𝐅𝐎𝐑𝐄𝐕𝐄𝐑 𝐀𝐍𝐃 𝐀𝐋𝐖𝐀𝐘𝐒 | Courtney Swan nunca ha seguido las reglas. Jasper Hale siempre lo ha hecho. Así que, por supuesto, el destino los junta.
𝐉𝐀𝐒𝐏𝐄𝐑 𝐇𝐀𝐋𝐄 𝐗 𝐅𝐄𝐌! 𝐎𝐂 | 𝐏𝐀𝐑𝐓 𝐎𝐅 𝐓𝐇𝐄 '𝐀𝐋𝐋𝐔𝐑𝐄' 𝐒𝐄𝐑𝐈𝐄𝐒 |...
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capítulo treinta y ocho . . . hablar de eso
—¡Ni siquiera lo intentes!
Jessica se burló cuando abrí la puerta de mi casa, entrando y poniendo los ojos en blanco. —Sabes que Brad Pitt está bueno.
—¡Cállate! —Me reí, poniendo un dedo en mis labios para decir que probablemente Bella estaba durmiendo—. ¡No puedes convencerme!
—Puedo y lo haré... —comenzó Jessica, con una sonrisa en su rostro. Rápidamente se desvaneció cuando se dio la vuelta, su rostro parecía ponerse pálido como un fantasma—. Um —señaló detrás de mí, así que fruncí el ceño y me di la vuelta, jadeando de inmediato y sintiendo que mi corazón se aceleraba.
—¿Edward? ¿Por qué diablos estás en mi casa?
Los hombros de Edward se hundieron y se pasó la mano por la cara. —Gracias a Dios —Se acercó y me dio un abrazo que duró una fracción de segundo.
—Oh por...
Ambos levantamos la vista al unísono para mirar a Jessica, que parecía como si estuviera considerando escribir un blog en este momento. —Um, está bien, me voy a... —murmuró, sin perder tiempo en salir por la puerta.
Tan pronto como la puerta se cerró, me giré hacia Edward. —¿Que está pasando?
—Alguien estuvo aquí, ¡tienes que venir conmigo ahora mismo! —Exclamó, agarrando mi mano y arrastrándome tan pronto como los faros de Jessica desaparecieron de la vista. Ni siquiera noté su auto estacionado en la calle.
—¿Alguien? ¿Quien...
Se giró hacia mí, su rostro odiosamente hermoso desalentador. —Sadie.
***
—¡Que demonios! —exigí, agarrando el vaso de agua que Esme me dio con demasiada fuerza en mis manos. Alice se paseaba por la habitación, luciendo como una bailarina muy agresiva.
—¿Qué se llevó? ¿Y por qué lo hace?
—El miedo sería mi suposición —Respondió Carlisle, palmeando mi brazo tranquilizadoramente, caminando hacia Alice para hacer lo mismo—. En cuanto a lo que tomó, Edward.
—Una blusa roja de Bella —Edward comenzó, mirando agujeros en la cara inexpresiva de mi hermana—. Y una especie de osito de peluche de Courtney.
Ni siquiera recuerdo al cien por cien lo que sucedió después de eso, una oleada de ira que estaba tan al rojo vivo que me cegó brilló debajo de mis ojos, me giré y arrojé el vaso en mi mano justo contra la puerta, rompiéndolo contra la madera, segundos antes de que Emmett la abriera.
