Hilo rojo del destino

7

- Papá, me habías asustado. - Se quejó Light, una vez que su madre los dejó solos a L, su padre y a él en la sala del hospital - Creía que había sido cosa de...

- ¿Kira? Sí, al principio yo también. Pero no, debe haber sido por el estrés y haber trabajado demasiado...

- E imagino que el que su hijo esté bajo sospecha debe ser una presión muy grande. - Añadió L, sin mirar a ningún punto en concreto.

Light se giró rápidamente, fulminando a su amigo con la mirada.

- ¿Qué? ¡Hideki! ¿Le has contado eso a mi padre?

- Sí, Light. Le he contado todo a tu padre. Incluso que soy L. - Reveló. Light se quedó en silencio, mirando a su padre atentamente para ver si confirmaba lo dicho por el pelinegro, aunque ya suponía que era verdad.

- Es cierto. Él es L, hijo. Nosotros le llamamos Ryuzaki para no levantar sospechas, pero te aseguro que es L.

Entonces sí es L... Mi padre lo ha confirmado así que como mínimo es el que ha estado controlando a la policía hasta ahora. Joder, tengo que matarlo. ¿Podría tener más mala suerte? En verdad el destino me odia.

De repente Light sintió la necesidad de golpear su cabeza contra algo repetidas veces.

Maldita sea, cálmate. Respira. Ahora se supone que soy Light Yagami, un hijo preocupado por su padre. Si actúo bien, tal vez pueda convencerles de que no soy Kira. Después ya pensaré en lo de matar a L.

Matar a... Hideki.

Light observó a su amigo de reojo. Estaba sentado como siempre, en esa extraña postura suya mientras se chupaba un dedo. Tan mono, parecía un niño pequeño.

¿Realmente sería capaz de matarlo?

- Dime, Ryuzaki. - Soichiro interrumpió el debate mental de su hijo, llamando la atención de los dos jóvenes ahí presentes - ¿Has hablado con Light? ¿Ya has despejado tus dudas?

- He hablado con él, sí. Pero... Hay demasiadas incógnitas, a decir verdad. - L se giró hacia el castaño para explicarle la situación - Verás Light, como ya sabes, los doce agentes del FBI que Kira asesinó estaban investigando a los policías encargados del caso Kira y sus familias. Nos llama la atención un caso en particular, el de Raye Pember, debido a que estuvo actuando extraño en el momento de su muerte.

- Y supongo que soy una de las personas a las que investigaba Raye Pember, - Habló Light, cruzadose de brazos e intentando aparentar que no estaba pensando en que el chico a su lado le parecía mono - es lógico que sospeches de mí. O mejor dicho, como tú dices, no hay nadie más de quien sospechar.

- Tu capacidad deductiva es impresionante, Light. Siempre tan rápido y preciso.

- Voy a colaborar con vosostros, Hideki. Después de todo, mi padre ha confirmado tu identidad y creo que, no, confío en ti. - Light sonrió levemente, mirando a L a los ojos. El ojeroso por su parte, hizo una pequeña mueca que el castaño interpretó como una medio sonrisa - Te demostraré que no soy Kira cuando logre atrapar al verdadero asesino.

Ambos se perdieron en los ojos del otro por unos minutos, dejando la habitación en silencio.

- Light, lo que debes hacer ahora es concentrarte en tus estudios y entrar al cuerpo después. No hay ninguna prisa.

La voz de Soichiro hizo que ambos chicos cortaran con el contacto visual. Light no sabía a ciencia cierta cuánto tiempo llevaban mirándose a los ojos.

- ¿Cómo puedes decir eso, papá? ¿Quién sabe cuántos años podría tardar en acabar?

- Estoy de acuerdo con Light. - Se metió L, sin importarle que fuera una discusión familiar en la que él no pintaba nada - Tener una carrera no lo es todo, él tiene bastante más potencial que la mayoría de los integrantes de la fuerza especial. Nos vendría muy bien en el equipo, independientemente de si es Kira.