Capítulo 41. La Despedida +18

1.9K 42 4
                                    

La noticia de nuestro regreso hizo feliz a papá, aunque cuando le mostré el anillo se asustó un poco, creyendo que estábamos comprometidos, pues un anillo de plata le pareció demasiado para un regreso a un noviazgo solamente.

Eddie tenía ganas de salir a cenar para seguir celebrando, estábamos por salir cuando el teléfono de casa sonó

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Eddie tenía ganas de salir a cenar para seguir celebrando, estábamos por salir cuando el teléfono de casa sonó. Los chicos estaban intentando comunicarse con Edd para darle buenas noticias, pues al parecer habían conseguido otro pequeño tour un poco más lejos de los Ángeles, le estaban pidiendo regresar lo antes posible, pero el no quería hacerlo, no tenía opción de rechazar esa oportunidad, y tampoco le permitiría hacer algo así.

Terminó la llamada un poco molesto, me pidió disculpas y dijo que se quedaría sólo esta noche así que decidimos  quedamos en casa.

Eddie: De nuevo lo siento linda... Será mejor no salir por ahora.

___:no importa, lo único que quiero es estar contigo, donde sea, eso no es importante...

Eddie: a mi igual, pero me hubiera gustado llevarte a cenar y después... Pasar más días aquí contigo...

Estaba molesto y decepcionado, podía verlo en su rostro, yo también me sentía un poco triste, pues recién regresábamos y el ya tenía que irse de nuevo, pero no quería hacer el ambiente más triste. Me recosté sobre el para abrazarlo y olvidar todo lo demás.

Sus besos pasaron de ser suaves y tiernos a sentir su lengua dentro de mí, sosteniendo mi cabeza contra la suya, de manera apasionada

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Sus besos pasaron de ser suaves y tiernos a sentir su lengua dentro de mí, sosteniendo mi cabeza contra la suya, de manera apasionada. Lo tomé del brazo y lo lleve a mi habitación, afortunadamente papá se había metido en su despacho. Era el momento perfecto para aprovechar que el piso de arriba estaba vacío.

Cerramos la puerta y rápidamente Eddie comenzó a deshacerse de mi ropa, su mirada recorría cada centímetro de mi cuerpo, me sentía vulnerable pero me estaba gustando esa sensación. Me tomó entre sus brazos y me recostó sobre la cama. Con desesperación continuó besándome mientras sus manos bajaban por mis piernas, dejando marcas entre mis muslos, hasta que sus dedos entraron en mi bruscamente, sentí un poco de dolor pero eran más mis deseos de sentirlo que se volvió algo placentero ese dolor. Sus dedos recorrían mi interior a placer, haciendo que mi espalda se arqueara un poco, deseando tener su miembro dentro de mi. Aparte su mano de  mi para continuar.

Eddie:que pasa cariño? Estas bien??

___:si, tranquilo... Tenía tantas ganas de tocarte de nuevo...

Eddie sólo sonrió y dejó que le quitara la ropa, lo hice lentamente, quería sentir con detenimiento su piel, sus brazos, podía sentir su piel erizarse con el rose de mis dedos. Quería conservar la imagen perfecta de su cuerpo en mi mente, quería poder recordar como se sentía aún cuando no estuviera. Mientras lo desnudaba iba dejando besos delicados por su torso y brazos, el me tomó con delicadeza por mi cabello, mis manos se fueron directamente hacia su pantalón, deshaciendose de él, necesitaba tocar su dureza, deseaba tanto satisfacerlo con mis manos, mientras veía su rostro de desesperación.

Eddie:vamos nena... No me hagas esperar más...

Calle sus palabras con un beso largo mientras posicionaba mis manos sobre su erección, el me tocaba suavemente intentado unir nuestros cuerpos, pero me apartaba cada vez que lo hacía, me gustaba verlo rogar por mi.

Su desesperación y sus roncos y desesperados gemidos en mi oído me hacían humedecer aún más, podía sentir mis piernas un poco húmedas, mi intimidad no dejaba de palpitar, lo necesitaba dentro de mi, pero era mucho más placentero así.

Su miembro estaba caliente, deseaba lo mismo que yo, mis cenos estaban entre sus manos, tocandolos cuidadosamente, el de deleitaba con cada centímetro de mi, mientras yo lo complacía hasta que me sostuvo con fuerza para colocarse sobre mi de nuevo. Colocó rápidamente el preservativo que ya tenía listo y delicadamente entró en mi, no pude evitar soltar un gemido, que inevitablemente hizo que sus estocadas fueran más duras y placenteras.
Tenía tantas ganas de gritar su nombre, pero debíamos ser cuidadosos. Sentia su respiración agitada sobre mi cuello, amaba sentir su calor combinado con el mío, nuestros cuerpos juntos empapados en sudor.
___:no te detengas... Por favor, más fuerte...

Rogué, no quería que se terminará, mis piernas comenzaban a temblar, y mi zona se ponía cada vez más sensible al punto de doler, pero me obligaba a no parar ahora. El también estaba a punto de terminar, pero parecía que ninguno de los dos quería separarse. Eddie recargo un poco su cuerpo sobre el mío, intentando recuperarse, intentando dejar pasar esa sensación, para seguir de nuevo.
Mi chico sabía exactamente qué hacer y cómo hacerlo, me conocía, a veces podía jurar que me conocía mejor que yo misma.

Me tomó por el cuello mientras seguía embistiendome sin piedad alguna, mis ojos no se querían apartar de los suyos, sentía que nuestras almas se unían a través de muestras miradas, mientras nuestros cuerpos se complacían hasta terminar.

Finalmente ambos terminamos, pero el decidió acabar sobre mi, dejando su líquido blanco sobre mi abdomen y pecho.
Se recostó a un costado mío, colocando su cabeza sobre mi hombro, haciéndome dulces caricias, nunca había deseado con tantas ganas que la noche nunca terminara...

El freak de mi vida. +18 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora