67. La propuesta.

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Estoy llorando.

Pero llorando de verdad, incluso cuando Matt me hace llorar no es de tristeza.

Es de felicidad.

De ternura.

Es que no me puedo creer lo que esta sucediendo, porque parece tan bueno que ni siquiera se siente real.

Es como un sueño.

Y nada en el mundo entero podria haberme preparado para esto.

Aun cuando hemos hablado de casarnos recientemente nunca espere algo como esto, algo tan elaborado, tan planificado, tan bien pensado, con tantos detalles.

Matt me mira desde abajo aun de rodillas, esperando por mi respuesta y yo asiento.

Ni siquiera tengo que pensarlo porque ya no imagino una vida en la que el no este a mi lado.

—Si—me seco las lagrimas—¡SI!—repito casi gritando y puedo ver la cara de alivio en su rostro.

—¿Si?—el sonríe y yo sonrío con las mejillas llenas de lágrimas.

¿Acaso se pensaba que le diria que no?.

Yo asiento repetidas veces, con el corazón latiendo a millón.

—Si, y todas las veces que lo preguntes... Si—me acerco a él—Una y mil veces si.

El suspira aliviado y comienza a sacar con cuidado el anillo de su cajita, tiene una sonrisa preciosa en la cara.

—Nada me haría sentir mas feliz que ser tu esposa—le miro a los ojos y el toma mi mano por fin, para ponerme el anillo de diamantes azules mas precioso que haya visto en mi vida.

Matt se pone de pie y yo lo abrazo.

Me rodea con sus brazos calidos y me besa.

Nunca un beso había tenido tanto significado para mi.

Es un sello de amor de nuestro compromiso de querernos y acompañarnos el resto de nuestras vidas.

Matt se separa de mis labios y me mira a los ojos, nunca vi esos ojos verdes tan brillantes y cristalinos, una lagrima cae por su mejilla, nunca lo había visto llorar, y esta ha sido la primera vez que lo veo conmoverse tanto por algo.

Acaricia mi labio inferior mientras me mira como si fuera lo mas preciado que tiene.

Y hoy mismo me siento así, valiosa e increíble.

Limpio las lágrimas de su mejilla con mis dedos, con delicadeza.

—Mi obra maestra, mi musa, mi sol y mis estrellas, la luna de mi vida, mi Psique, mi tazon de cereal, mi Rhaenyra, mi Reina, mi debilidad—acaricia su nariz con la mía—Mi futura esposa... Gracias por decir que si.

Siento derretirme al oirlo decir eso, y mas aún cuando lo veo sonreír asi tan lleno de ilusión.

Es por mucho el dia mas especial de mi vida.

—Mi prometido—le doy un besito y todos los hombres con ramos de rosas en las manos comienzan a aplaudir.

Miro en dirección a donde había visto a Paddy y ahi esta limpiandose unas lágrimas.

No puedo creerlo.

Estoy tan feliz.

Como pudieron planear todo esto sin siquiera darme cuenta.

—¿Cuando planeaste todo esto?—estoy tan sorprendida.

—Alrededor de un mes o más—sonríe.

No me lo puedo creer, quiere decir que ya Matt planeaba proponerme matrimonio, incluso antes de que yo se lo dijera aquella noche de mi cumpleaños.

La Casa Del Dragón | Milly Alcock & Matt SmithWhere stories live. Discover now