ACÉPTALO, NENA

Capítulo 9

"Nuevas nuevos, señoritas"

-Entonces... Me dices que; te gusta un tipo mayor y ahora tu consciencia te está enloqueciendo ¿cierto?

Hollie tragó una sonrisa de sorpresa y emoción cuando las palabras salieron de su boca y la imagen se pasó por su mente. Phia frente a ella, asintió varias veces como si acabaran de acusarla de algo serio, dejando derramar dos lágrimas por sus mejillas y mordiendo su inferior sin dejar de temblar.

Después de haber logrado salir de Bistro en el carro de los padres de Phia (que oh sí, ella había hurtado por segunda vez. Prueba de la gravedad del asunto) ambas se encontraban ahora esparcidas por todo el colchón del la espaciosa recámara de la muchacha, con dos cojines sobre sus piernas y las rastas de la castaña invadiendo las dos almohadas. Phia no había conseguido callarse ni un sólo instante conforme escupía la historia de su gran "secreto", no siendo algo más que un amorío fugaz con un sujeto que conoció por internet, como diez años mayor que ella y de quien ahora ella aseguraba; se había "enamorado perdidamente hasta no saber qué hacer". Pero duh, la diversión no estaba en eso exactamente, sino en la persona quien lo hizo. Y es que, por todos los cielos, había esperado eso de quien fuese menos Phia Roberts. Porque Phia Roberts no hacía nada osado, y lo más interesante que alguna vez consiguió hacer fue sacar un punto menos que la nota más alta en un examen, que valía menos del 5% en una materia.

Por ese motivo, Hollie estaba más que excitada ante la nueva desconocida de su mejor amiga.

-Está mal ¿no está mal? Oh Dios, está muy mal.

-No, no, no, no hay nada mal. Al menos no está casado este... Hombre ¿no?

Ella sacudió su cabeza con mayor prisa en negativa, causando que varios mechones se salieran en desorden de su coleta, mirando a Hollie con sus ojos muy abiertos y cristalinos.

-Ves, entonces sólo puede ser un viejo viola niñas y ya.

-¡Oh, Hollie!

-¡Tranquila!

Esta vez rió con ansias y su sonrisa se ensanchó enternecida y divertida por la situación con la rubia, acariciando con su lengua su boca y exhalando para recobrar el aire perdido. Era muy cómico incluso tratar de calmarla y Phia lo conseguía por momentos, cuando la castaña no sugería resultados ridículos sobre la posible "verdad" de aquel raro tipo y algún probable peligro para ella. La noche no había salido de la manera que ella deseaba pero debía admitirlo; esto era muy entretenido también. Más de lo que había imaginado.

-Hablemos mejor de otra cosa. Ya siento que estoy recargada de mucha negatividad y sabes que eso no es bueno para mi salud... -Profirió la muchacha cogiendo el envase de sus vitaminas sobre la mesita de noche a un lado de su cama, para tomar dos en un solo trago y luego volverse hacia Hollie, esforzándose por lucir serena.- Dime ¿a ti qué te ha ocurrido recientemente? Casi no hemos charlado esta semana.

-Es cierto.

Sus dientes tomaron posesión de su labio inferior y Hollie se sumergió en su mente, pensativa.

De acuerdo, su mejor amiga y compañera de toda la vida en Delphia había confesado al fin lo que tanto guardaba y que Hollie presentía con la actitud tan reservada que había tenido esos días. Ella estaba por eso agradecida, pero ¿Era conveniente contarle de su abrupto interés por las chicas? ¿Y que quien le atraía era la persona de la que más se había quejado esos tiempos y la mejor amiga de su prima? ¿Con la que había tenido sexo? ¿Qué diría Phia de eso?. No era como si a Hollie le iba a afectar realmente su opinión pero; ¿Iba ella a reaccionar bien? ¿Le haría bien saber eso? Ya tenía muchas locuras dando vueltas en su mente ¿Sumarle eso iba a ayudarle en algo? Quizás no...