpearse la nariz y Cat corre en su auxilio.

—¡Muy bien alumnos!— el profesor O'connell da varias palmadas con intención de reunirnos en el centro del escenario del teatro Caja Negra, doy un sorbo a mi café, mis ojos están centrados en algún punto detrás del hombre con algunas canas en lo poco que le queda de cabello, Sinjin parece haber terminado de configurar la consola de efectos y levanta un pulgar en mi dirección; lo premio con una sonrisa a medias.

—Han hecho un excelente trabajo este último mes y medio, y sé que todo va a salir perfecto hoy; es su último año, y ya no importa se sienten estresados por el resultado porque para eso estamos nosotros tras bambalinas pendientes de lo que ustedes no puedan manejar. Hablo con usted, West.— mis ojos se abren con sorpresa y formo una "o" con los labios dejándolo ver que me sorprende el comentario.

—Todos han dado su máximo, ahora tienen una hora para descansar, aprovéchenla.

Se retira del lugar bebiendo una botella de agua y todos los ojos se posan en mí, abro mis brazos y con un ademán les indico que pueden irse si quieren.

—Va a salir bien.— me repito con los dedos en el puente de la nariz y los ojos cerrados, unos brazos rodean mi cintura y me relajo de inmediato cuando el olor a vainilla y menta inunda mis fosas nasales.

THE LOOK IN HER EYES [EDITANDO]Where stories live. Discover now