Dear Bird

48. brazalete negro.

Yoongi

Levantarme temprano no es algo que me agrade y menos si es un fin de semana.

¿A quien carajo se le ocurre ir al bosque en invierno?

Si no fuera porque vi a Yewon hacer su maleta ayer, no estaría despierto ahora.

Siento los párpados pesar mientras voy en el auto con mi madre, el aire de invierno en las mañanas empaña las ventanas y yo deslizo mi dedo por el cristal haciendo círculos uniformes.

- Me sorprende que quieras ir - me dice mi madre más animada que de costumbre.

Llevo la bata blanca perfectamente planchada sobre mis piernas y pienso en el chico al que mi mamá va a operar en una hora.

- Salir un poco de casa no me hará mal - me encogí de hombros y acomode la bufanda gris sobre mi cuello.

- Siempre dices que no a los viajes que impliquen salir antes de las 10 am - me mira en el momento que le toca un alto. - Ademas, si no te conociera diría que en realidad quieres ir, pero te conozco y no te ves con entusiasmo.

Muy cierto, creo que en vez de entusiasmado me siento ansioso. El auto continúa moviéndose y yo solo pienso que los próximos tres días se pasarán muy lentos, pero estoy próximo a graduarme y sé que no volveré a tener oportunidades cómo estás para salir en grupo, aunque el grupo de teatro no sea el mío.

Tengo demasiado sueño y que todavía no saliera el sol ayudaba a hacer que cerrara los ojos, la bufanda era gruesa y cómoda me serviría de almohada en el viaje.

Mi madre me dejó justo en el estacionamiento de la universidad y varios otros chicos ya estaban ahí al igual que el autobús que nos transportaría, me acerqué con pereza y los chicos comenzaron a subir al autobús.

Incluso estando afuera se escuchaba el bullicio de todos los que estaban dentro y desde ese momento supe que no tendría tranquilidad.

Subí ahora odiándome por tomar esa decisión y me quede de pie al inicio viendo los asientos, solo quería poder dormir un poco más y de preferencia ir solo. Sin embargo nunca pensé en el hecho que viajaría con Yewon y Yoo en el mismo lugar y ambas chicas me miraban con cierta competibilidad.

- Ciertamente molesto - dije jalando del brazo a Sowon.

- Oye ... - dijo viendo cómo me sentaba a un lado de su novio - levántate.

Lo último me lo exigió con una mirada para nada agradable.

- Sientate con Yewon - le dije y ella regresó a verla.

- Si viniste aquí por ella no es lógico que tú lo hagas - me dijo en un susurro.

- Nunca dije que viniera aquí por ella.

- Entonces es mentira - me dijo y levantó mi brazo - apúrate levante.

- No es mentira - ¿Por qué dije eso?. Me desesperaba la forma que Sowon tenía para que le terminara diciendo la verdad, y lo peor de todo era que no me exigía nada, yo mismo terminaba diciéndole la verdad. - Mira solo quiero terminar de dormir y con esas dos ahí atrás no voy a poder hacerlo... si me siento con Yewon, Yoo nos estará molestando para que yo termine hablando con ella y no con Yewon. Por otro lado si me siento con Yoo, que no quiero hacerlo, Yewon se sentirá mal.

Y es muy temprano para problemas amorosos.

- ¡Ah, está bien!. Pero te lo advierto será la única vez que lo permita, de regreso soluciona tus problemas y busca con quien sentarte. - me miró enojada y me señaló con su dedo - Y más te vale que sea Yewon.