Yo no deseé esto[Moonsun]

《14》

MOONBYUL

  Llegué a su casa y comencé a golpear la puerta sin paciencia, casi tirandola.

—¡Abran!¡Abran ahora!–Estaba al borde del llanto. Solo pensar que su madre fuese capaz de lo peor con ella.

  Luego de unos segundos, la mujer desesperada me abrió la puerta.

—¡¿Qué demonios quieres a estas horas niña estúpida?!

—¿Dónde está Yongsun?–Pregunté un poco más calmada. Observé que su madre tenía los ojos casi pegados todavía del sueño y no había rastros de que hubo algún escándalo en su casa. Esto se me tornó tedioso.

—En su habitación, durmiendo como toda persona civilizada hace a estas horas- Dijo casi en regaño hacia mí,lo que no me importó en lo absoluto.

—¿Podría subir a verla?- La mujer levantó una ceja en señal de duda— porfavor.

  Luego de unos segundos, aceptó y me dio paso a entrar.

—Solo por unos minutos, luego te quiero fuera de mi casa.

—Si, muchas gracias– Estaría más calmada al verla dormir plácidamente y no golpeada y llorando como me la imaginaba por el camino.

  Sin golpear la puerta, entré a su habitación y me acerqué a la cama para mirarla. Grande fue mi sorpresa al ver nada más que muchas sábanas, unas arriba de otras y ninguna Yongsun en el medio. Lo primero que se me vino a la mente fue que se suicidó en el baño y corrí a buscarla allí.

—¿Ahora qué demonios te sucede?- Me dijo la madre de Yongsun, parada en medio de la sala. Estaba siendo testigo de cómo corría rumbo al baño de su casa. No recibió respuesta, no estaba de ánimos para hablarle a nadie. Todo se volvió preocupación y mi cabeza se llenó de miles de cosas que pudieron pasarle; sentía ganas de golpear a alguien.

  Peor fue para mí no encontrar nada en el baño, asi que recorrí parte por parte la casa de mi amiga, sin lograr encontrarla. Mi miedo se hizo más grande y sin decir más salí de la casa bajo la atenta y confusa mirada de la dueña.

  Estaba decidida a buscar por toda la calle, hasta que sentí haber pisado algo y me agacho a mirar. El celular de Yongsun yacía justo bajo mi pie derecho. Rápidamente decido levantarlo y me doy cuenta que estaba rota la pantalla, y que no prendía.

 —¡Oye tú!–Una voz que reconocí al instante llamó a mis espaldas— ¿Dónde está mi hija?¿Porqué no me dijiste que huyó? - Sus ojos estaban rojos, al parecer por las lágrimas que no tardaron en salir.

—Yo tampoco sé señora, pero intente calmarse, la voy a encontrar se lo juro- Dicho esto fui al parque a buscar alguna pista de a dónde podría estar Yongsun.

   Si de algo estaba segura, es que a salvo no se encontraba.