No todo es lo que parece

Capítulo 16: Final de una etapa (Miércoles)

"Ante todos los males, ante todo lo que nos acontece, no hay mejor salida que un buen rato de reflexión y una amistad"

El día martes habían pasado todos en diferentes actividades. Los guardianes estaban estudiando con Reborn con todos sus métodos disponibles. Los guardianes de Enma habían decidido bajar a ver a su jefe, al ver su condición, decidieron quedarse junto a él todo el día y solo salían para ir al baño, comer o cuando los doctores lo pedían.

Jasid se habían perdido al igual que Tsuna, nadie sabía que era de ese par y no los habían visto en lo que restaba del día ni en la tarde. Iemetsu, que no apareció durante la reunión entró a la merienda preguntando por su hijo, Timoteo se lo llevó y le explicó lo que se había perdido. Todos entendían la situación a la perfección, pero las dudas seguían en su cabeza. ¿Cómo podrían ayudar al cielo? ¿Qué método sería el más apropiado para matar a ese hombre que tanto daño había causado? Entre muchas más preguntas.

Durante la merienda entró una empleada y con delicadeza, mientras reclamaban del exagerado entrenamiento del espartano azabache, les avisó que podían regresar a sus hogares. Todos se acordaron en ese momento de algo importante, sus familias. Y es que se habían olvidado de que ellos, solo por estar relacionados podrían salir afectados, sin embargo la voz de cierto rubio interrumpió sus pensamientos.

-Ángelo no haría eso, no se expondría sin un plan.

Ryohei, que estaba preocupado por su hermana reaccionó.

-¡Ayer tranquilamente pudo con ustedes al extremo y quieres que no esté preocupado!

Dino, bajó la mirada, Ryohei quiso disculparse al notar que al caballo no le gustaba hablar de él, pero la palma de la mano del Caballone le impidió.

-Tranquilo, no tienes de que preocuparte. Sé perfectamente que apenas salimos vivos de ahí- Le dedicó una sonrisa y se sentó a lado de ellos –solo que él no ataca sin antes ver la peor manera de hacer sufrir a Tsuna... y solo lo lograría cuando él esté con la guardia baja.

-¿Estás diciendo que Ángelo sabe que Tsuna está en guardia?- preguntó Gokudera.

Dino miró al grupo que ahora parecía más interesado que antes. Lucían seguros, capases de enfrentar los mil infiernos para salvar a quien les salvo, después de todo eran guardianes de Tsuna. Asintió y se retiró dejándoles comer para que se retiren a sus casas. Esa noche, todos fueron a sus respectivas casas y confirmaron que nada malo había sucedido en ellas. Su excusa de no haber pasado la noche era simple, estaban en casa de los Sawada comiendo los famosos pastelillos de Nana.

Al día siguiente fueron al colegio, Gokudera se había encontrado con Yamamoto y Chrome por el camino. Desde que llegaron se podía observar como algunos estudiantes les quedaban viendo. Ellos simplemente dejaron, como casi siempre, que murmurasen lo que quisieran. Dentro del pasillo se encontraron con Ryohei y Mukuro peleando verbalmente.

-¡Cabeza de Piña, primero tienes que ir a la antigua casa de Sawada, si no Reborn-sensei te hará entrenar al extremo!- gritó Ryohei

-Kufufufufufufufuf, ¿A quién le dices cabeza de piña? Cabeza de césped- se posó con su tridente enfrente para comenzar una pelea –además, nadie me da órdenes.

-Mukuro-sama, será mejor que vaya a cumplir con la revisión, antes de que pase algo malo.

Mukuro sonrió como solo él puede hacerlo. A los recién llegados les salió una gotita. Parecía que nunca cambiarían. Gokudera iba a interferir hasta que se escuchó el "Kamikorosu" de Hibari. Una nueva pelea iba a comenzar, Mukuro ya había apuntado su tridente a Hibari mientras que el contrario se posicionaba para la pelea con sus tonfas, se hubiesen peleado de no ser por el murmullo y el grupo de personas que se iban acumulando en la entrada del pasillo.