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- ¡Waaah, es muy grande! - Ortho y Yui habían dicho lo mismo mientras se les veía alabar el lugar donde se iban a quedar.
- Si, si, lo que sea, iré a pagar la entrada, cuanto antes lo haga, más rápido podré entrar a la habitación... - Idia no se veía igual de emocionado que su hermanito y novia, al contrario, quería que el suelo se lo tragara. - Yui... ¿Puedes..? - Olvido que apenas podía hablar con las personas.
Yui suspiro, tomó la huesuda mano de su compañero y ambos entraron a pedir una habitación.
- Muchas gracias por venir, Yui-San, de lo contrario, nos hubiéramos quedado en casa... Aburridos. - Ortho estaba contento de salir, Grimm se quejo ya que el chico lo estaba cargando.
- Sin problemas Ortho-kun, no necesitas a Idia, aquí estoy yo. - Respondió Yui mientras firmaba varios papeles, Idia le miró con mala cara, luego le dio una tarjeta para pagar el hospedamiento.
- Disfruten de su estancia. - Fue lo último que le dijo la recepcionista, Yui le sonrió para después devolver la tarjeta.
- Ah, creí que iba morir allá afuera.. - Dijo Idia, estaba agradecido de por fin ver los pasillos que llevaban a los cuartos...
- Y yo creí que iba a morir con todas estas bolsas... ¿Qué diablos trajiste, Grimm? - Tan pronto como entraron a su habitación, Yui dejó caer el equipaje que se suponía, eran cosas de ambos.
- Cosas de utilidad. ¡Ortho, vamos abajo, vi que tenían atún! - El monstruo emocionado, la ignoro completamente, eso hizo enojar un poco a la chica.
- Yui, levanta eso, te vas a caer. - Le dijo su chico, ella suspiro, y con la poca fuerza que le quedaba lo hizo, aunque bueno, de los dos, ella era más fuerte, pero no mentía, si estaba cansada. Tal vez de tanto viajar...
- ¡Yui-San, vamos abajo! Vi algunas cosas de la conejita que te gusta, también podemos ir a pasear... ¡Oh! ¿Podemos...? - Si, el gato y el chico querían salir a explorar, no se les culpaba, puesto a que ambos salían muy poco.
- Ortho, tienen dos semanas para ir a hacer eso, por ahora, acomodemos las cosas... - Bueno, sin duda tenían mucho por hacer.
- Tu hermano mayor tiene razón, Ortho-kun, vayan a explorar ustedes, yo los alcanzo en un rato. - Yui tomó una de sus maletas y la abrió, dispuesta a terminar rápido, quería dormir una siesta...
