La dama y el vagabundo (Jelsa) ||Adaptada|| •TERMINADA•

Diversión

Narra Jack.

— Iré al supermercado — Me dijo Caro — Vuelvo en un rato, Elsa esta arriba, tratando de arreglar su habitación.

— Esta bien — Sonreí.

— Ya vuelvo, adiós — Me besó la frente y se fue.

Recuerdo que ahora me tocaba, lavar la ropa, así que fue directo a la lavandería, pase por el cuarto de Elsa, quería entrar, pero es mejor si le dejo un tiempo a solas, entre a la lavandería, tomé la ropa sucia y la coloque, eché el jabón, pero creo que me pase un poco, no importa, Salí de la lavandería y me dirigí al cuarto de Elsa, quería ver si ella estaba bien y si necesitaba un poco de ayuda, llegué y la puerta estaba abierta, entre y ella estaba con las manos en su boca, observando todo.

— Puedes creer — Dijo — Que venir aquí me hace mal...

— Quizás necesites un cuarto nuevo — Le dije.

— No lo se, este lugar esta lleno de recuerdos — Suspiro — Tanto malos como buenos.

— Tranquila Elsa — Dije acercándome a ella.

— No puedo — Me miró con ojos llorosos — No puedo tranquilizarme Jack, estos últimos meses han sido horribles — Se limpió las lágrimas — No me han parado de ocurrir cosas, siempre lloro, nunca siento que puedo estar bien — Suspiró — Esté lugar me hace mal, me gustaría mudarme de esta casa, ayer... — Suspiró — Ayer sentí que pude hablar con mi madre.. aunque ella este muerta, ¿sabes? todo era mejor cuando ella estaba aquí y no allá — Señaló el cielo — La necesito — Explotó en llanto.

Yo corrí a abrazarla.

— Me siento sola — Dijo.

— No estas sola Elsa — Besé su frente — Yo estoy contigo.

Y al decir eso quedamos frente a frente, nunca había estado tan cerca de ella, puedo jurar que es mucho mas hermosa de lo que ves, estábamos tan cerca, vi perfectamente sus ojos, sus hermosos ojos, demostraban lo triste que estaba, un ruido extraño interrumpió el momento.

— ¿Qué sucede? — Dijo Elsa al escuchar ese ruido.

— Ya vuelvo — Dije y salí corriendo de la habitación.

Rápidamente corrí hacia la lavandería, y cuando entré juré abrir mis ojos como nunca, todo estaba cubierto de espuma, o jabón, sea lo que sea, golpeé mi cabeza, me mataran.

— Jack que es lo que... ¡ah! –dijo Elsa y se resbaló quedando completamente cubierta por todo el jabón.

— ¡Elsa! — Grité y fui a buscarla

Los dos salimos de ahí riendo, estábamos cubiertos de espuma, Elsa comenzó a tirarme espuma, mientras yo también le tiraba a ella, era muy gracioso.

— Atrápame — Dijo y se sumergió en toda la espuma.

Comencé a buscarla y de paso trague un poco de jabón, que ascó, comencé a buscarla hasta que sentí un brazo, era el de ella, los dos salimos, era graciosa su cara, toda cubierta de jabón.
Hasta que decidí parar, iba a ser difícil limpiar esto.

— Fue divertido — Rio Elsa — Me iré a bañar.

— Y yo limpiaré esto — Reí.

— ¿Te ayudó?

— No, tu ve tranquila — Le sonreí.

— Gracias — Besó mi mejilla — Porque siempre estas ahí cuando lo necesito.

Dicho esto se fue, al sentir el contacto de sus labios sobre mi mejilla sentí un cosquilleo por todo mi cuerpo, hasta creo que enrojecí un poco, pero ¿Por qué?