¿Será...? (Fanfic Percabeth) (En Edición 54/89)

Capítulo 69

Dedicado a irislovegood

Annabeth PoV:

Tengo que decírselo a alguien, ¿por que no a ustedes? Lo que acaba de decirme Piper me molestó mucho, sobre todo porque puede ser cierto. Sé que antes de mí Percy puede haber tenido muchas novias, y que con todas ellas pueden haber pasado cosas que a mi no me agraden, pero jamás me había preocupado por eso, hasta que me lo dijo Piper.

Siento que soy demasiado inocente para alguien cómo él, y que si no tengo cuidado podría aburrirlo, pero de verdad tengo miedo, miedo de no ser lo suficiente para él, y que desee más de lo que puedo darle.

Percy había ido al baño en el momento en el que llamé a Piper, así que no tuve mucho tiempo para recuperar la calma para cuando volvió, y de dio cuenta de eso.

-¿Qué tienes mi amor?- Es muy tierno, y siempre me saca sonrisas, pero ahora no estoy de mucho humor que digamos.

-Nada.- No quería decirle esto. -¿Seguimos?-

-No hasta que me digas lo que te pasa.-

-Créeme, no quieres saberlo.-

-Annabeth, ¿qué puede ser tan malo que no me va a gustar?-

-Si te pregunto algo, ¿me responderías?- Me di por vencida y comencé a juntar valor para hacer la pregunta y escuchar la respuesta.

-Sin dudarlo dos veces. ¿Me dirás?- Asentí.

-Antes de mi, ¿cuántas novias tuviste?-

-Algunas, no sé cuántas, pero no te asustes que no fueron muchas.-

-¿Y con cuántas de ellas...- No pude terminar, de verdad me daba terror ésta pregunta.

-¿De verdad eso es lo que te preocupa?- Me miró tiernamente. -Yo te amo a ti y eso es lo que importa Annie.-

-No has respondido mi pregunta.-

-¿Por qué quieres saber?-

-Llamé a las chicas para preguntarle a Piper sobre cómo está para la cita, y ellas comenzaron a hacer bromas sobre ese tema, y tengo que confesar que me dio miedo la respuesta. Ya sabía que no soy la primera, pero jamás supe cuántas había antes de mí.-

-Annabeth, si eso es lo que temes, te puedo dar la seguridad de que cuando pase algún día, tú serás la primera.- Me sonroje mucho con eso, y él me sonrió de forma muy tierna.

-¿Por qué quieres esperarme así?-

-Simple, porque te amo y te adoro, y lo único que quiero es hacerte feliz.-

-Yo también quiero eso.- Me acerqué a abrazarlo.

-Entonces ¿seguimos?- Asentí.

Tratamos, bueno, al menos traté de seguir con el estudio con todas mis fuerzas, pero él obviamente no estaba interesado, dedicó la hora siguiente a caerme cosquillas y besar mi cuello y detrás de mi oreja, que sabe que es mi punto débil en este juego suyo.

Luego de una hora me di por vencido.

-Okey, tú ganas, ¿qué quieres hacer?-

-Yo estoy muy bien así.- Se lo pensó un poco mejor. -La verdad es que no.- Tomó mi mano y comenzó a tirar de mi con delicadeza, decidí seguirle la corriente, me paré y dejé que me guiara a donde quiera que vaya, se sentó en sus piernas. -Ahora si estoy perfecto.- Solté una carcajada.

-¿Y no te interesa saber si yo estoy bien ahora?-

-Para nada, tengo la seguridad e que estás tan bien como yo.- Solté una carcajada, y luego lo besé.

¿Mencioné que adoro hacerlo? Y estoy convencida de que a Percy le fascina también.

-Volviendo a la realidad.- Dije levantándome, juro por todos los dioses que no tengo idea de donde sacó tanta fuerza de voluntad.

-¿Cómo lo hacer?-

-¿El que?-

-Dejar de lado la tentación, yo también la siento Listilla.-

-No tengo la más mínima idea, me estaba preguntando lo mismo de hecho.- Soltó una carcajada. -¿Me prestas tu teléfono?-

-Ten.- Me lo pasó y comencé a buscar algo importante. -¿Qué buscas?-

-Shhh... ¡lo encontré!-sonreí victoriosa y comencé a llamar, Percy me miraba divertido como tratando de averiguar que es lo que quiero.

-Hola Percy, ¿cómo estás?-

-Hola, no soy Percy, soy Annabeth, su novia.-

-Hola, si me han hablado mucho sobre ti, ¿en qué puedo ayudarte?-

-Annabeth, ¿con quien hablas?- Preguntó Percy, le hice una seña con la mano para que callara.

-Pues, la cosa es bien simple, ¿estás ocupado? Te invito un helado.-

-Genial, pero ¿por qué?-

-Ya que Percy no nos presentó, tendré que hacerlo yo. Él conoce a casi toda mi familia y amigos, y yo no conozco siquiera a su mejor amigo, así que ¿dónde nos juntamos?- Percy soltó una carcajada, se paró y me quitó el teléfono.

-Grover, soy Percy.- No escuché que le decía el ya nombrado. -No, tengo una novia muy obstinada... mucho más que Enebro... ¿te veré allá entonces?... genial, lleva a Enebro contigo, ellas se llevarán bien... adiós.- Puso el teléfono en mi cara. -Despídete.-

-Adiós Grover.- Y colgó la llamada. -¿Qué te dijo?-

-Que pareces amigable, y que nos veremos en la heladería de mi madre en media hora, llevará a su novia con él.-

-¿Cuánto tiempo tienen ellos?- Pregunté.

-Casi dos años, ¿por?- Le dediqué una sonrisa.

-¿Y estuviste dos años tocándole el violín a tu mejor amigo?-

-Eres mala, ¿te lo han dicho?-

-Bastante, si.-

-¿Nos vamos?-

-Déjame cambiarme.- No traía algo adecuado para la ocasión, y no quería dejar una mala impresión.

-No Annabeth, llegaremos tarde y tú te verías hermosa incluso con una bolsa de basura en el cuerpo.- Me sonroje ante eso.

-Gracias.- Me sonrió.

-¿Nos vamos?- Asentí y nos dirigimos a la heladería de Sally, nos fuimos en taxi esta vez, Jason se llevó mi auto a su cita.

Cuando llegamos a la heladería, fui a hablar a Sally, Percy me siguió muy de cerca con una sonrisa.

-Hola Sally.- Saludé.

-Hola linda. Pensé que estarían en tu casa.-

-Así era, de hecho estábamos estudiando, hasta que pensé que sería muy buena idea conocer a Grover.-

-Me quitó el teléfono y le llamó sin mi autorización.-

-Lo dices como si la necesitara hijo.- Dijo ella y yo solté una carcajada, Percy nos miró mal a ambas.

-Si no les molesta, iré a sentarme para esperar a mi amigo.- Dijo mi novio y se fue a sentar con un puchero como de niño pequeño.

-Ve con él mi niña, eso es lo que quiere.-

-Lo sé, pero dejemos que sufra un tiempo.- Ella se rió y comenzamos a hablar, de mano compré mucho helado para los tres, y cuando ambas creímos que estaba bien, volví con Percy quien me miró con una sonrisa cuando me senté a su lado, y juntos esperamos a que llegara su amigo.