Capítulo 100

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No es una práctica deliberada, pero parece que la familia Cheng Jin no es tan sensible al alcohol y no se emborracha con facilidad. Sin embargo, a Cheng Jin no le gustaba beber, y cualquier vino tenía un sabor extraño en su boca, por lo que rara vez lo tocaba. Pero como había asistido a más fiestas, podía distinguir más o menos la diferencia entre estar borracho y estar sobrio.

Incluso cuando Lu Tao negó inmediatamente sus palabras, Cheng Jin sintió que algo iba mal.

No sabía cuánto podía beber Lu Tao, nunca había bebido juntos, ni siquiera había visto a Lu Tao beber en persona, sólo había olido el alcohol en él una o dos veces. El segundo Lu Tao también sólo probó un poco de vino de frutas juntos, en ese momento tampoco vio la pobre capacidad de beber de la otra parte ah.

¿Es posible que lo que vende... no sea vino, sino éxtasis?

Cheng Jin levantó con recelo la botella, sólo para mirarla de cerca, Lu Tao abrió la boca: "No más bebida".

Cheng Jin se apresuró a dejar la taza y se rió secamente: "No más, no más, bebe un poco de sopa".

-"Mmm..."

Este largo sonido también hizo que Cheng Jin se sintiera fantástico, después de todo, Lu Tao normalmente hablaba como una persona aguda, y nunca entonaría tal tono de voz.

Así que era realmente posible que esta persona... estuviera borracha, ¿verdad?

Cuando terminó de pagar, Cheng Jin resistió el impulso de ayudar a Lu Tao, pero la otra parte se detuvo de repente en su camino y extendió su mano hacia él. Cheng Jin se quedó helado y tardó un rato en entregar su mano tímidamente, y luego la agarró.


La otra parte siempre le había empujado, pero era la primera vez que le cogía la mano, y Cheng Jin no estaba llorando, pero estaba definitivamente nervioso. Le condujeron de vuelta al hotel, y cuando pulsó la planta del ascensor, Lu Tao parecía un poco indeciso, por lo que Cheng Jin le miró detenidamente, y luego estiró la otra mano y pulsó el número de planta del ascensor. Lu Tao le dirigió una mirada y la retiró lentamente, poniéndose de nuevo en postura militar, salvo que seguía sosteniendo su mano.

Y cuando bajaron del ascensor, Lu Tao volvió a estar claramente confundido, incapaz de distinguir cuál era la habitación que habían reservado. Al ver que estaba a punto de guiarlo, Cheng Jin sólo tuvo que decir: "Es aquí". Y entonces no pudo evitar preguntar: "¿Estás realmente borracho?"

-"No." Lu Tao abrió la puerta con los mismos movimientos bruscos, pero evidentemente estaba un poco confundido después de entrar en la habitación, como si no pudiera entender la situación actual. Cheng Jin no pudo evitar divertirse y, con cierta reticencia, le soltó la mano, diciendo: "Primero iré a ducharme".

-"Bien".

Las habitaciones de los acompañantes del hotel estaban equipadas con limpiadores desechables, así que tras entrar en el baño, Cheng Jin se dio una buena limpieza, lavándose de pies a cabeza antes de ponerse la bata y salir.

El almirante estaba sentado en el sofá, con la espalda todavía recta, sin hacer nada, con las manos apoyadas limpiamente en el regazo, como si esperara a ser llamado por su superior en cualquier momento. Oyó un sonido antes de inclinar la cabeza, sus ojos se posaron en el pecho de Cheng Jin que estaba deliberadamente abierto un poco, sus ojos se oscurecieron pero no dijo nada.

De hecho, Cheng Jin quería salir desnudo, pero al final no le apetecía, y además sentía que su figura actual no era buena, así que se puso la bata, pero no pudo evitar separar un poco el cuello, dejando al descubierto su delicada clavícula y su reluciente piel blanca. Su pelo no estaba completamente seco, su cara estaba limpia y sus labios rojos, y su aspecto era muy atractivo.

S. D. DDonde viven las historias. Descúbrelo ahora