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Tyler camino a paso apresurado hacia su celda, ya es otra semana aquí y visitar a Josh de madrugadas se ha convertido en una costumbre. Nuevamente huye al escuchar la campana anunciar el inicio del día, en prisión los oficiales ingresan al pabellón con gruesas llaves en manos. Debe apresurarse o podrían atraparlo. 

Los días son largos hasta la ansiada noche. Se siente un niño haciendo travesuras otra vez, ignora las visitas de Gerard, el papeleo que se ha vuelto frecuente tanto sus salidas hacía otras estancias menores, los días nacen y mueren sin que pueda hacer más. Josh esta atrapado en esa celda, abandonado a su suerte. Disfrutar de las comodidades que lo rodean ya no suena acogedor, siente que no simboliza nada. 

— Oficial ¿qué día es hoy?  —pregunta.

El hombre uniformado lo observa con curiosidad, el joven Joseph tiene muchas comodidades en su espacio pero sabe que no han colocado un calendario entre las demás comodidades. Responde con gentileza:

— Es dieciocho de diciembre, señor. A una semana de navidad. 

Siente que ha domesticado a este hombre. Le ha prometido dinero que no tiene y este responde feliz a sus inquietudes. No solo es el único oficial que ahora esta resguardando su celda sino que también ah conseguido algunos favores a través de él para mejorar en algo la situación de Josh. A conseguido llevarle alimento en las noches, y algo de alcohol con vendas para sus heridas.

 — ¿Qué es navidad?

***

Josh llega último al comedor, Freddy lo había dejado encerrado otra vez en la celda. Como todos los días, observa de lado a lado en el lugar, está convencido, aunque Tyler ya se lo ha negado, que lo encontrará uno de estos días aquí.

— Cuidado mascota —advierte un reo que esta abandonando el lugar— Tu lugar está en la esquina.—advierte. Golpea su bandeja y aunque vacía, cae provocando la risa de los aún presentes. 

En cierta manera es mejor no encontrar al menor aquí. No es bueno que descubra su vivir en estas condiciones podría temer.

Sumiso, decide alejarse a rápidos pasos de este reo que lo ha intimidado. A veces es mejor así siempre es mejor así.

Su esperanza a revivido desde que recibe las visitas del menor todas las madrugadas. El acoso no se ha detenido, los reos no lo han dejado de intimidar, el odio no se detiene y los días siguen siento aterradores pero algo ha cambiado. Es soportable.


***

La comunicación con Gerard no ha mejorado pero ha vuelto a su giro natural, regularmente estaría bromeando como antes pero la imagen de un Josh adolorido junto a la consigna que le había referido el abogado, abortaban su sonrisa. Gerard era grosero cuando hablaba de Josh, no lo conocía y solo sabía soltar mierda de él. 

— Faltan pocos días, ya vas a dejar pronto este lugar.

¿Pronto? Tan rápido habían pasado los días.

—¿Cuanto falta? —busco saber. Hace poco había llegado Gerard, despidió al oficial a cargo y habiendose recostado sobre sus muebles, estaba comodamente comiendo frituras en su celda. 

La idea de abandonar al mayor en este infierno no sonaba agradable. No podía irse solo, tenía que llevarse a Josh de ahí.  

— Diez días.

— Llevo la cuenta. —sonrió Misty— Estás tratando de engañarme y no puedes hacer eso...

"conozco tus partes favoritas para desmenbrarte yo mismo" pensó

VOICE // JoshlerWhere stories live. Discover now