Relación: Ran Haitani x T/N ⚥︎
En el amor los sentimientos fluyen por el cuerpo alterando todos los sentidos, por eso sólo hizo falta un trato para provocar la reacción, pero duele, se supone que no debería, pero lo hace.
Y aunque sabes que dolerá...
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- Ven conmigo linda - dice Izana llevándote con él.
Te llevo junto a un grupo de personas que se encontraban cerca, había unas cuantas mujeres entre ellos y todos estaban en la misma sintonía.
Al verte llegar cada uno de ahí te barren con la mirada observando cada detalle de ti.
- ¿Quién es ella capitán? - pregunta alguien del grupo.
- El juguete de Ran, supongo que no va a molestarle que la tomé por un segundo ¿No es cierto Ran?
- ¡Tsk! No me importa - contesto Ran ignorando lo que pasaba ahí.
Claro que empezabas a sentirte mal por todas esa miradas y cada vez el enojo para Ran aumentaba por haberte traído aquí.
Aunque en el fondo él no quiso hacerlo, ignoro tus llamadas por estos días porque no quería que esto pasara, pero Izana lo obligó a traerte aquí. Estaba enojado con Izana, pero no puede decirle nada, era su capitán y de una forma u otra lo respetaba, pero en el interior empezaba a sofocarle si quiera pensar en tener que compartir.
Ese enojo acumulado con Ran estaba a punto de explotar. Creo que gran parte de su típica esencia comenzaba a perderse.
- No me toques - quitaste tu brazo de las manos de Izana.
Eso los sorprendió a todos ahí dejando algunos con la boca abierta y una leve sonrisa se formó en los labios de Ran.
Izana ciertamente lo estaba viendo como un desafío tuyo.
Después de todo no sabe cómo es que terminaste enredada con Ran, le resulta curioso si quiera que hables con él. Él siempre se ha portado muy mezquino en cualquier relación, pero había un cierto interés de su parte en ti.
- Oh vamos, solo iremos a hablar - Izana volvió a jalarte junto a él y te llevo hasta el centro de todas esas personas donde te sentó a su lado.
Ran se mantenía al margen de la situación, aparentaba mostrarse indiferente, pero por dentro se estaba torturando.
Y como estabas enojada con Ran querías darle una venganza, una que sabías que lo iba llevar hasta la locura.
- Venga ¿Qué quieres hacer? - le preguntaste a Izana con un tono coqueto.
En su rostro se esparció una sonrisa, al fin estaba consiguiendo tu cooperación.
- ¿Golpearías a alguien por mí? - te pregunto acercándose a ti.
- No, no tengo motivos para seguirte - le contestaste alejando tu cara de él.
Agarraste una cerveza de la mesa y comenzaste a beber. Todos se quedaron atentos a ti, se sentía como si estuvieran analizando todo de ti, como si fueras un examen al que tuvieran que poner toda su atención.
