036

4.6K 430 40
                                    

—¿Estás nervioso?

Mis pies colgaban del balcón y en mis manos sostenía un panqueque de dulce de leche, me había escapado del comedor y Enzo me había seguido así que ahora los dos estábamos sentados en un incómodo silencio que opté por romper.

—No sé si voy a jugar —lo escuché murmurar y un pedazo de panqueque se me fue para el otro lado cuando empecé a toser—. ¿Estás bien?

Lo miré bastante incrédula, aguantando la tos para hablar.

—No, vos sos el que no está bien, ¿te volviste loco?

—Sol, le erré al penal. No puedo arriesgar a la selección por mis nervios otra vez, mira si la cago y terminamos descalificados por mi culpa.

Una vez más, lo miré incrédula y sentía mi garganta picar pero pensé que el momento serio se iba a cortar si tosía así que me aguanté como pude.

—¿Y alguien te recriminó por errar el penal? Que yo sepa, el dibu te dijo que sos un monstruo en la cancha, el cuti te felicitó, Paulo me dijo que jugaste re bien pero que no te diga nada... —enumeré—. ¿que importa si erraste un penal? Seguimos en el camino a la copa e inicialmente fue gracias a vos y a todo el equipo que se mantuvo unido, ¿vos te pensas que si fueras a "cagarla" scaloni te seguiría teniendo de titular?

Mirar a Enzo en ese momento fue como mirar a un nene chiquito al que su papá le estaba dando un sermón, sus ojos brillaban y esquivaba mis ojos.

—No, pero no es tan fácil rubia.

—No te rindas Enzo, llegaste muy lejos como para rendirte ahora —le sonreí sincera.

—Si me pedís una vez más que no me rinda te juro que sigo por vos —su voz y su expresión se tornaron serias, me miraba con determinación y por una mínima fracción de segundo hasta me sentí intimidada.

—No te rindas.

Cada músculo de Enzo pareció relajarse y el morocho me dedicó una de sus sonrisas Colgate, y yo al fin pude toser.

—Cuando era wachin y pasaba las tardes jugando a la pelota, nunca me habría imaginado que hoy estaría jugando un mundial con mis ídolos —me miró con un brillo en sus ojos y esbozó una sonrisa, que fue la más sincera que ví en mi vida—. Mucho menos me imaginé que lo haría con mi mejor amigo, bueno ex mejor amigo.

Lo último me descolocó un poco, ya que yo sabía por Juli que estaban alejados pero no pensé que fuera algo serio. Pensé que sería como cuando yo me enojaba con mis hermanos, a las horas siempre los terminaba perdonando.

—¿Por qué te peleaste con Juli? —pregunté sin poder contener mi curiosidad.

—Porque me mandé muchas giladas estas últimas semanas.

Asentí con la cabeza, sin querer indagar más para no hacerlo sentir incómodo ni invadir su espacio. Pero sentí que tenía que decir algo más.

—Para mi te tendrías que arreglar con Julián, él te quiere mucho y me re doy cuenta de que se extrañan. Capaz que si hablan las cosas puedan solucionar todo, no estaría bueno que una dupla como la de ustedes se separe. Menos ahora que todos tienen que estar más unidos que nunca.

—Es re gracioso lo que voy a decir pero... sos un sol —Enzo me dió un golpecito amistoso en el hombro para después dedicarme otra de sus sonrisas—. No sé cómo haces, pero siempre tenés la fuerza para ayudar hasta a las personas que te tratan mal. Sos como Juli, ¿sabías? Los dos son unos ángeles y no te das una idea de lo que me arrepiento.

—¿de qué te arrepentis?

—De haberte mentido cuando te dije que Julián tenía novia —confesó en un suspiro—. Pensé que iba a tener chance pero no me di cuenta de lo egoísta que estaba siendo con vos y con mi propio mejor amigo, ahora me doy cuenta de que los dos merecen estar bien y de que juntos lo estarían.

Sentí un golpe de incomodidad en el estómago pero esbocé una media sonrisa y puse una mano en el hombro de Enzo.

—Aunque no lo creas, Juli y yo nunca habríamos funcionado —dije en un tono tranquilo y solté una risita—. Somos dos personas tranquilas que buscan algo que los saque de su zona de confort, algo que sacuda nuestro mundo. Juli y yo somos amigos solamente.

Era obvio por la forma en la que lo dije, esperaba que Enzo se diera cuenta o que al menos cambie su mirada. Pero no lo hizo, su mirada siguió siendo una de arrepentimiento.

—Uh, bueno —murmuró.

Suspiré frustrada pero después le sonreí y me levanté para excusarme con que iba a ir al baño, fui al comedor y vi que casi todos se habían ido.

El dibu estaba jugando al Jenga con Fede, mi mamá estaba ayudando a Alejo con la tarea porque se había llevado lengua y después solo quedaban mis hermanos mayores. Incluso mi papá no estaba, se había ido a ver unas camisetas con Julián o algo así.

—¿Que hablabas con Enzo afuera? —preguntó emiliano cuando me vió entrar.

—De que son re grosos y van a ganar el mundial.

—Ah sí, obvio.

El dibu siguió jugando y yo me senté al lado de Fede para verlos jugar, minutos después entro Enzo y su cara era un poema, estaba distraído y tenía los labios entreabiertos, como si estuviera pensando algo que lo mortificaba.

—Che sol, ¿vos me tiraste una indirecta? —soltó de la nada.

Abrí mis ojos con sorpresa cuando todas las miradas recayeron en mi, encima de que no lo había captado al momento, me había mandando al frente. Sentí que en vez de sonrojarme, me puse pálida, tosí un poco y me serví agua en un vaso antes de meditar mi respuesta.

—No, ¿por? —respondí lo más natural que pude.

—Ah no por nada, entonces flashee cualquiera —frunció el ceño y arrugó la nariz, como si se estuviera retando mentalmente—. Bueno, yo ya me voy a ir a buscar a Oli porque mañana vuelvo a los entrenamientos.

Con la despedida de Enzo, el dibu no tardó mucho en irse porque dijo que quería visitar a su esposa y a sus bebés. Yo me quedé en casa con mi mamá y mis hermanos viendo una película, aunque por otro lado me sentía bastante dispersa. Pensaba una y otra vez que no podía creer cómo tuve el valor de tirarle una indirecta así a Enzo.

_________________________________

Aparezco xq river ganó el superclásico.

Encima me di cuenta de que ya son 100k aaaa, muchísimas gracias por el apoyo y mil disculpas por la demora. 🫶

Sobre Ruedas-Enzo Fernández Where stories live. Discover now