Hope|Regulus Black [Editado]

Capítulo 19: Te debo explicaciones [editado]

Capítulo 19: Te debo explicaciones. 

Después del espectáculo del comedor Emma se dirigía por los pasillos a su próxima clase de astronomía, a su lado iba Remus Lupin, quien preocupado por la chica no se había separado de ella. Emma se paró cuando le pareció ver una figura apoyada en la barandilla de la torre.

—Remus ¿te importa que siga yo sola? —Remus la miró indeciso y preocupado. Con una tierna sonrisa la Gryffindor se acercó para darle un suave beso. —Estaré bien. —Remus asintió sin estar aún convencido y se dispuso a bajar las escaleras.

Emma se acercó al balcón, se sorprendió de ver qué Regulus era el chico apoyado en la barandilla. Parecía estar sufriendo en silencio.

—¿Estás bien? —El Slytherin se sorprendió al ver a la chica, no esperaba que esta le volviese a hablar en la vida.

—¿Me preguntas tú si estoy bien? —Regulus soltó una fría risa y negó con la cabeza. —Deberías odiarme. 

—No eres mi persona favorita en estos momentos, pero no te odio. La vida es muy corta para ir odiando a la gente. —Regulus asintió sintiéndose mas culpable de lo que ya se sentía.

—¿Cómo está tu brazo? —Emma sonrió amablemente. 

—Bueno, quedará cicatriz, pero pega con mi camiseta. —El chico sonrió al ver la camiseta con la que habían entrado esa mañana en el comedor. —Son idea de Phoenix. —Regulus asintió, pero no dijo nada, sentía que a la mínima que abriese la boca las lágrimas saldrían de tus ojos. —Entiendo porque Hope y tú os pasáis la vida aquí, da cierta calma. —Ante la mención de la chica Regulus no pudo controlarlo y las lágrimas salieron de sus ojos. El chico no sollozaba, dejaba que las lágrimas cayesen en silencio aceptando que aquel dolor era responsabilidad suya.

Emma al ver aquello se acercó con cautela y le abrazó con cuidado. Regulus se tensó, pero no la apartó. 

—Regulus, entiendo que ahora mismo estés perdido. Que quizás Hope ha cambiado tu modo de ver las cosas y ya no sabes qué creer. Pero aunque creas que no te lo mereces, no apartes las cosas buenas que llegan a tu vida. Si la vida es corta para odiar, también lo es para arrepentirse.

Un fuerte ruido les hizo separarse. En la entrada de la torre estaba Phoenix. 

—Aléjate de ella Black. —Emma le sonrió tranquilizadoramente.

—Estamos solucionando nuestras diferencias Phoenix. 

Regulus asintió no muy convencido y todavía pensando en las palabras de la Gryffindor. Phoenix se acercó amenazadoramente a Regulus y le agarró de la corbata. El chico la miró serio, si la chica le atacaba no pensaba hacer nada para defenderse, al fin y al cabo, se lo merecía. 

—Escúchame Regulus porque lo diré una vez. —Para sorpresa del Slytherin le abrazó fuertemente. —Quiero de vuelta a mi amigo, Reg. —La chica rompió el abrazo y limpió una de las lágrimas medio secas del Slytherin. —Dicho esto vuelve a herir a alguno de mis amigos y eres serpiente muerta. 

Regulus sonrió, esa era la Phoenix Potter que conocía. Los tres entraron en la clase. Phoenix se sentó junto a Regulus, dejando a Layla junto a Emma.

—Me gustan vuestras camisetas. —Emma rio ante el comentario de Layla. Definitivamente no todos los Slytherins eran iguales.

***

Esa tarde las cuatro amigas decidieron dormir una siesta en la sala de los menesteres, los trabajos y el día a día las estaba destrozando. Nadie dijo que pasar sexto curso e intentar evitar una guerra fuese fácil.