12

5.7K 846 98
                                    

Acaso su padre no lo quería, sabía que estaba trabajando para darle una mejor vida, pero nadie le había preguntado qué quería en verdad.

Definitivamente quería un padre, uno que pasara momentos memorables con él y no ausente a su vida, no solo saber su nombre y a lo que se dedicaba. Alguien que le enseñara muchas cosas, comiera con él en sus vacaciones o que lo regañara si hacia algo mal como a cualquier joven, él no tenía nada de eso.

No era complicado, no necesitaba que lo cuidaran, porque podía hacer muchas cosas solo, lo único que quería era unos minutos para verlo y platicar, pero por alguna razón lo rechazaba.

Su madre no podía hacer nada, ella estaba de acuerdo que su futuro era lo más importante que estar en familia.


Parecía un chico malcriado y mimoso, queriendo un abrazo de cualquier persona, pero en realidad solo quería sentirse querido; Minho lo hacía en una parte, lo consolaba y trataba que sonriera, ese chico lo amaba. Él también lo quería mucho, pero ¿Por qué no se podía entregar completamente a su novio? No lo sabía a la perfección; le gustaba los besos que le daba calentándolo, llegando acariciar su piel debajo de su ropa y cuando estaban a punto de dar el siguiente paso él lo detenía, no era suficiente; Minho no era esa persona.

Aquella persona que podría entregarse sin pensar, esa que le daría todo el cariño que estaba buscando, dispuesto a formar una familia que siempre quiso. La persona que al mirarlo demuestre un amor inmenso capaz de fundirlo y esa que lo necesite como él lo hacía.

Parecía egoísta y algo masoquista, no querer un buen romance normal, con un novio que lo amaba y le diera todo, para él esas solo eran falsas ilusiones de perfección, que tarde o temprano podrían terminar mal al no haber buscado y encontrado su ser. Por eso no se había entregado a Minho, él no había encontrado el ser de su novio y este tampoco este sabía el de él.

Trataba de no importarle ese pensamiento y que pronto pudiera conocerlo para poder entregarse completamente a su novio.



Al buscar el abrazo del pelinegro le reconfortó de una gran manera, casi tal cual lo hacía Minho, pero con una gran diferencia ¿Cómo un casi desconocido podía hacerlo? Es decir, hace unas pocas semanas había conocido a Hoseok y ni siquiera le había contado sobre su situación familiar, el sentirse solo y el odiar eso. Solo pudo la transparencia en los ojos del mayor, una sincera preocupación y el querer calmarlo rápidamente.

Muchos podían abrazarlo, pero pocos lograban hacerlo, Hoseok era uno de ellos.

Odiaba cuando se sentía un niño abandonado, porque para nada lo era, tenía a sus dos padres, varios amigos y un novio amoroso, pero ¿Porque cuando no estaba con nadie ese dolor aparecía de la nada? No se entendía.


*

Abrió los ojos del golpe para darse cuenta que se quedó de nuevo dormido en el ático del mayor, solo por estar llorando, no era su plan, solo descansaría un poco y se iría después de limpiar la cocina. Ahora estaba bastante apenado con Hoseok, por irrumpir de esa manera en su casa para que cenaran y dejar la cocina sucia, así con ese pensamiento se levantó para huir.

Tomó sus cosas y se cambió, bajó para darse cuenta que la cocina estaba bastante limpia, sin más qué hacer abrió la puerta de la entrada y salió de allí.


*

Su casa era la más solitaria. Entró a su cuarto, se quitó la ropa y se bañó para limpiar la casa antes de ir a la universidad. Revisó su celular para encontrarse con un montón de llamadas de su novio, con la última vez, no quería decirle que había dormido en casa de Hoseok por estar llorando, pudo notar que la otra vez se enojó por ello.

Enseñando al Nerd (HopeV)Where stories live. Discover now