Capitulo 48.-

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Lauren's POV.

Corrí rápidamente por el parque de diversiones como si mi vida dependiera de ello. Las personas se quejaban a medida que mi hombro chocaba fuertemente con los suyos. Las piernas me pesaban y el pecho lo tenía apretado por el poco oxigeno que llegaba a mis pulmones. Sentía como la playera negra se iba pegando de a poco contra mi espalda, juntándose con el sudor. Gotas de transpiración cayendo por mi frente, hasta perderse en el dorso de mi mano, cuando me secaba la transpiración con rudeza. La desesperación de no encontrar a Camila me estaba superando.
Segunda vuelta que corría por todo el parque y no tenía señales de ella. El corazón se me iba haciendo más pequeño a medida que daba una zancada. El pecho me subía y me bajaba y mi respiración era desigual.
Paré en seco, buscando con la mirada en el centro del parque. Las personas iban de a poco abandonando el recinto y ya quedaban solo unas cuantas. Gracias al cielo, pensé ya que al ir quedando menos gente, la oportunidad para encontrar a mi novia aumentaba.
Mis ojos recorrían cada rincón del parque. Nada.
—Maldición —gruñí, alborotando mi cabello ya húmedo por el sudor. Cogí el teléfono y marqué el discado rápido. Camila y yo nos teníamos a ambos como números de emergencia.
Los timbres de que la llamada estaba siendo realizada sonaban. Pero ella no cogía el maldito móvil. Froté mi rostro con desesperación y entonces me acordé.
Hace algún tiempo atrás, había sacado la tarjetilla de contacto de aquel chico. Niall Browning. Por lo que Camila me había contado, ese chico era amigo de Jane y había venido a Londres solo para ayudarla. Gruñí, pero por una vez en la vida quise hacer las cosas bien así que, mandé a la mierda mis celos y rebusqué su tarjeta en mi billetera y marqué su número.
—¿Hola? —respondió él. El sonido del televisor se escuchaba de fondo— ¿Quién habla?
—¿Eres Niall? —espeté, con poco aliento. Comencé a caminar de nuevo, mirando a todos lados, deteniéndome en los lugares más escondidos.
—Sí, ese soy yo. ¿Con quién hablo?
—Lauren. La novia de Camila Cabello ¿Me recuerdas?
El chico pensó unos momentos—Claro. ¿Qué necesitas?
—Necesito que vengas al parque de diversiones del centro. Ariana tiene a mi chica y...
—¿Ariana Grande? —me interrumpió y yo gruñí en afirmación— En quince minutos estoy allá.
—Gracias—le dije, antes de colgar la llamada.
***
Mierda, ya no puedo más, pensé. Esta era la décima cuarta vuelta que daba por todo el maldito parque y aún no encontraba a Camila. Niall ya había llegado y se encontraba coordinando los últimos detalles con la policía. Debo reconocer que nunca en mi puta vida se me pasaría por la cabeza que ese chico era un jodido policía. Es decir, mierda ¡tiene casi mi edad!
Me tironeé el cabello con frustración. La paciencia se me estaba acabando y los nervios me estaban comiendo vivo. El miedo a perder a la chica que amaba por segunda vez no me dejaban pensar con claridad. Mierda, es que yo sin ella no podría seguir.
La comisura de mis ojos picaba por la desesperación. Mierda, dios sé muy bien que he sido una cabrón con mucha gente, pero no dejes que esa hija de puta le haga daño. Santa mierda, tú sabes que la amo.
—¿Lauren? —Niall me habló, sacándome de mis pensamientos. Bajé la mirada, la cual ni cuenta me había dado estaba en el cielo y lo observé—. Creo que ya la tenemos.
Fruncí el ceño— ¿De verdad?
—Sí, pero no estoy seguro —el chico acomodó el arma entre sus manos y se fijó si estaba cargada—. Unos chicos le han dicho a mi colega que han visto a Camila y Ariana por el lugar oeste del parque.
—¡¿Y qué mierda están esperando?! —lancé a todo pulmón. Los demás policías que estaban presentes me miraron con el ceño fruncido.
—Yo personalmente me encargaré de ir a buscarlos. Pero Lauren, necesito que te quedes aquí —me envió una mirada de advertencia—. Si vas hacia allá, lo único que harás será dificultar las cosas. ¿Puedo confiar en tu palabra de que te quedarás aquí?
¿Y este idiota está loco? Jodido infierno, me cago en la puta. Ni muerta me quedo aquí, cruzada de brazos mientras que mi chica está no sé dónde, con una hija de puta que le falta un tornillo.
—Sí.
—Bien —él soltó un suspiro. Al parecer le había costado más de la cuenta decir aquello. Cielos, sé que tengo un carácter de mierda pero... ¿Es para tanto? Al diablo, me da igual— ¿Puedes colaborar con nosotros entonces? —el chico guardó su arma en el estuche que estaba agarrado en la cinturilla del pantalón— Mis colegas te quieren hacer un par de preguntas. Y recuerda Lauren, necesito que te quedes aquí. Si no quieres hacerlo por darme el gusto a mí, recuerda que esto es por Camila. Piensa en ella antes que en ti.
Tragué el sabor amargo que se había acumulado en mi garganta. El muy estúpido tenía razón.
—No me interpondré.
Pero aun así, sigo insistiendo. No puedo quedarme aquí mientras que la chica a la cual amo está allá. Primero muerta.
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Esperé a que Niall desapareciera de mí vista junto a unos cuatro oficiales más y emprendí mi camino por el lado opuesto al cual ellos se habían ido.
Y todo fue como un dejá vù.

Same Mistake (Camren)Where stories live. Discover now