Capítulo 21

22 5 4
                                    

Hanna

—Me vas a meter en problemas, te estás pasando.

—No exageres, Thom. Solo me extendí un poco estos ocho días, no es para tanto.

—¿Qué es lo que tanto haces afuera? —suelta y hago un gesto para que baje la voz empujándolo más hacia la esquina de la cancha vacía.

—Sabes cómo es el acuerdo, no te entrometas.

—Es lo mínimo que debería saber si te estoy salvando el pellejo, Hanna. Además, no me has pagado lo del mes.

—Dame unos días y te pagaré, ¿te he incumplido alguna vez? —entrecierra los ojos y niega con la cabeza dejándola caer hacia atrás con cansancio.

—No hagas estupideces, hermana. Por favor, ten cuidado. Y no descuides las jodidas entregas, ya me preguntaron dos profesores por los dos trabajos que no entregaste esta semana, ¡colabora con la causa, niña! Hay reporte de notas desde mañana.

—¿Por qué pareciera que te empiezas a preocupar hasta ahora por mí? Llevo haciendo esto desde hace tiempo, relájate, por favor. —digo y él se mueve inquieto enderezando su postura.

Aunque admito que el descuido con mis entregas es nuevo, estuve más ocupada viéndome con mi Jack e imaginando un futuro a su lado en cada mínimo momento de silencio que he tenido. También mi mente ha estado flotando, pensando en lo que diré en dos días a mis padres, analizando como serán sus reacciones y solo deseando que ocurra el mejor escenario.

—No lo sé, confío en que tienes todo bajo control, pero... olvídalo, son estupideces mías. Vete de una vez y por favor no tardes más de lo normal. Quiero verte aquí antes de que termine el ultimo bloque de dos horas, Hanna.

—Aquí estaré.

—Promételo. —señala con el índice.

Levanto mi mano y la pongo sobre mi corazón dramatizando.

—Lo prometo con suma solemnidad, hermano querido. —respondo con voz cantarina logrando relajarlo para luego tomar su propio rumbo.

Es a penas el inicio de la hora de almuerzo, tengo tres horas para verlo si salgo ahora mismo. Me apresuro, me hago el cambio de ropa en el cuarto de limpieza y esta vez opto por vestir algo más discreto, más oscuro y menos llamativo para así evitar cualquier mirada que pueda hacerme notar demasiado afuera.

Un simple minifalda negra, un top sin tirantes negro y una chaqueta también negra abierta combinada con unos botines oscuros. Me suelto el cabello y arreglo unos pocos retoques en cuanto al maquillaje rápido que me realizo con labial y sombra, me he esmerado en los días posteriores en verme aún más bella de lo que soy naturalmente para estar a la altura de Jackson, no sé qué ocurre pero no puedo evitar verlo como un ser magnifico y que solo puedo estar agradecida de tenerlo a mi lado, es todo tan mágico a su lado que hago lo posible por que nunca se canse de mi ni mucho menos se desencante de mi rostro ni mi cuerpo por la costumbre.

Salgo por la ventana y tomo el camino de siempre tapándome con el cabello al sentir una extraña sensación de precaución sobre mi nuca erizada. El sonido del tacón en el suelo me ayuda a no estresarme con mi repentina paranoia, ¿Qué me pasa? He hecho esto mil y un veces, es algo estúpido tener nervios de principiante y mucho más cuando jamás he tenido ningún tipo de incidente.

Sacudo la cabeza deshaciéndome de tales pensamientos de inseguridad, la agacho y consigo llegar al callejón justo cuando el cielo se oscurece con ligereza tapando el sol. Me acomodo cerca de la entrada de este al notar que él no ha llegado y recuesto mi espalda contra una de las paredes agradeciendo que no debo preocuparme por las personas ya que por fortuna no hay casi personas pasando por este sitio, influye el horario laboral.

A través del abismoحيث تعيش القصص. اكتشف الآن