La vida de Akala Winter

59. Reaparición de brujas y lobos (Parte 1)

Por la mañana temprano, Akira se coló en el instituto para hacer sonar la alarma de evacuación. Sin que nadie se dieran cuenta, incendió una clase para que estas se cancelaran por todo el día. Después de eso también hizo que el personal que trabajaba allí se fuera por una plaga de ratas.

-Fue muy fácil- dijo el chico volviendo a donde se encontraba Akala.

-Tenemos que llevarnos todo esto y ocultarlo en los lugares que indiqué- dijo la chica rubia cuando Akira había vuelto.

La chica llevaba en las manos varias trampas que ayudarían a la captura de la bruja, por lo que los dos chicos se pusieron manos a la obra y se llevaron todo lo que necesitaban para el plan. Mientras, en la manada, los chicos habían vuelto a ella por la cancelación de clases, era la segunda vez que ocurría lo del incendio.

-¿Qué hacemos ahora que no tenemos clase?- preguntó Lena.

Thiago seguía procesando todo lo que ocurrió ayer en el hospital. No le dijo a nadie nada sobre el chico de ojos rojos.

-Al parecer también hay una plaga de ratas- dijo Kai cuando se enteró de la noticia.

-Genial, solo falta que le caiga una bomba- dijo Tala frunciendo el ceño.

-Es un poco raro que suceda todo eso en un día- dijo Kiara quien andaba muy desaparecida últimamente.

-Yo me iré- dijo Enzo -Haced lo que queráis- dijo marchándose.

Los chicos hicieron lo mismo que el moreno y cada uno fue por su camino. Thiago siguió el camino que tomó su Alpha, tenía que hablar con él sobre algunas cosas. 

-¿Entonces ya está?- dijo Marco mirando a Milo.

Milo tenía todo recogido, listo para irse de donde volvió. Damon escuchó su petición, aunque al principio el hombre no dijo nada, al final aceptó ayudarlo.

-Contáctanos para saber que estás a salvo- dijo Nico preocupado.

-Si está viva, la encontraré- dijo el chico mirando al Alpha -Gracias por todo.

-¿Seguro que no quieres que vayamos contigo?- le preguntó Luka.

-Es algo que necesito hacer yo solo- dijo el castaño -Solo así podré aceptar la realidad.

-Cuídate- dijeron los tres chicos viendo como Milo se iba solo.

Ya casi estaba todo listo, la mañana casi terminaba y daba comienzo la tarde.

-Me costó mucho conseguir esto- dijo Akala sacando una tiza.

-¿Eso no es lo que usan en las pizarras?- dijo Akira extrañado mirando el objeto.

-Esta es especial, puede neutralizar la magia- dijo la chica mirando al chico -Solo tenemos que pintar una línea cerrada y cuando ella este dentro no podrá usar sus poderes.

-Pero no es muy grande- dijo el chico albino.

-Por eso la usaremos en una sola sala y la atraeremos a allí- explicó la chica.

-¿Cómo la conseguiste?- dijo curioso el chico lobo por la pequeña cantidad que tenía -¿No podías conseguir más?- 

-En el Mercado Negro, aunque no me gustó tener que comprar algo ahí- dijo Akala -Si estuviera Aya, no tendría que haber recurrido a eso.

La chica, junto al chico lobo, buscaron la sala que mejor les viniera y con el objeto mágico pintaron los filos donde se juntaba la pared con el suelo, así la tiza pasaría desapercibida.

-No te ves bien- dijo Enzo observando a su Beta.

Los dos lobos estaban sentados uno enfrente del otro. Llevaban toda la mañana juntos, pero Thiago no se había atrevido a decirle nada a Enzo.