Yo no deseé esto[Moonsun]

《50- final》

"Hoy fue encontrado el cuerpo sin vida de Lee Minho, de diecinueve años de edad. Favor comunicarse con..."

La televisión fue apagada por el padre de Moonbyul, ya suficiente oyeron aquella semana.

— Hoy iré nuevamente— Habló con calma la menor.

— Sí hija, gracias.

  Luego de aquellos días de locura buscando a Byul, al fin las cosas parecían tomar su rumbo.

   La muerte de Minho pegó tan duro en su familia, que todos volvieron a su país natal para alejarse. La policía no podía hacer nada en contra de eso, pues ninguno estuvo implicado en ese caso, incluso dieron pruebas de que no sabían nada de Minho hace más de tres meses.

  Moonbyul seguía sin despertar,  internada por aquel disparo. Mientras Yongsun iba todos los días a verla y a veces se turnaba con su suegro cuando no podía.

Wheein y Hyejin decidieron quedarse a acompañarlas, solo hasta que Byulyi se recupere y se le atrape al segundo hombre implicado en el caso.

— Sé que aunque no puedes hablar, me escuchas bien— Comenzó Yongsun, tratando de mantenerse serena. — Sabes... tu papá fue despedido de su trabajo, pero está tan feliz de quedarse en casa que no pude evitar pasarle dinero de vez en cuándo.

— Wheein y yo...— Siguió Hyejin— Estamos viendo para hacer una inseminación artificial y tener un hijo o hija.

— Heechul aceptó a Yongsun— Confesó Wheein— A pesar de que no está de acuerdo, dijo que respetaría todo lo que su hermanita quisiera hacer de su vida. Encima la dejó ir a vivir con ustedes.

— Ves, todos estamos yendo bien en estos últimos tiempos— La joven estaba a punto de llorar, su corazón dolía y su cuerpo se notaba tan cansado— Sólo faltas tú, Moonbyul. Te necesito tanto, amor.

  El silencio de la habitación, hizo que las tres comenzaran a pensar demasiado. Pasaron por tanto en ese tiempo dónde ella desapareció, que creían aún que todo era un mal sueño.

— Moonbyul, te amo. Despierta pronto, corazón— Eso último fue lo que pudo decir antes de ir afuera del hospital.

Iba siempre. Con lluvia, frío o neblina, pero nunca faltaba a verla. Tenía esperanzas de ser lo primero que su novia viera al despertar.

— Moonbyul...

Cuatro.

Cinco.

— Hoy fui a la casa de una amiga y me dijo que estaba más flaca de lo normal. Me hizo sentir mal que me felicitara por eso cuando yo no andaba comiendo más de la preocupación por tí.

Seis.

Siete.

— Ya estamos preparando todo para festejarle el cumple a tu papá, solo falta que tú despiertes Moon.

Ocho.

Nueve.

— ¿Me estarás escuchando realmente?— Preguntaba, más para sí misma que para su novia allí acostada en la cama de un hospital.

  Ella era fuerte y siempre solía mantener la cabeza en alto, era fiel creyente de que las cosas sucedían por algo; pero en esta ocasión, incluso las oraciones le estaban pareciendo falsas.

Ya nada la estaba haciendo realmente feliz. Allí tomando la mano de su preciosa chica, lloraba desconsoladamente.

— Vamos despierta, por favor, dime algo.