Alguna vez nosotros

Capitulo 7: Los rumores vuelan

Quinn

—Así que los rumores son ciertos...—comenta nada más al verme, doña Maggie, a quien no se le escapa ningún chisme del pueblo, se levanta de la mecedora que se encuentra en el porche de su casa y me lanza un repaso de arriba abajo con la mirada—, La pequeña Lovelace ha vuelto a la ciudad.

Es una figura importante del pueblo, en cada festividad, en las misas, en cada reunión, a donde sea que vayas, ahí esta ella. Conoce a todos y sabe absolutamente todo lo que pasa en este pueblo, aun cuando nada interesante este pasando en Memphis, ella hará que pase. Muy pocas personas saben esto, pero el 90% de los chismes que ocurren en Memphis, son inventados por ella. Hay que andarse con cuidado cuando se trata de ella.

—Veo que algunas cosas nunca cambian...—me detengo frente a ella, no tiene ningún sentido intentar escaparme de esta situación. Además, su casa estaba ubicada precisamente frente a la mía—, Algunos vecinos siguen siendo tan entrometidos como siempre.

—Esa no es forma de hablarle a tu abuela, jovencita—me regaña.

Si, así es, Margaret 'Maggie' Lovelace, es mi abuela paterna. Supongo que de ella herede lo chismosa, por eso mi madre siempre dice que no es bueno ponerle los nombres de los abuelos a los hijos. Ambas somos curiosas, queremos saberlo todo de todos y metemos las narices hasta donde no nos llaman, pero la diferencia entre nosotras es que yo decidí hacer de nuestra habilidad para enterarnos de todo sobre todo en una carrera y estudiar periodismo y ella solo disfruta sembrar caos en un pueblo pequeño.

—Hola, abuela.

—¿Has encontrado ya un buen prospecto en la gran ciudad? Espero que me traigas un jovencito de buena familia y mucho dinero—habla con petulancia—, No como tu hermana, Shannon, comprometida con un abogado de pueblo.—Frunce el ceño con disgusto al comentar la ultimo. 

Puede que no conozca mucho a Phillip, pero sé que es una buena persona y pronto se convertirá en mi cuñado, no permitiré que hable así sobre él.

—Mi carrera va muy bien y tengo un empleo estable, gracias por preguntar. —le suelto con molestia—. Además, tengo entendido que Phillip es un veterinario y es hijo de los dueños del mejor bufete de abogados de Memphis.

No es que a Shannon le importe mucho eso, la verdad. Eligió a Phillip porque lo quiere, la respeta y la comprende. También es la única persona del mundo que soporta su obsesión por el control y ser perfecta. Se conocieron en la universidad, cuando ambos estudiaban derecho. Phillip no estaba muy contento con la carrera que estudiaba y Shannon fue la única persona en apoyarlo en su sueño de estudiar para ser veterinario.

Ambos se han apoyado mutuamente durante muchos años, han visto al otro cumplir sueños y alcanzar metas laborales, se entienden entre ellos y se complementan. Phillip es relajado, Shannon es más estructurada, Phillip es desordenado y Shannon aspira a la perfección. Son distintos, pero ambos harían lo que fuera porque el otro sea feliz.

Él es el perfecto Chandler Bing de su Mónica Geller.

—Hablo enserio, Quinn— La abuela Maggie coloca sus manos sobre mis hombros y me mira con seriedad—. Eres la esperanza de esta familia, Shannon es un caso perdido.

Esperen... ¿En qué momento me convertí en la Amy March de la familia?

—¿Quinn? —reconozco esa dulce voz al instante, Lilian, mi abuela materna, sale de casa de la abuela Maggie y corre a abrazarme y apretuja mis mejillas—. ¡Oh! ¡Mi pequeña periodista ha vuelto a casa!

No es de extrañarse que se encuentre de visita, ambas se llevan muy bien, pese a ser de distintas personalidades. La abuela Maggie podría llegar a ser tan cariñosa como Lilian cuando se trata de la familia, pero lo de ella es mas de cotilleos y disfrutar de ver el mundo arder, mientras la abuela Lilian es mas de cariños, buena energía, amor y paz.