CAPÍTULO 25

762 90 17
                                    

Emma

Mis manos se están empezando a adormecer por las esposas que traigo y puedo sentir como mi cuerpo se está deshidratando, hace muchas horas que no como ni bebo nada, pero a la vez me siento feliz de haber podido sobre llevar la situación sin caer en un ataque de ansiedad. En este momento la misión pasa a segundo plano, lo importante es salir bien de aquí, en la orden es algo que siempre nos remarcan, si se puede evitar la violencia es mejor evitarla.

No estoy muy segura de por qué salieron de la celda sin decirme nada, ¿significa que ahora estoy de su lado?, la verdad es que eso si me ha dejado un poco confundida. No me gusta la idea de ayudarlos, pero tendré que hacerlo hasta que esté segura de que mi vida no corre peligro.

Escucho como la puerta de la celda se abre y cuando levanto la mirada veo a Derek, nuestras miradas se cruzan por unos segundos, ninguno de los dos dice nada. Él cierra la puerta y después se aproxima a mí.

La situación me causa tensión, no puedo imaginarme en lo que está pensando o en lo que me puede o quiere hacer en venganza por lo de su hermana.

—Tenemos que hablar— me dice con la vista fija en la pared.

—¿Hablar sobre qué? — le pregunto.

—Sobre todo, nosotros, tu padre— hace una pausa antes de continuar hablando—,mi madre y sobre la orden.

—No tengo ganas de hablar de eso, ya les dije que los apoyaría, ¿qué más quieres de mí? — no quiero que vuelva a mencionar a mi padre, no me interesan saber las razones por las que Derek hizo lo que hizo.

—Pues todos ahí a fuera están de acuerdo en que antes de que podamos confiar en ti, debemos aclarar todos estos temas, de lo contrario te tendremos como prisionera y no te dejaremos ver la luz nunca más— me dice amenazante—, pero claro tú decides.

—¿Esa es tu forma de obligarme a hablar? — le pregunto, quizás un poco más prepotente de lo que me hubiera gustado.

— No te estoy obligando a nada, solo digo que es tu decisión — me dice con una media sonrisa en el rostro, hasta me atrevería a decir que lo está disfrutando.

—Está bien, hablemos— me rindo.

—Bueno, empecemos por la razón por la cual nos conocimos— me dice para después sentarse en frente de mi—según tú, ¿Por qué mi madre y yo frecuentábamos tu casa? —. Me pregunta poniendo la mano en su barbilla y levantando las cejas. Parece el conductor de un programa de preguntas, esperando por la respuesta de un concursante.

—Porque tu madre y mi padre eran amigos y además hacían negocios juntos, es por eso que se veían frecuentemente—hago una pausa para mirarlo, lo miro sintiendo que es una pregunta muy estúpida, es como si estuviéramos buscando una respuesta que ya sabemos los dos—. En una de esas reuniones, tu madre vino contigo a mi casa y nos llevamos tan bien que empezó a llevarte más a menudo— le respondo, pensando en lo inútil que es todo esto. Derek niega con la cabeza.

—Estas en un error, esas son unas cuantas mentiras que te hicieron creer— me molesta que me acuse de ilusa, se nota que no me conoce—. En realidad, lo que pasaba era que mi madre tenía conflictos con el gobierno y tu padre se aprovechó de eso para extorsionarla, la obligo a poner a su propio hijo bajo los microscopios de los científicos de la orden—cuando lo escucho, lo miro sorprendida, no me esperaba para nada algo así—. Si Emma, fui parte de un experimento y no solo yo, tú también lo fuiste, tu padre era el que se encargaba de supervisar y grabar todo lo que tú y yo hacíamos juntos.

—Eso es imposible, mi padre nunca me haría algo así— le digo enojada, no puedo creer que le eche tanta mierda a mi padre para excusarse.

—Claro que, si lo haría, de echo si lo hizo y yo estuve ahí para verlo y vivirlo todo. Pasé por un sinfín de operaciones antes de conocerte, no tienes idea lo que sufrí por ese experimento y ¿sabes qué más?, luego me enteré que las operaciones que me habían hecho eran tan peligrosas que existía un ochenta por ciento de peligro de muerte— noto que está muy alterado. O actúa demasiado bien o todo lo que me cuenta es verdad, pero no puede ser verdad, mi padre no me haría eso a mí, ni a nadie.

—Suponiendo que lo que me cuentas es verdad, ¿de qué se trataba ese experimento?, ¿Por qué nos utilizaron a ti y a mí? — le pregunto.

—No puedo decirte eso, ya he hablado demasiado— me responde con seriedad.

—Sabía que no era verdad— suelto en voz baja. Derek me mira negando con la cabeza de nuevo.

—Mira esto— me dice, luego gira la cabeza y con las manos aparta su cabello. En su cráneo hay cicatrices pequeñas, apenas perceptibles, pero son muchas, quizás cincuenta. Derek vuelve a mirarme esperando mi respuesta a lo que me acaba de mostrar.

—Eso no prueba nada— le digo incrédula. ¿Qué me asegura que esas cicatrices se las hizo la orden o el gobierno?.

— Tengo pruebas. Mi madre grabo a tu padre cuando hablaban, la voz de tu padre es perfectamente reconocible, de echo traje una parte de la grabación para que la escuches— me dice de repente. En ese momento siento que todo lo que me dice es real y siento como mi corazón se destroza al pensar que mi padre pude hacerme algo así.

Derek saca un dispositivo de audio de su bolsillo y lo reproduce sin preguntarme si quiero escucharlo.

"—¿Ya tienes listo a tu hijo? — De inmediato reconozco la voz de mi padre, me entran ganas de llorar.

—Sí, ya se recuperó de las operaciones y en la orden me han dicho que es apto para realizar el experimento, ¿Cuándo puedo llevarlo a tu casa?

—Puedes venir mañana— Derek pausa el audio. "

—¿Ahora si me crees? — me dice mirando hacia su dispositivo de audio.

Me siento paralizada, no sé qué decirle, no quiero hablar. Así que solo me quedo mirando al vacío intentando encontrar una explicación a todo esto. Derek me toca el hombro con la yema de sus dedos y suspira.

—¿Es por eso que te fuiste? — le pregunto en con hilo de voz.

—Sí, mi madre no aguanto verme sufrir de esa manera así que decidió que mi familia se fuera con los protestantes para que así pudiéramos intentar hacer algo para parar con los abusos del gobierno— Derek hace una pausa y suspira otra vez—. Pero la encontraron y la amenazaron de llevarme con ellos si no cooperaba. Yo estoy seguro de que la encontraron porque tu padre la delató.

—Lo siento— le digo, entre sollozos —yo no tenía idea de que había pasado eso.

—No tienes que disculparte, solo ayúdanos... ayúdame a que se sepa la verdad de este gobierno—por alguna razón siento ganas de ayudarlo, quiero hacerlo, pero para descubrir la verdad, para saber porque mi padre lo hizo, estoy segura de que a él también lo extorsionaron, tengo que averiguarlo.

—Está bien Derek, esta vez estoy de tu lado.

-------------------------------------------------------------

no olviden darle estrellita si les gusto y dejarme un comentario para saber su opinión. Los quiero mucho! gracias por leer! 

Entre dos mundosWhere stories live. Discover now