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Wanda Pov.

-¿A dónde se supone que vamos a ir?-. Pregunté sujetando bien en su silla a mi pequeña Lizzie que reía.

-Iremos a una una dirtbikekidz, será estupendo y mis hijos podrán competir, sentir la adrenalina corriendo por sus cuerpos, será genial amor-. Me aseguró acercándose para tomarme de la cintura y besarme castamente en los labios.

-Mmm-hmm, aún no sé cómo tienes la capacidad de convencerme de hacer estás locuras-. Murmuré entre besos soltando una pequeña risita.

-¡Mamás! Vamos, dejen de besarse que se nos hará tarde-. Gruñó Billy separándonos con un pequeño puchero.

-Que grosero eres cachorro, déjame besar a mi esposa-. Gruñó mi pelirroja sexy pero aún así se alejo.

-Tienen todo el día para darse amor, vamos, quiero llegar temprano y ver a mis rivales-. Dijo Tommy con una sonrisa atravida igual que la que hace Natasha.

-Bien, los cachorros molestos mandan, sube al coche amorcito-. Me dijo Natasha con un guiño y yo rode los ojos mírando a mis hijos gritar y subirse al coche.

-Niños por todos lados es lo que tengo, deberían pagarme por mantener a una niña grande-. Le dije con burla sacándole la lengua.

-Oye, más respeto que ya te he demostrado que no soy una niña, además ya no hay devoluciones, firmaste un contrato llamado matrimonio, ahora te aguantas-. Me dijo con una sonrisa, subiendo y bajando las cejas.

-Lo sé... Solo que es lindo verte hacer pucheros cuando lo digo-. Contesté dándole un guiño para luego subir al coche escuchado como se quejaba.

Miré por el retrovisor a mis pequeños, Billy y Tommy estaban molestándose mutuamente como siempre y de alguna manera Lizzie siempre se metía en aquellas peleas provocando un gran escándalo en la parte de atrás, mi Natasha y yo ya nos hemos acostumbrado a sus locuras, a sus gritos y a pesar de que algunos pensaran que la discusión era fuerte por sus voces altas, no era así... Ellos tres solo disfrutan dialogar en voz alta, cuando hay silencio ahí si hay que preocuparse o cuando alguien grita por una de las dos.

Una vez Billy tomo una botella de Coca-Cola y golpeo a su hermano, luego Tommy en represalia le destruyó un lindo coche que Natasha y nuestros amigos de alguna manera lograron reconstruir, así tan lindos, educados y pequeños como los ven, son un caso demasiado loco, Romanoff tenían que ser, aún así los amo, todo mundo cree también que yo soy la madre "enojona" y Natasha la madre "divertida" pero están muy equivocados, bueno... No tanto pero Natasha siempre me apoya en asuntos de regaños e incluso mis hijos saben que cuando Natasha se enoja es por qué realmente es malo, nunca les gritamos ni golpeamos por qué no es la educación que queremos para ellos.

Pero si los mandamos a su cuarto, Natasha y yo solemos quitarles las cosas que les gustan y Natasha suele llevarlos al taller para que aprecien las cosas, los hace trabajar aunque no cargan cosas pesadas, muchas veces lloraron por eso pero entienden lo que hicieron mal y vuelve la calma, mi esposa es mi alma gemela, todo entre nosotras es un cincuenta y cincuenta, a veces yo doy un ochenta y mi esposa un veinte o al revés, las cosas no siempre son de color rosa pero sabemos llevar nuestra relación por el buen camino.

Mi Lizzie no suele dar muchos problemas, excepto cuando se pelea con Kira, esas dos quieren los juguetes de la otra y siempre se están molestando, aunque es como un amor-odio, Kira siempre anda cuidando de nuestra pequeña, en realidad creo que fue la que la enseño a gatear por qué mi pequeña Lizzie comenzó a gatear de una manera muy chistosa que siempre nos hacía reír.

-¡Si! Mira mami, hay tantas motocicletas-. Gritó emocionado Tommy pegando su frente con el vidrio cuándo llegamos al lugar.

-Oh si amor, demasiado ruido y tierra-. Comenté dirigiendo mi mirada a mi esposa mientras ella se estacionaba.

¿Madrastra? (Scarletwidow)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora