No todo es lo que parece

Capítulo 15: Verdades, verdades

"Cuando la máscara caiga, dime ¿Podrás ver mi verdadero rostro?"

Dino, al ver la condición de Tsuna, se levantó tan rápido como pudo de esa silla donde se encontraba sentado para poder ayudar a su hermano. Xanxus también repitió la misma obra acercándose al castaño que se aferraba el pecho queriendo amortiguar el dolor. Cuando se dieron cuenta de que la situación se trataba de la enfermedad, Dino corrió a llamar a Jasid desde su cama y lo llevó lo más rápido que podía al salón del décimo capo. Jasid aun en pijama intentaba entender con la mayor claridad posible lo que el rubio le decía, pero su mente se aclaró al ver el estado de su jefe. Actuó lo más rápido que pudo.

Se acercó, le quitó el terno, la corbata, la camisa y el vendaje dejando su pecho descubierto sus enormes cicatrices que no cicatrizaban todavía. Se podían ver como estaban sus heridas ya no se cerraban y sus músculos demostraban una condición débil y sin firmeza. Los tres iban a buscar medicamentos e iban a llevarlo a la enfermería, pero un grito de los labios delgados y sin fuerza les paró.

-¡Déjenme!- Dino no quiso seguir esa orden, cosa que Tsuna lo notó -¡vayan donde Enma, él es quien está mal ahora!- se siguió retorciendo del dolor.

Jasid siguió la orden de inmediato y sin criticar la orden, sin embargo los otros dos mayores se demoraron un poco más mientras se cercioraban de dejar al castaño en el sillón. Tsuna se había quedado solo retorciéndose del dolor, su mente comenzó a divagar pensando en cómo enfrentaría al causante de sus pesadillas.

-Con que estás vivo bufón- su mano se extendió hasta sobre su cabeza, como si intentara alcanzar algo -¿Cómo es que hasta el día de hoy no te mueres de una maldita vez? -con todo el esfuerzo que realizó, alcanzó a llegar al escritorio donde antes estaba y comenzó a ver en lo que en un archivo entregado esa mañana, decía - ya solo quedamos tres.

En el archivo una foto del lugar exacto donde se encontraba una mansión con el sello de Vongola, un informe sobre la situación y una foto de Byakuran comiendo sus malvaviscos durante el viaje a Venecia.

Cuando el dolor cedió, se volvió a colocarse el terno como estaba y se dio las fuerzas suficientes para poder seguir viendo el archivo. Eran las últimas palabras de Byakuran le dedicaba al castaño, en el archivo constaban tres cartas, una para Tsuna, otra para sus amigos y otra para Yuni. Tsuna solo leyó la carta que le había mandado para él, no podía romper la confianza que el peli banco le había dejado con esas cartas. Mientras leía el informe sintió de nuevo ese vacío de su corazón y sin darse cuenta, nuevas lágrimas comenzaron a brotar de sus ojos.

___________________Carta para Tsuna _______________________

Mayo del 20xx

Presente

Byakuran :P

Hola, sabes esas líneas me salieron de las cartas que alguna vez le mandaste a Yuni para no sé qué de una unión o algo así, bueno te diré algunas cosas. Una de esas es que ya me enteré de que tienes que contarles a todos sobre lo sucedido ¿Qué cómo me enteré? No te incumbe. Espero que les espliques bien nufufufufuf especialmente a Mukuro, él tiene que responderte algo interesante y espero que la máquina de Verde funcione. Me hubiese gustado ver a los bebés en su forma original, es una lástima, no recuerdo muy bien cómo se veían en el mundo paralelo que no tenían la maldición. Segundo. Si no vas a hacer la verdadera fiesta "al estilo Vongola", por lo menos indícales las fotos.

Tercero. Por nada del mundo leas las demás cartas, verás que son algo traumantes para un mocoso llorón como tú. Haber... de aquí era el número... bueno, no importa, total, cuando leas la carta significará que todo lo que te esté escribiendo lo haya hecho el viento.