Capítulo 33: Es él [Editado]

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Capítulo 33: Es él. 

Phoenix abrió los ojos lentamente, su cabeza dolía y su garganta se sentía seca y rasposa. Intentó incorporarse, pero era como si millones de agujas se clavasen en cada parte de su cuerpo. Sus manos estaban cubiertas de sangre y ni siquiera sabía si era suya. No recordaba como había llegado hasta allí, todo era un borrón.

—Intenté avisarla. 

Levantó la vista sorprendida. Había pensado que estaba sola. Sus ojos parpadearon acostumbrándose a la escasa luz de la habitación. Cuando por fin consiguió enfocar se llevó una tremenda sorpresa.

—¿Ashley? —Su oscuro cabello se pegaba a su cara debido a la sangre. Parecía cansada, parecía enferma.

—Le advertí por sueños. No me hizo caso. —Ni siquiera sabía de qué me estaba hablando.

—¿Qué está pasando? 

No le gustaba la hermana de Hope, de echo la detestaba. Por su culpa casi perdió a su hermano. Pero en aquellos momentos Ashley parecía tan prisionera como ella y si alguien era capaz de tener a Ashley Riddle de prisionera, desde luego que debían temer a ese alguien.

Ashley rio secamente y la miró fijamente. Había algo en su mirada que la pelirroja no había visto nunca antes, miedo.

—No confíes en nadie Phoenix. Está entre vosotros. Nada es lo que parece.

—¿De qué hablas?

—Es él, siempre fue él. Ha vuelto. Quiere... —Un fuerte golpe en su cabeza la hizo desplomarse en el suelo. Phoenix pegó un breve grito antes de pegarse a la pared. Subió su vista con miedo a lo que iba a encontrarse.

Desde luego, que la realidad superó a su imaginación. Abrió mucho los ojos sin poder creer lo que veía y poco a poco las piezas fueron encajando es su cabeza.

—¡No! —El susurro salió de su boca mientras todo se volvía negro.

***

—Huffy. Di algo. 

Hope levantó los ojos hacia Regulus. Si alguien le dijese que escogiese algún rasgo de Regulus, siempre escogería sus ojos. Todo podía estar mal, todo podía estar destruyéndose que siempre que mirara sus ojos se sentiría en paz.

—No lo entiendo. —Sirius susurraba una y otra vez sentado en la silla del despacho de Dumbledore. Sus amigos lo miraban preocupados y aunque querían consolarse unos a otros, todos estaban igual de destrozados. —Ayer estaba, ya no está. —Parecía haber entrado en un trance.

Ni siquiera Dumbledore parecía saber qué decir mientras los miraba con tristeza. ¿Dónde estaba Phoenix? ¿Quién se la había llevado? y aunque Hope sabía que no era su culpa, que no era responsable del comportamiento de su hermana, siempre quedaba una espinita clavada. Que, si Phoenix no la hubiese conocido, esto no estaría pasando. Abrazó a Regulus con más fuerza, buscando en él el valor que necesitaba.

Una lechuza entró volando y dejó caer un sobre encima de Regulus. Sirius y Regulus se miraron, los dos sabían muy bien a quién pertenecía esa lechuza. Sin dejar de abrazar con un brazo a Hope, Regulus abrió la carta.

Regulus Arcturus Black

Queda invitado a la fiesta de iniciación en la mansión Malfoy.

Confirme su asistencia y se le será notificada la fecha.

Traiga a su pareja, todo Riddle es bienvenido.

—¿Qué mierda? —Regulus parecía sorprendido. Le pasó a Hope la carta. Cuando la pelinegra la leyó miró a Regulus fijamente y a Regulus no le gustó su mirada porque vio algo en ella, decisión.

—Vamos a ir. —El Slytherin suspiró.

—Algo de esto me imaginaba.

—Salvo que alguien tengo una mejor idea de por dónde empezar a buscar a Phoenix. —Hope se giró hacia Regulus. —Es mi mejor amiga, es como mi hermana. —Regulus besó tiernamente su frente mientras asentía.

—Iremos, pero al primer signo de la presencia del señor tenebroso nos vamos de allí. —Hope asintió al igual que el resto de la habitación.

—¿Debería sentirme ofendido de no hacer sido invitado? —James rio levemente palmeando la espalda de Sirius. Este último parecía haber salido de su trance. —Si necesitáis ayuda no dudéis en pedirla.

—Estoy seguro de que a mamá le encantará verte.

—¿Ha sido eso una broma, Reg?

***

—¿Vas a dejar de balancearte de lado a lado? —Hope miró a Regulus mordiendo su labio inferior. El Slytherin llevaba una túnica para la ocasión y lo único que Hope quería era acariciar todo su cuerpo. Pero tenían cosas más importantes que hacer.

—Tu madre me ha dado la bienvenida. La bienvenida Regulus. ¿Qué significa eso siquiera?

—Eres una Riddle. Está encantada de que salga contigo.

—No sé como tomarme eso. —Regulus rió y le cogió de la mano tirando de ella hacia la pista de baile. La Hufflepuff llevaba nerviosa desde que habían llegado a la mansión y Walburga Black le había dado la bienvenida a la familia.

Hope sintió la mano del chico en su cadera y automáticamente subió sus manos a sus hombros. Recostó la cabeza en su hombro y sonrió recordando aquel primer baile en la torre de astronomía. Parecía un recuerdo tan lejano.

—¿Y si nos organiza una boda? —Regulus soltó una carcajada consiguiendo la atención de las personas de su alrededor. Nunca habían visto a Regulus Black si quiera sonreír.

—¿Tan terrible sería casarte conmigo? —Hope subió la mirada. Sus ojos grises chocaban con los suyos verdes.

—No dudaría un segundo en casarme contigo. —El corazón el chico se congeló. No esperaba esa respuesta. Después lentamente una sonrisa apareció en su cara. —Pero quiero organizar mi propia boda, cuando sea el momento.

—Cuando sea el momento. —Regulus bajó hasta que sus labios hicieron contacto con los de la Hufflepuff. Como pasaba cada vez que se besaban, la sala desapareció a su alrededor y lo único en lo que podían concentrarse era en la sensación de sus labios contra los del otro.

Cuando el beso terminó Hope escondió su cabeza en el hueco del cuello de Regulus, mientras el chico la estrechaba con fuerza.

—Te quiero Huffy. —Susurró en su oído haciendo que un cosquilleo se expandiese por su cuerpo.

—Yo también te quiero, Blacky.

Siguieron bailando hasta que sus pies empezaron a doler y fueron a por algo de beber. Mientras Regulus pedía las bebidas Hope escaneó la habitación.

—Es él. —Regulus se giró a mirarla, de pronto la chica se había puesto muy pálida.

—¿Quién Huffy? —Miró a su alrededor en busca del señor tenebroso, pero no encontró a nadie sospechoso. Mientras Hope miraba fijamente a un hombre que hablaba con los Malfoy. Tenía el pelo oscuro, de un tono muy semejante a la chica. Cuando se giró Regulus vio que les sonreía mientras levantaba su mano en un saludo.

—Es mi hermano. 

Hope|Regulus Black [Editado]Where stories live. Discover now