Today was a fairytale (Eddie Munson) ✔️

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Jugaban cartas en la sala de estar, los cuatro, Eddie, Chris, Grace y Amy, nadie sabía sobre el incidente en casa de Eddie, si tan sólo su padre supiera, iría a encarar a la señora Munson, y por eso mismo, es que nadie hablaba algo sobre ese tema, Grace tenía una pena profunda por lo que había pasado esa tarde, nunca nadie le había tratado de esa manera y el que sea la misma madre de Eddie, se sentía incluso peor.

Eddie bebía cerveza, era el único que lo hacía esa noche. Amy y Chris por razones obvias no bebían, y Grace, aparte del compromiso con su hermana, debía realizarse unos exámenes de sangre al día siguiente, faltaba menos de cuatro meses para el gran día, y la chica era la única donante, debía mantenerse en rigurosos exámenes para asegurar que todo salga a la perfección. Aquello era decisivo para la vida de Amy,

—¿Grace?— Amy la llamó hasta la cocina, la chica caminó donde su hermana, las dos veían a Eddie y Chris hablando felices de la vida .

—¿Qué pasa?— preguntó a su hermana.

— ¿Puedes cubrirme esta noche?— Amy la miró sonrojada— Quiero ir a casa de Chris, y necesito que me ayudes en la mañana, para poder entrar— la chica miró a Grace.

— ¿Me prometes que te cuidarás?— Grace tomó a su hermana de las manos— Me refiero al frío de la noche, sabes que nada puede salir mal ese día— Amy asintió.

— Puedes confiar en mí—la chica le sonrió a su hermana— Te prometo que me cuidaré.

...

Chris tenía unos lindos ojos azules, usaba un piercing en su nariz , su cabello era naturalmente rubio, él estaba calvo por su tratamiento, pero solía tenerlo así. Se despidió de Eddie y de Grace , salió junto a Amy, ver cruzar la puerta a su hermana, le producía miles de sentimientos, evidentemente había emoción porque Amy tenía alguien quien la quería, y, por otro lado, estaba aterrada de tan sólo pensar en que algo malo pudiera pasarle, desde cosas mínimas, como pegarse un resfrío.

—Va a estar bien—Eddie tomó los hombros de la chica y besó su cuello.

— Estoy cansada ¿Por qué no vienes un momento a mi cuarto?— la chica lo miró a modo de amenaza—Y no pasará algo, porque ya sabes, mañana me levanto temprano— Eddie le sonrió y la abrazó.

— Me encanta que seas así de linda— caminaron en un abrazo hasta el cuarto de la chica. Eddie se sentó en su escritorio, puso Megadeth, Trust. hizo de cuentas que tocaba la batería con unos lápices que estaban en el escritorio de Grace.

La chica se quedó unos segundos como tonta viéndolo hacer de cuentas que era uno más de la banda, sonrió, le gustaba que Eddie fuera así. Apagó las luces, encendió las chicas, esas que parecían como de navidad y que se veían hermosas en los cuartos.

Estaban en silencio, Grace decidió poner Parachutes de Coldplay, era un álbum agradable para alguna conversación íntima.

Eddie estaba recostado en la cama de Grace, y ella también, se miraban frente a frente, Eddie sonreía sin pensarlo cuando la veía, nunca había experimentado algo así, con ninguna chica, él tomó sus manos y se acercó más a ella.

— No quiero que las cosas cambien entre nosotros— Eddie hablaba cerca de ella.

— Te refieres a tu madre de seguro—Grace suspiró—Pues no lo sé,, era de esperarse que no iba a quererme, es sólo que ha sido cruel y mucho, me molesta imaginar que ella piensa que sólo estoy contigo por el dinero, cuando no es así— Ella soltó triste—Es injusto, no ve en mí ser una maldita arribista, no cambiaría mi vida, ni mi casa y menos a mis padres—Ella suspiró y los brazos de Eddie la arrollaron, ella podía sentir su corazón latir, ninguno de los dos entendía cómo es que lo de ellos había podido escalar tanto, ella recordaba los primeros,

— Bueno, este...no sé. Vine a saludarte— la chica estaba más que nerviosa— Y no soy tu niñera— la chica soltó.

—¿Y para qué quieres saludarme, ¿eh? — Eddie la miró molesto— ¿En serio te vas a prestar para esto? — el chico habló irónico.

— Hay, no hables así. Edward— puso un tono de voz gracioso al decir Edward— Y no me estoy prestando para nada, me van a pagar por ver lo que haces— el chico sonrió con sarcasmo.

— Debes estar loca igual que mi madre— el chico refutó.

— Oye, no me interesa realmente interactuar contigo, sólo voy a cuidarte el culo en caso de que decidas incendiar la casa — la chica soltó molesta. No imaginaba que ese tal Edward era una piedra en el culo.

— ¿Y mamá ya me vendió como si fuera un demonio? — el chico tenía una sonrisa burlesca, que ponía de mal humor a Grace, tenía tatuajes, usaba una playera de Megadeth, jeans y converse.

— Como sea Edward, sólo vine a presentarme. Soy Grace, y lamentablemente tendré que venir a ver que no hagas nada malo—La chica soltó sin más.

— Sí, sí, como digas Grace— dijo Grace con burla— Cuando vengas la próxima vez, sólo no vengas a joder a mi cuarto— le sonrió y le cerró la puerta en la cara. La chica sintió deseos de llorar.

...

— Eras realmente un chico con apariencia de ser malo— Grace soltó divertida, él la miraba en todo momento—Realmente te ves intimidante en las primeras impresiones.

— Y ya ves que soy como un osito de goma— Eddie habló divertido.

— Basta de los ositos de goma— ella habló entre medio de una carcajada y él tomó su cintura, comenzó a hacer cosquillas en su cuello e intentó morderlo con ternura, ella comenzó a reír, intentando contenerse.

— Deberías convertirte en uno—Eddie resopló en su oído—Podría comerte entera—aquello podría haber sonado pervertido, pero aquello estaba lejos de ser así, él lo dijo con ternura, como nunca antes le había hablado a una chica. El chico hizo una pausa y contempló su rostro, despejó sus cabellos que entorpecían las facciones de Grace que Eddie tanto amaba—No tienes de qué preocuparte, necesito que confíes en mí, yo no quiero que pienses que podría cambiarte por Gretchen— él hablaba sin una pizca de gracia—Necesito que confíes en mí, necesito que sepamos llevar esto que pasó.

— A mí me gustas tú, no tu familia, quizás me hubiera gustado no vivir lo que ha pasado el día de hoy, pero al menos ya terminé ese estúpido trabajo— Grace le sonrió—Y bueno, no he aceptado el pago, después de todo lo que me ha dicho.

— Eso fue muy estúpido Grace—él tomó su rostro—Necesitas el dinero— tomó su rostro y besó su nariz— Te has esforzado cada día, perdiste tu tiempo libre, no es justo, lo necesitas, sobre todo ahora que estás con tus exámenes y esas cosas.

—Tranquilo Eddie, era sólo algo personal, sólo no quería que papá y mamá se llevaran todo el peso—Grace tomó las manos de Edward—Pero aún podemos soportarlo— Eddie la abrazó y la besó de manera intensa.

—Te amo Grace—se separó de ella—Perdón por hacerte pasar por esto, no quiero causarte líos, pero tampoco estoy dispuesto a dejarte.