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"Caqui"

Las ruedas de su silla manejada por Jimin lo llevaron a la entrada, esperando a ver al castaño muchacho allí esperando por ellos. Y tal como supusieron, estaba ahí. Siempre mostrando una afable sonrisa.

Hoy era viernes, pero Taehyung sentía como si no hubiera mayor diferencia entre el lunes y el viernes.
El lunes en la noche, para ser más precisos.

Aún se mantenía la remembranza de ese anochecer, de esa cercanía, y de esos labios. Y por más que quisiera enfocarse en otro asunto en su mente, simplemente no era manejable. Esa noche fue realmente algo significativo, y sin ella no hubiera descubierto cosas que hasta este momento sintió recorrer por sus venas.

No todo era muy aseverado y cuerdo en la liada cabeza de Taehyung, pero sí que todo se sentía real ahora.

—¡Hyung! ¡Taehyung! —les llamó acercándose al par.

Taehyung enarcó su ceño y se giró a ver a Park.

—¿Desde cuándo te dice "hyung"? Yo ya no recibo esos tipos de tratos. Qué descarado.

El pelinegro solo se limitó a carcajear ante el comentario.

—¿Acaso estás envidioso?

¿Acaso estás envidioso? —se mofó con tono burlón— No —el reír de Jimin continuó—. Cómo crees...

—Oigan, chicos —Jungkook llamó nuevamente cuando los alcanzó—. ¿Qué es tan gracioso? Yo también quiero escuchar el chiste...

—No era un chiste realmente —mencionó el mayor de todos, secándose imaginariamente lágrimas de risa.

El castaño se giró a fulminar a Kim.

—Tae... —se quejó formando un puchero.

El nombrado casi llega a atragantarse con su propia saliva al escuchar ese apodo, y Jimin le miró con las cejas alzadas.

—Te... Te lo cuento después —musitó dirigiéndose a la entrada por su cuenta, seguido de Jungkook a su lado y Jimin por detrás.

El pelinegro adelantó su paso, y con la sola intención de agregar otro comentario a su anterior disputa, dijo: —Pero, al parecer, sí recibes mejores tratos que yo —y desapareció al interior del edificio.

Taehyung no pudo emitir otra réplica y exhaló sonoramente, avanzando a la entrada con su silla.

—¡Jeon!

Los sentidos de los dos chicos se activaron y giraron a ver de quién pertenecía la voz que llamaba por el castaño.

Jungkook se espabiló de la modorra mañanera al encontrarse con la cara que se dirigía apresurado a él. —¿Vernon...?

—Y yo —sorprendió el pelinegro a los demás, quién llegó a las espaldas de su castaño amigo cuando estuvieron frente al par.

—Kunpimook. Hansol.

—Solo dime BamBam... —se encogió de hombros al oír su nombre por la boca de Kim.

—Queremos hablar contigo, Jeon —anunció Vernon con atisbo de apuros en su manera de hablar.

—Íbamos a clase ahora mismo, podemos dejarlo para otra ocasión.

—No te quitará mucho tiempo.

—De verdad tenemos que irnos... —intentó escapar tomando los mangos de empuje de la silla de Taehyung para partir su huída.

—Espera, Kook —llamó Kim.

camaleón ¹ • taekookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora