Capítulo 3 - El plan.

10.2K 1.6K 2.2K
                                    

Era viernes por la mañana y Wei Wuxian había averiguado hasta el más mínimo detalle para que todo saliera de la manera en que lo había orquestado.

Ciertamente, estaba algo decepcionado que el beneficio de este primer contacto con los hermanos Lan solo sería para Jiang Cheng, sin embargo, esperaba que cuando los momentos difíciles llegaran, Jiang Cheng se dignara a recibir alguna bala por él o al menos le diera alguna patada para que el proyectil no impactara contra él y que sus entrañas no empezaran a desparramarse de una forma poco agradable a la vista.

En resumidas cuentas, quería creer que cuando a él le tocara arriesgarse para fisgonear en los pensamientos de Lan Zhan, su adorado hermanito estaría allí para apoyarlo y no lo dejaría morir solo.

Quizás agonizar sí, pero no morir.

—¿Ya estás listo? —preguntó ya en los casilleros ordenando su revoltosa mochila.

—¿Quieres que sincronicemos los relojes o alguna ridiculez así? Tenemos que actuar normal, esa es la clave, no como dos putos tipos raros jugando a misión en cubierto —le respondió en un tono un tanto raspado y amargo.

Jiang Wanyin estaba realmente nervioso, pero jamás en toda su existencia lo admitiría.

—Sabes que yo actuando normal es mucho más sospechoso que yo actuando como un espía contratado por Rusia, solo dime si estás listo o no.

—Sí, sí, lo que digas —asintió cerrando el casillero, hoy era el gran día y no había vuelta atrás.

Las horas pasaron con rapidez, como si solo se hubiera necesitado un giro en un reloj de arena para que llegara el momento de la salida.

Ambos hermanos Lan se encontraban en el patio, entregándose unos cuantos papeles mutuamente, mirándolos un momento y repitiendo el proceso. Cuando se veían así, tan cerca y sin tanta gente a su alrededor se apreciaba aún más lo similares que eran. A pesar de no ser precisamente gemelos, tenían casi la similitud de unos.

A veces, era difícil reconocerlos a menos que te acercaras lo suficiente, sin embargo, el estilo de cabello de Lan Wangji no cambiaba mucho y hacía las cosas más sencillas, con el cabello ordenado y con el flequillo más largo solo en ambos costados de su rostro, sin tapar toda su frente, solo parcialmente en sus costados. Era bastante liso y se dividía justo a la mitad de su frente.

En cambio, Lan Xichen tenía la partidura de su flequillo más hacia el costado izquierdo de su rostro. Se peinaba y caía hacia ambos lados la mayor parte del tiempo, aunque a veces, también solía cambiar su estilo y usar el cabello hacia atrás conservando vagamente la división en su cabello, pero dándole un estilo incluso más educado y formal del que normalmente tenía.

Hoy ambos estaban un tanto casuales.

—Ya se separaron, mira, allí está Jin Guangyao, se está robando a Lan Xichen para la junta, es ahora o nunca.

—¿Estás seguro que tenemos solo hasta que finalice la reunión? ¿En serio Lan Xichen lo vendrá a buscar? ¿Lan Wangji no tiene vida o algo así? Ni que fuera un bebé.

—Siempre se van juntos, cosa de hermanos supongo. Deberías aprender un par de cosas de Lan Zhan, siendo un lindo y adorable hermano menor que espera incondicionalmente a su hermano mayor contra viento y marea.

—Qué bonito es soñar —sonrió con algo de malicia.

No es que no apreciara a su hermano, pero tendría que volver a nacer un par de veces más para poder demostrarlo de manera tan incondicional y abierta.

Mientras Wei Wuxian hacía el ridículo pasando de árbol en árbol de forma silenciosa, Jiang Cheng caminó casi al lado contrario para evitar ser visto con el fenómeno que tenía de hermano.

Traductor de hermanosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora