Peligro y Muerte

9. Excusas

-Señorita los estudios ya han terminado – esa voz ya la reconozco en cualquier lugar lamentablemente

-No es estudio, es placer, y si no le importa, debería dejar de importunarme – las palabras sales con fluidez y siento que estoy hablando como los personajes de la época

-mis mayores disculpas, pero ver a una joven tan poco pintoresca y dedicada a sus placeres, no podía evitar ir a irrumpirla y mostrarle lo que podría ser un buen placer – llegue a estar maravillada con su fácil manera de hablar, pero todo se apago con su estúpido orgullo y perversión

-Con poco respeto me gustaría que le den, y que se largue – devuelvo la pagina, ya que me di cuenta que leí por leer y mis pensamientos me alejaron

-¿No le gustaría ser acercada a su casa señorita? – por los tonos de voz se que está ocultando una pequeña carcajada

-No me gustaría ser una tercera en discordia, está claro que ya tiene una señorita a quien acercar a sus aposentos -  y entonces me siento superior al poder continuar hablando así y no quedarme callada

-Veo que está siendo mal informada… la única señorita a la que le muestro el interés de ser su acompañante, se encuentra ruborizada y leyendo un libro poco animador -  ahora se escucha un poco mas enojado, pero no deja atrás el juego de palabras

-pues entonces usted es un hombre de poca palabra y convicción, tiene mujeres ilusionadas tras suyo pero solo le interesa atormentar a quien no muestra interés por usted… y este libro es bastante bueno para su información – rendida de no captar el libro lo cierro y lo guardo en la mochila

-¿se identifica con algún personaje? – habla suave y familiarizado con las palabras, podría jurar que es de la época

-un poco con Catherine Earnshaw, ha demostrado hasta dónde puede llegar por el amor, pero le han desagradecido ofendiéndola – quiero que deje de hablar, ya siento mis mejillas arder

-no opino lo mismo, de hecho se parece mucho a Heatchcliff – y solo eso hacía falta para hacerme enojar un poco

-¿Heatchcliff?... pues usted seria un perfecto Hareton Earnshaw, tan torpe y poco convincente, no sabe cómo tratar con las personas – me levando mientras hablo

Acomodo la mochila en mi espalda y elevo la vista para encontrarme con Muerte sobre una linda moto triumph thruxton negra, esta con los brazos cruzados y sus ojos brillan con humor, me ha encantado la moto, pero no lo demostrare.

-¿Estas de mal humor? – ahora habla suave y enternecido

-Aléjate – trato de irme pero su moto obstruye mi paso

-¿No quieres que te lleve?... se me da bien buscar direcciones, y más cuando conozco la casa – esta recordándome su lindo cartel de bienvenida, y eso no ayuda en nada, solo hace que quiera golpearlo

-Espero a mi hermano – muevo el pie con impaciencia esperando que llegue

-hermano… - gira su cabeza en busca de alguien, pero lo hace como burla al ver que esta completamente vacío el lugar

-ha quedado de llegar tarde – miento excusando a mi hermano

-algo me dice que no vendrá – sonríe con un toque de perversión 

Mete la mano en el bolsillo de sus vaqueros y saca un celular blanco, pasa el dedo por la pantalla y antes de que siga lo reconozco, mis ojos se abren como dos grandes platos

-te mostraría el mensaje pero no recuerdo la contraseña – mueve el celular de lado a lado

Trato de atraparlo pero es más rápido que yo –Mi celular... Dámelo… Ladrón – empiezo a dar manotazos buscando poder agarrar mi celular