Alianza de Sangre

73.Reencuentro.

Salí de la ducha y con una toalla al rededor de mi cuerpo me dirigí a mi antiguo cuarto,al parecer nadie había llegado todavía ya que no escuchaba sus respiraciones,al entrar vi que todo seguía igual a como lo había dejado,la ventana abierta la cama deshecha algunos papeles que había garabateado sobre la mesita de luz. Abrí el placar y busque qué ponerme, saque unos jeans y una remera negra y me puse las converse que había allí,al terminar salí del cuarto para volver al de Alaric.

Al entrar lo vi en calzoncillo saliendo de su baño con los ojos de color negro y la respiración agitada,lo mire extrañada al notar que su lobo estaba tomando el control.

—¿Dónde estabas?.—dijo,al acercarse a mi y tomarme de los brazos,su voz era más gruesa de lo normal.

—En mi cuarto.—dije señalando con el pulgar hacia atrás, él gruño.

—No me asustes así. —me abrazo con fuerza.—Creí que te había imaginado.—aflojo un poco su agarre hasta que su cabeza estuvo en mi cuello.—Creí que te había vuelto a perder...

Lo abrase,podía sentir su corazón, podía escucharlo,era fuerte y sincero,cerré los ojos para concentrarme más en él, su calor me envolvió y el rítmico palpitar de su corazón invadió mis oídos, el olor a chocolate volvió y combinando todo eso me sentía en una nube,me sentía completa,tranquila y feliz. No lo quería soltar y no lo hice y él tampoco,bese su cuello y note como se estremecía,
¿alguna vez me había sentido así?, no jamás, nunca había sentido esta sensación de hogar.

—Todo estará bien.—dije,casi inconscientemente,Alaric se había relajado y su respiración ya era regular. —¿Qué hora es?.—lo solté y él me dio un beso en los labios antes de ir hasta la mesita de luz y mirar su celular.

—Ocho treinta.—se acerco de nuevo y me tomo de la cintura.—¿Quieres desayunar?.—beso mis mejillas y luego el mentón,la frente,la nariz y por último los labios,un beso suave y sin apuro.

—Mm...si.—al bajar y terminar de desayunar la primera en llegar fue Inara la cual dio varios gritos muy agudos al verme en la cocina muy pegada a Alaric,me abrazo hasta casi sacarme el aire,los siguientes en llegar a los poco minutos fueron Andrew y Rebecca.Fue un reencuentro en el cual los tres se sorprendieron y alegraron de verme allí, hablamos un poco e Inara no dejaba de repetirme lo bien que nos vemos Alaric y yo juntos.

—Siena.—Andrew me regalo una pequeña sonrisa.—Quiero hablar contigo.—dijo,asenti y después de besar a Alaric lo seguí a su despacho,ahora que lo pienso sólo estuve allí unas dos veces,cerré la puerta detrás de mi y espere que él comenzará a hablar.—Quería pedirte disculpas por lo que dije la otra vez,no fue tu culpa,yo exagere...—comprendí a lo que se refería y comencé a negar, yo tenia que decirle.—Estaba algo estresado y no pensaba en lo que te decía...

—Andrew.—lo interrumpí y él me observo.—Yo debo disculparme porque por mi culpa algo malo pasara.—dije,él fruncio el ceño y me miro extrañado.

—¿De qué hablas?.—pregunto.Apoye la espalda contra la pared.

—Habrá un ataque.—se puso derecho sin entender.—Será diferente,hay que prepararse.—él miro a un lado y luego me dio toda su atención.

—¿Cómo sabes eso?.—sonreí sin ganas .

—Ean esta aliado con Isaac y él es el líder de esos rogues que han estado atacando a las manadas.—Andrew quedo de piedra,asumiendo los nombres de los involucrados hasta que sus ojos se oscurecieron y se dio la vuelta como un rayo y golpeo con el puño su escritorio de madera.—Andrew...

—¡¿Cómo lo sabes!?.—grito,respire profundo e intente no ponerme nerviosa o alterarme.

—Los escuche...—dude.—Por eso me fui.—su respiración se acelero,la puerto sonó con un fuerte golpe.

—¿Qué esta pasando?.—pregunto del otros lado de la puerta Alaric.Andrew le grito que estaba hablando conmigo y que se fuera.

—Me ocultas algo.—dijo y volteo a mirarme,me congele.—Hay algo que no estas diciendo.—él no podría saberlo,no podía leer mi mente como Alaric y ni siquiera él lo sabía, sólo esta alterado.—Siena,dime lo que esta pasando.Dijiste que esta vez seria peor,cómo puedes saber eso si huiste.

No estaba segura de qué decirle y de qué no,pero quizá él supiera algo sobre el mestizo que nombro Isaac.

—Hice un trato con Isaac.—le dije y vi como su alteración iba en aumento pero también note que se sentía traicionado.—Yo debía quedarme allí con Ean y él no atacaría a la manada.—me observo en silencio.—¡Por eso me fui!.—dije desesperada de que él me creyera.—No podía quedarme allí...

—Hay algo más, o ¿no?.—dijo,dio unos pasos acercándose a mi.—Conozco a Isaac y sé que él no haría un trato tan simple.—se detuvo a algunos centímetros de mi.

—Quería que copulara con Ean.—susurré inconscientemente por miedo a que Alaric pudiera escucharme,lo mire a los ojos esperando que me crea.—Andrew,yo no quería...—comencé a negar con la cabeza.—No quería eso,así que me fui.Pero ahora por mi cobardía él atacara tu manada.—pensé que me gritaría o me culparía por mi decisión pero sólo me tomo de los hombros y me acerco a él,un abrazo fraternal.

—No vuelvas a decir que es tu culpa.Porque no lo es.—me quede estática ante su repentina muestra de afecto,pero suspire con alivio.—Sé porque quería que lo hicieras con Ean.—me aleje para mirarlo sorprendida.—Hiciste bien en irte,si cumplías con tu parte del trato estaríamos en una peor situación de la que ya estamos.—no entendía por qué, yo me fui porque no quería eso para mi pero no pensé exactamente que tipo de consecuencia tendría el resto si yo obedecía a Isaac,supuse que sólo era una idea loca de él.

—Dime por qué. —él me soltó y se sentó detrás de su escritorio,quedó en silencio por unos segundos.

—Tu ya sabes quién eres.—dijo.—Pero esa sangre que corre por tus venas no siempre trae cosas buenas...