La dama y el vagabundo (Jelsa) ||Adaptada|| •TERMINADA•

Borrachera

Narra Jack.

— ¡Ay Jack estoy cansada de bailar! — Dijo Elsa con la voz de "típica chica borracha creyendo que está rodeada de cosas fantásticas".

— ¡Ay pero si apenas comienza la noche! —Dije tropezándome un poco.

— Son las siete de la mañana tontito — Hizo un risita y luego cerro los ojos— ¿Dónde está mi papi? — Preguntó.

— Acá está — Dije apuntando mi pecho y luego solté una carcajada.

— No — Dijo seria— ¿Dónde está mí papá?

— Oh — Deje de reír — No sé — Me encogí de hombros y seguí bailando extrañamente.

— Jack, Elsa — Dijo Caro acercándose a nosotros — Tu padre y tú madrastra — Se dirigió a Elsa — Ya están por irse al hotel, ya sabes.

— Oh si ¿y qué con eso?

— Sólo te estaba avisando porque ya nos vamos — Nos dijo y asentimos, luego se fue hacia la mesa donde supongo que se sentaban.

— ¿Escuchaste? Ya nos vamos — Tomé su mano y comencé a caminar hacia donde estaba Caro.

— Salgan ustedes primero, salgan rápido y vayan al auto — Caro me entregó la llave — Yo buscaré a los otros e iremos para allá.

— Okey — Dijimos al unísono y caminamos rápido a la puerta principal para salir del salón.

A Elsa se le dificultaba caminar; ya que estaba medio borracha y los tacones que llevaba puestos no ayudaban mucho, así que dejé de caminar y la cargué en mis brazos, como un príncipe cargaría a su princesa.

Rápidamente llegué al auto y con un poco de dificultad le saqué la traba, abrí la puerta trasera y senté a Elsa, ella estaba un poco dormida pero cuando la coloqué en el asiento despertó.
A lo lejos se podía notar que venía Caro con los chicos, y cuando llegaron junto al auto Caro me dijo — Tendrá que ir en tu regazo porque si no los chicos no entran.
Asentí y me senté en la parte trasera, junto a Elsa.

— Siéntate aquí — Le dí unas palmadas a mis piernas y ella se sentó en mí regazo, luego los chicos entraron, con los chicos, me refiero a los otros sirvientes.
Elsa pasó sus brazos por detrás de mí cuello y apoyo su cabeza en mí hombro, luego de eso no la sentí moverse más, se había quedado dormida, tal cual ángel.
Yo también poco a poco comencé a cerrar mis ojos, había sido una gran noche y me dolían los pies de tanto bailar.

Sentí que alguien me movía, despacio abrí mis ojos para encontrarme a Caro.

— Ya llegamos — Me dijo y yo asentí, pero no pude moverme mucho ya que Elsa seguía en mi regazo, pero ella estaba dormida, traté de no moverme tanto para poder salir del auto, cuando logré hacerlo la cargué nuevamente y caminé hasta la puerta, sin antes cerrar la puerta del auto y colocarle la traba, cuando entré a la casa subí las escaleras, hasta la habitación de Elsa, cuando llegué entré y la dejé sobre la cama.

— Despierta — La moví un poco para que luego ella abra sus hermosos ojos — Me supongo que no dormirás así — Le sonreí — Buenas noches — Besé su frente pero ella tomó mi mano.

— Quédate aquí — Me pidió.

Suspiré y le dije — Está bien, pero deja que vaya a sacarme el traje ¿si? — Ella asintió y yo besé su mejilla y salí de la habitación.

Narra Elsa.

Me levanté de la cama y entré mis cajones busqué alguna ropa para dormir, cuando encontré mi pijama, lo dejé sobre la cama y caminé hasta el baño, despacio saqué mi vestido y lo deje sobre el escritorio, luego me deshice de mi ropa interior y prendí la ducha, posiblemente así se me iría el sueño, pero realmente tenía muchas ganas de darme una ducha.
Luego de bañarme me envolví en una toalla y caminé hacia la habitación, me coloqué mi ropa interior y luego mi pijama, acomodé mi almohada y me metí dentro de la cama.
Escuché la puerta de mi habitación abrirse y luego la cama se hundió detrás de mí, levanté la cabeza para poder poner uno de sus brazos bajo mi cuello. Apretó el pecho contra mi espalda y envolvió su otro brazo a mí alrededor, lanzando una pierna sobre la mía. Le oí suspirar mientras me retorcía para acercarme más a él, me encantaba que Jack durmiera conmigo, me sentía segura.

— Buenas noches — Susurró la voz de Jack.

— Hasta mañana — Susurré yo, para luego cerrar mis ojos y caer en un profundo sueño.