Cuando crees que tu vida no puede ser peor, llega algo que la destruye por completo.
Los muros que construiste cuando te lastimaron, se rompieron cuando ese "ángel" llegó a ti. Creías que tu vida mejoraría después de haber estado en un orfanato per...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Caminábamos en silencio, yo pensaba en cosas del pasado, en momentos que disfruté y en los cuales supe que en verdad era feliz. Viktor caminaba a mi lado en silencio, parecía entender a la perfección mis sentimientos y no preguntó nada. Eso se lo agradecí mentalmente. Después de varios minutos en donde solo caminábamos en la nieve, llegamos hasta la orilla del bosque en donde su nombre hacia efecto en nosotros. 'el bosque del olvido' jamás lo había escuchado, jamás lo había visto y pensé que tal vez su nombre haría efecto en mis recuerdos. Viktor parecía tranquilo y no habló hasta que decidimos entrar.
—sé que te preguntas porqué se llama el bosque del olvido... —habló en un susurro pero aún así pude entenderle.
Yo alcé la mano para pedir silencio, quería reflexionar acerca de muchas cosas. Quería hacerme saber lo mal que yo estaba, los errores que había cometido y que debía reparar a toda costa. Él comprendió y sólo bajó la mirada apenado, su cabello cayó en su frente dándole sombra en la mitad de su rostro; blanco junto con sus ojos lilas, era una criatura extraña y aún no sabía el poder que le habían otorgado. No lo quería saber, no en estos momentos. Los reinos eran muy distintos y se caracterizaban por su habilidad o su paisaje; mientras que unos eran hermosos, espaciosos y deslumbrantes, otros resultaban ser temibles. No me preocupé más por eso y decidí seguir mirando nuestro camino. Los árboles que pasábamos eran fondosos, hermosos y demasiado grandes. El crujido de las ramas al pasar arriba de ellas me daba cierto escalofrío que no sabía cómo explicar.
—¿Dónde crees que estará Wren? —preguntó Viktor con incertidumbre.
Yo lo pensé un momento, la había visto muy pocas veces cuando Natalia hablaba con ella y esta solo prestaba atención a lo que le pedía. Nos ayudó en varias ocasiones pero jamás llegué a hablarle, solo Natalia tenía la responsabilidad de hacerlo.
—no lo sé, pero este bosque me pone nervioso. —aclaré mis sentimientos para que Viktor mordiera el anzuelo.
Por un lado quería saber acerca de este lugar, porqué le llamaban así. No mentí cuando respondí, realmente me sentía mal y no podía explicar la razón. La cabeza me daba vueltas y sentía náuseas cada vez que caminaba. Mis ojos se cerraban como si un sueño pesado fuera a aplastarme por completo. Viktor notó mi reacción y se puso en frente de mí.
—no he entrado a este bosque, pero dice Khaleessi que es peligroso porque te hace ver lo peor de ti. —explicó preocupado.
Yo asentí y le pedí unos minutos para descansar, no estaba exhausto sino que, mi cabeza me daba vueltas y yo mismo me estaba dando la idea de que esto era real, de que sí me hacía recordar el pasado. El pasado para mí es un dolor gigante porque aún no lo supero, aún no logro olvidar todo lo que pasó; los momentos en que hice mucho daño a personas que no lo merecían solo por gusto, por venganza. Mientras yo estaba recargado en un árbol, mirando la tierra y tocando las hojas... Viktor solo me miraba extrañado por mi actitud y cuando yo le regresaba la mirada él solo la apartaba. Qué chico tan extraño.
