16. Castigo para los que desobedecen

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Los chicos volvieron a la manada después de las clases y el joven Alpha llamó a Thiago y Kai separándolos de los demás. Los dos chicos se comportaron raro con la chica nueva y eso no pasó desapercibido.

-Hablad- ordenó Enzo.

-¿Sobre qué?- preguntó el rubio.

-Sobre la chica nueva- dijo el moreno -¿Qué sabeis de ella? ¿De qué la conoceis?

-Fue ella la que nos dio el antídoto de Lena- soltó Kai delatándolos.

-Kai- susurró Thiago mirando al chico pelirrojo para que no dijera nada.

-¿Es la culpable?- preguntó el Alpha.

-No estamos seguros- habló Thiago apartando la vista de Kai.

-¿Y os fiasteis de lo que os dio?- dijo el moreno mirándolos.

-No, pero era lo único que teniamos- dijo Thiago apretando los puños -Así que lo probé antes y se lo di a Lena- dijo el rubio mirando al Alpha a los ojos.

-¿Pusiste la vida de Lena en peligro?- preguntó enfadado Enzo.

El chico no respondió, por lo que su silencio confirmó lo que dijo el moreno.

-Transformaos- ordenó el Alpha.

-Enzo- dijo Thiago preocupado por Kai.

-¡Ahora!- gritó el moreno.

Kai se transformó el primero, era un lobo de pelaje rojizo, parecido al de su hermana, pero de tamaño más pequeño. Thiago le siguió después, transformándose en un lobo negro con el hocico y la parte de los ojos blancos, además de las patas.

-"Enzo"- gruñó Thiago -"¿De verdad tenemos que hacer esto?"

-Sí, soy el Alpha y me escondisteis información, así que tengo que castigaros- dijo transformándose en un lobo plateado -Sabeis que si hay problemas o teneis información, teneis que decírmelo de inmediato.

-"Era una situación crítica, necesitabamos una solución cuanto antes"- dijo desesperado el lobo negro.

-"Aceptaré el castigo"- dijo Kai con tono pesado y sin poner resistencia.

-"No, tú no tienes la culpa, la decisión la tome yo"- le dijo Thiago a Kai -"Yo me haré responsable de todo"- dijo asumiendo la culpa.

-"Bien, atacadme"- dijo Enzo sin hacer caso a las palabras del rubio.

-"Deja a Kai, él no tiene la culpa"- volvió a intentar Thiago.

-"Si no atacais vosotros, lo haré yo"- dijo el lobo plateado siendo el primero en moverse.

El lobo negro cubría al rojizo, pero no se quedó atrás y al ver como el plateado se disponía a atacarle, se defendió. Enzo era más fuerte y rápido, por lo que esquivó el ataque de Thiago y le arañó la mejilla. Thiago gruñó por el dolor, pero no se apartó de delante de Kai.

-"Kai, solo quédate detrás de mi"- le dijo Thiago.

Enzo se volvió a lanzar contra el lobo negro y acabó clavando sus colmillos en la pata izquierda de Thiago, quien se distrajo por unos minutos al hablar. El lobo negro soltó un aullido de dolor y al separarse de Enzo, gotas de sangre cayeron al suelo. Había estado a punto de partirle el hueso, pero logró apartarse a tiempo, aunque sí le hizo una herida profunda.

-¿Qué pasa aquí?- dijo Tala apareciendo.

La chica buscaba a su hermano y escuchó el aullido de Thiago, por lo que se dirigió al sitio.

-"Están recibiendo el castigo por desobedecer"- dijo Enzo a la pelirroja.

-¿Qué hicieron? ¿Por qué está Kai también aquí?- dijo Tala viendo a su hermano y frunciendo el ceño.

-"Ocultaron información y pusieron en peligro la vida de alguien"- contestó el Alpha -"Tu hermano participó en ello"- terminó diciendo.

