La vida de Akala Winter

17. El lobo solitario

Akala y Milo estaban en la cafetería, sentados con Aya. Los tres estaban almorzando, aunque Akala no tenía mucha hambre, por lo que le dio su comida a Milo.

-Está todo muy tranquilo después de lo que pasó ayer- dijo la chica de pelo azul.

-Creo que es mejor así- dijo Milo concentrado en comer y nada más.

Los lobos llegaron en unos minutos y estos se sentaron en una mesa aparte, excepto por Lena y Kai.

-¡Hola chicos!- dijo la castaña sonriendo mientras era observada por la otra mesa.

-Hola- dijo Akala sin mostrar expresión alguna y sin dirigir la mirada.

-¿Qué le pasó a Thiago?- preguntó Milo observando que el chico rubio tenía el brazo vendado.

-Se cayó- dijo Kai mirando a la otra mesa donde estaba el chico.

Akala levantó la vista para mirarlo, pues estaba distraída y no se fijó en que estaba herido. La cazadora se extrañó, ya que los lobos se curaban rápido.

-Aya- llamó Lena -Me presentaré de nuevo ya que empezamos con mal pie- le dijo a la chica -Soy Lena Dunne, encantada de conocerte.

-Igualmente- dijo la chica sonriendo.

-Y este es mi amigo, Kai Reed- presentó la castaña.

La chica solo sonrió de nuevo.

-Por cierto, tengo curiosidad- dijo la chica lobo -¿Cómo os conocisteis si sois de países diferentes?- preguntó directa.

-Milo y yo vivimos unos años en Alemania- intervino Akala en la conversación mientras miraba distraída algún punto.

Eso pilló por sorpresa a los lobos de la otra mesa, quienes escuchaban atentos la conversación y vigilaban de cualquier movimiento sospechoso.

-¡Oh, genial!- dijo Lena emocionada.

-¿Habeis estado en más sitios?- preguntó esta vez Kai curioso.

-Sí, así es- dijo Milo, quien se mantenía la mayor parte del tiempo en silencio.

-¿Qué sitios?- preguntó de nuevo el pelirrojo.

-Alemania, Francia, Italia, Estados Unidos...- dijo Akala sin prestar atención a nada.

Los dos lobos estaban sorprendidos, al igual que los otros que estaban en la otra mesa. Lena decidió cambiar de conversación, pues no quería parecer pesada, ya que había descubierto algo nuevo de los dos hermanos Winter. No quería que estos se cerraran como siempre hacían, así que cambio de tema y le habló a Aya.

-Somos las únicas chicas, contando a Akala, de esta mesa, así que espero que seamos buenas amigas- le dijo sonriendo.

-Lena- dijo Kai dudoso y desconfiado de la chica de pelo azul.

-Claro- contestó la chica bruja.

Mientras tanto, en Italia, la manada italiana perseguía a un lobo.

-"Marco, tu a sinistra*"- dijo el Alpha a un lobo por el enlace -"Luka, tu a destra*"- le dijo a otro.

El primer lobo fue a la izquierda como le ordenaron, este era de un color marrón oscuro que parecía hasta negro y el segundo a la derecha, el cual era de un color marrón ceniza que contrastaba con el primero. El Alpha de la manada, que iba de frente, tenía el pelaje rubio. Los tres lobos intentaban rodear al que huía, quien no pasaba desapercibido por su pelaje blanco como la nieve. A pesar de su desventaja por dicho color, el lobo era rápido y hasta ahora no había sido atrapado por esos lobos, quienes lo buscaban desde hace unos días.