2. ¿Tú quién eres niña?

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Taylor.

Jessica entra a la casa y me presenta ante algunos de sus empleados informándoles a alguno de ellos que a partir de ahora yo viviré también en la casa.


La casa por donde las mires grita una sola cosa: DINERO.

Se nota que eso es lo de menos para esta familia.

Jessica me guía en dirección a las escaleras y subimos 2 pisos, ya que la casa cuenta con 4 plantas.

Ella me lleva hasta la puerta de mi habitación y antes de abrirla su móvil comienza a sonar.

—Debo bajar de inmediato, entra y ponte cómoda— asiento y me quedo observando como desaparece por el amplio pasillo.

Tomó la manilla de la puerta y tras soltar un suspiro la giró quedando encantada con lo que hay dentro.

Las paredes de la habitación están pintadas en su totalidad de un color beige muy bonito, lo cual me encanta. La cama está pegada a una pared justo en el centro del cuarto y a cada lado hay una mesita de noche . También hay un televisor bastante grande frente a la cama, en alto, puesto en la pared.

Hay un escritorio blanco con una laptop y varios libros sobre este. Al lado del escritorio hay una puerta que lo más probable es que sea la del baño.

Me adentro un poco más a la habitación y me fijo que justo al lado de la puerta está el armario.

¡Y vaya armario!

Tiene unas puertas corredizas color blanco, me acerco y corro las puertas dejándome ver lo que hay dentro, posiblemente solo el armario sea más grande que mi antigua habitación.

El clóset tiene función de armario y función de probador así que entro en este y me doy cuenta de que está lleno de ropa y zapatos de todo tipo, también, hay muchísimos accesorios, los cuales están sobre una mesa dentro de una caja de madera con tapa de cristal . Por otro lado hay otra mesa llena de montón de maquillajes con un pequeño espejo. Esa mesa haría función de tocador. Hay un espejo de cuerpo completo que parte desde el suelo, adornado con plantas artificiales pero este está afuera del armario, a un lado más allá de la cama.

—Taylor ¿dónde estás?— escucho la voz de Jessica y salgo del armario encontrándome con ella— ¿Te gusta tu nueva habitación?— asiento de forma rápida y emocionada—. Si quieres podemos hacerle alguna reforma o podemos pintarlo y ponerle cosas que sean de tu gusto.

"No es necesario, está perfecto así"

Le muestro la pizarra en mis manos y ella asiente sonriente.

—Te dejaré para que entres en zona, puedes dormir, darte una ducha en el baño— apunta la puerta que está al lado del escritorio—, o puedes bajar a conocer más la casa, el jardín es precioso y puedes conocer a las mascotas.

"¿Tienes mascotas?"

—Si, dos gatos, la hembra se llama Bloom y el varón se llama Red. ¿Por qué no vas a conocerlos?— pregunta—. Ellos tienen su propia habitación pero siempre andan por el jardín persiguiendo mariposas.

"En un rato bajo, muero por conocerlos"

Ella se va cerrando la puerta tras de sí.

Tus palabras de cristalWhere stories live. Discover now