-"Él no hizo nada, excepto recibir el frasco con el antídoto, nosotros no lo pedimos y aun así la chica nos lo dio"- explicó el rubio -"Yo tengo la culpa, yo decidí dárselo sin consultarlo con nadie"- dijo mirando a Kai con arrepentimiento.

-"¿Es eso verdad?"- le preguntó Enzo a Kai.

-"Sí"- afirmó el pelirrojo con la cabeza agachada.

-Tomaré el lugar de mi hermano y recibiré su castigo- dijo Tala protegiendo a su hermano.

Enzo lo pensó un poco y gruñó molesto.

-"El castigo termina aquí- dijo finalizándolo -"Creo que habeis aprendido la lección o por lo menos eso espero"- dijo para después marcharse.

Los dos chicos se volvieron a transformas. Thiago tenía arañazos en la cara y un brazo lleno de sangre por la herida que le hizo Enzo.

-Lo siento- se disculpó el pelirrojo.

-No lo hagas, no tienes la culpa- dijo el rubio -Me lo tenía merecido.

-Quiero que luego me cuentes qué ocurrió- le dijo Tala a Kai -Ahora llevemos a Thiago a que le curen ese brazo.

Mientras curaban a Thiago, le contaron lo que pasó a la pelirroja. La chica no se lo tomó a bien y se cabreó muchísimo con los dos chicos. Rato después, el Alpha los llamó a todos.

-Chicos, quiero que no os acerqueis a la alumna nueva- dijo el moreno.

-¿Qué? ¿Por qué?- se quejó Lena.

-Desconocemos si es una amenaza y hasta que no lo descubramos, no podeis estar cerca de ella- explicó Enzo.

-¿Y qué pasa con Akala y Milo?- preguntó Kai.

-Nunca me cayó bien esa chica- dijo Tala.

-Tampoco sabemos mucho de ellos, pero pueden estar en peligro- dijo Thiago preocupado.

-Está bien, vigilarlos- dijo el Alpha -También quiero información sobre ellos.

-Pero lo haremos a mi manera- dijo el rubio.

-¿No os parece raro que los alumnos nuevos se conozcan?- preguntó Kiara.

-Ahora que lo dices, un poco sí- contestó la castaña -Akala y Milo vienen de Estados Unidos y Aya dice que es de Alemania.

-¿Entonces cómo se conocieron?- preguntó Kai confuso.

-Creo que hay muchas cosas que desconocemos todavía de ellos- dijo el rubio.

Cuando terminaron de hablar, Lena se fue con Thiago para preguntarle qué le pasó y por qué tenía heridas.

-Enzo me castigo- habló el rubio.

-¿Por qué?- dijo la chica triste.

El chico le contó todo, pero a la castaña no le pareció bien que le castigasen por eso.

-No era necesario que te hiciera esas heridas- dijo la chica -Seguro había otra forma.

-Ya sabes como van las cosas en la manada- le dijo Thiago mirando al frente -Hay reglas y si las incumples, tienen consecuencias.

-Lo sé, pero esa no es forma- se quejó Lena.

-A veces hay que ser duro, si quieres que te obedezcan- dijo el chico -No es fácil llevar una manada y sabes que Enzo se preocupa por todos, aunque no lo demuestre.

-Sí- dijo la castaña -Hay que conocerlo muy bien para saberlo- dijo sonriendo un poco.

-Es un buen líder, aunque hay veces que se pasa un poco- dijo Thiago quejándose con tono bromista para quitarle importancia al asunto.

-¿Quedará marca?- preguntó Lena refiriéndose a las heridas.

-Sabes que somos lobos y nos curamos mas rápido que las personas normales, ¿no?- dijo el chico mirando a la chica incrédulo.

-Está bien, pero eso no quita que me preocupe por ti, ¿vale?- dijo la castaña.

El chico sonrió y abrazó a Lena tomándola desprevenida.

-Me alegra que estés bien- dijo él.

La chica estaba sorprendida por el repentino abrazo, pero después de escuchar esas palabras le correspondió.

-Gracias por salvarme- dijo ella.

La vida de Akala WinterWhere stories live. Discover now