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— ¿Que ha hecho que? —Magaelle tose sorprendida y se gira para observar a sus ojos con los ojos desorbitados

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— ¿Que ha hecho que? —Magaelle tose sorprendida y se gira para observar a sus ojos con los ojos desorbitados.

—Lo que oyes —Afirma con un bufido —Vhagar los asesino formalmente pero él le dio la orden —Explica a detalle —Las criadas y los guardias lo vieron todo... —Inhala sabiendo las consecuentes que ello acarrearía —Susurran y le llaman el mata dragones en voz alta.

Magaelle se estremece pensando únicamente en lo que Helaena ha mencionado sobre aquello.

— ¿Él lo sabe? —Ella observa como Aemond menea la cabeza negando —Debemos evitar que le llamen de ese modo, le condicionaran.

—Concuerdo con ello, es solo un niño, apenas sabía lo que estaba haciendo —Las manos del rubio se posan con suavidad sobre los hombros de su esposa —Dice que odia a los dragones —Susurra.

— ¡Pero si los adoraba!

—-Creo que le decepcionó el hecho de que Fantasma Gris no le obedeciese —Explica él, quien conoce a su hijo más que a nadie, ante el suspiro pesado de la joven.

—Eso es por qué Fantasma Gris está harto de tener un jinete —Explica —No puedes enjaular a un dragón y esperar que de un día a otro deje de comportarse como un salvaje.

—Lo se.

—Perdimos tres dragones... —Susurra mirándole a los ojos, él deposita un beso en sus labios.

—Al menos no perdimos a nuestro hijo —Alza ambas cejas.

Magaelle traga saliva, Aemond tiene razon.
—Al menos no perdimos a nuestro hijo —Suspira y se acomoda en su pecho — ¿Donde está él?

—Tras la puerta esperando para darte sus disculpas —Confiesa mientras una sonrisa traviesa de le escapa de los labios.

—Deja que entre.

Aemond asiente con un ligero movimiento de cabeza y se acerca la puerta para dejar entrar a Luxeryon quien avanza con la cabeza agachada y las manos entrelazadas en la espalda.

—Mamá... Yo... Lo siento mucho —Las lágrimas caen por sus mejillas sin poder mirar directamente a su madre. No le agrada la idea de haberle quitado a Magaelle algo que sabe que ella aprecia, desde que nació fue capaz de apreciar como su madre se preocupaba tanto por sus dragones como por sus hijos. Y Luceryon, que era un niño de más inteligente, lo comprendía a la perfección —Se lo mucho que los dragones significaban para ti.

Ella se agacha para que su hijo pueda verle y coloca una mano sobre su hombro.

—No me importan tanto los dragones —Admite —Me importas tu Luceryon —Él le mira apenado —Te podrían haber hecho daño —Magaelle no quiere siquiera imaginarlo pero tiene que hacer entender aquello a su hijo —Podrían haberte devorado de un bocado —Sopesa costosamente —Promete que no volverás a tentar de ese modo al peligro, que te quedarás en el molde.

—Lo prometo mamá —Los brazos de su pequeño príncipe le rodean el cuello mientras que Aemond, con una mano, acaricia el cabello del niño.

Es una criada la que les interrumpe, lleva a una de sus hijas en brazos y esta berrea cual cerdo siendo cazado.

—Con permiso majestades, la princesa Eraenys tuvo una pesadilla, según cuenta con un dragón —Advierte mientras se acerca a sus padres y deposita a la
niña, un año menor que Luceryon, sobre los brazos de su padre.

—Gracias Obara —La mujer hace una reverencia tras los agradecimientos de Aemond y se retira.

—Es solo una pesadilla Eraenys —Reprocha Luceryon acompañado de un bufido mientras ve a su hermana en brazos.

—Luceryon... —Su madre le mira con cara de pocos amigos.

Más la niña no se queda atrás ya que, en modo de burla, le muestra la lengua a su hermano quien seguidamente le pica con el dedo una pierna lo que hace que Eraenys vuelva a chillar.
Aemond no encontró más remedio que cazar a Luxeryon por la oreja como reprimenda.

—Suficiente niño —Reprocha su padre en alto valirio —Ve a tomar un baño, apestas a sangre de dragón.

— ¿Sirve de algo que me bañe si luego me volveré a ensuciar? —Luceryon alza una ceja y mira a sus padres.

Magaelle se ve obligada a reprimir una risa y al observar a Aemond se da cuenta de que ambos piensan lo mismo: Aunque físicamente Luceryon fuese una pequeña copia de su padre, tenía el carácter indomable de su madre.

—Obedece —Le impone la mujer.

—Si mama.
Suelta resignado para encaminarse a la puerta.

—Tu también ve —Indica Magaelle a Eraenys quien ta se encuentra en el suelo —Las pesadillas no son reales, se irán cuando dejes de temerle a los dragones.

Aemond se inclina para besar la cabeza de su hija quien desaparece resignada del mismo modo en el que lo hizo su hermano.

—Parece que nuestros hijos no tienen mucha suerte con los dragones —Suspira su esposo —Espero que a Vhaelyra y a Rhaenerys les vaya mejor.
Determina.

Vhaelyra y Rhaenerys son las últimas hijas que Magaelle y Aemond han concebido, mientras que Eraenys cuenta con siete días del nombre, Vhaelyra cuenta con cinco y Rhaenerys solo con dos.
Pero todas son igual de encantadoras y hermosas.

—A Eraenys realmente le asustan —Admite ella mientras siente los brazos de su esposo rodearle la cintura.

Con un leve movimiento pega la espalda a su pecho.

—Todo le asusta —Reconoce el rubio.

Y es que era de ese modo.
Eraenys era delicada y timida, no había pronunciado su primera palabra hasta los dos años y aún después no hablaba con frecuencia.
Por su lado Jaheahera la aterraba y ocultaba el rostro en presencia de niños mayores. Eraenys tenía un aspecto infantil y se comportaba como tal.
Sus padres jamás había conocido el miedo más ella siempre parecía asustada.

Tenía a su dragón al que adoraba hasta que comenzó a crecer, tanto, que cuando le superó en altura ya no le podía ver.
La más mínima regañina la hacía irrumpir en llanto.
También le encantaban las flores más no los jardines por que una vez le había picado una abeja.

Era completamente diferente a Luceryon quien se esforzaba por intentar comprender a los adultos más rápido de lo que otros niños lo hacían.
Entretanto él caminaba por los pasillos directo a sus aposentos donde ya le esperaban las criadas, mas se detuvo antes de entrar cuando oyó que hablaban de él llamándole como a un asesino de dragones.

Entretanto él caminaba por los pasillos directo a sus aposentos donde ya le esperaban las criadas, mas se detuvo antes de entrar cuando oyó que hablaban de él llamándole como a un asesino de dragones

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EYOOOOOO

HOY NOS DESPERTAMOS FELICES.
Ya está publicada la sinopsis de la nueva novela titulada Sunflower, AAAAAAAAAAAAAAAA.
Realmente espero que la disfruten muchísimo, tiene demasiado empeño.

Por otro lado no se olviden de pasar por nuestro TikTok: YoungMadeon_, donde también van a ver videos de la nueva novela sisi.

GRACIAS POR LOS 110K LOS AMO TANTOOOO.

Princesa Bastarda [Aemond Targaryen] Where stories live. Discover now