FOREVER AND ALWAYS ━━ jasper hale ✓

064 . very close

capítulo sesenta y cuatro . . .
muy cerca

Luchar.

Definido como la acción de pelear; violencia o conflicto... Estaba tan preparada para eso. Para luchar, ¿sabes? Darle un puñetazo a la rubia de trece años que me ahorcó justo en la garganta. Eso era lo que estaba lista para hacer, así que inhalé y exhalé, mi mano apretó fuertemente la de Jasper.

Estábamos todos en silencio en el claro mientras esperábamos a los Volturi. Sentí que otra mano agarraba la mía de repente, y me giré para ver a Clara mirando al frente, el viento helado soplando a través de su cabello mientras sostenía mi mano.

Apreté la de ella una vez y volví a mirar directamente a la brumosa niebla que se tragaba el campo. El aire me picaba en la nariz, pero seguí respirando profundamente, con la esperanza de que me mantuviera algo calmada.

Calma.

No mostrar o sentir nerviosismo, ira u otras emociones fuertes... ha, tal vez en el exterior. Por dentro, estoy enloqueciendo. Siento que voy a explotar físicamente. Mis nervios están tan altos que siento que estoy drogada. Siento que podría dar vueltas por todo este campo en una fracción de segundo... Solo quería que estos estúpidos vampiros aparecieran para poder relajarme.

—¿Qué diablos les está tomando tanto tiempo? —Finalmente no pude soportarlo más, y Carlisle ni siquiera me miró antes de hablar.

—Están aquí.

Casi como si los Vulturi quisieran probar su punto, la niebla en el aire pareció espesarse, pero podía sentir mis nervios de punta. —Vienen los casacas rojas, vienen los casacas rojas —Garrett murmuró por lo bajo y respiré hondo antes de responder.

—Rochambeau.

—Aro está buscando a Alice —Edward explicó, y sentí una calidez inundar el aire, volteándome para ver a un lobo familiar de pie junto a Clara. El grande y plateado que vi en el prado... Paul.

Cuando el hombre de ojos rojos habló, su voz era casi tan espeluznante como su extraño cabello.

—Courtney Swan. Me gustaría hablar con Courtney Swan.

Todos en nuestro grupo se tensaron colectivamente cuando los ojos rojos de los Vulturi se giraron para mirarme. Tragué saliva, aspirando otra espesa bocanada de aire. Por supuesto que estos tipos quieren hablar conmigo... ¿Quién era yo para esperar que finalmente pudiera ser normal en una guerra?

—Está bien —le dije a Jasper, cuyos ojos ámbar se entrecerraron en dos rendijas mientras miraba al anciano pálido frente a nosotros. Deslicé mi mano suavemente—. Lo prometo.