11

10.9K 1.3K 3K
                                    

Light no se esperaba que Matsuda hablara en serio cuando le dijo que quedarían para hablar sobre el tema de vigilar en Aoyama y Shibuya.

Pero ahí estaba, en una cafetería bastante fea (si es que se le podía llamar cafetería a eso) , tomando un batido de fresa con Matsuda.

- Espero que no te importe que sea aquí. - Se disculpó Matsuda con una sonrisa mientras se rascaba la cabeza - Es que lo he visto y me he acordado de que cuando venía de pequeño me encantaban los batidos de esta tienda.

- No te preocupes, no importa. - Contestó Light con su mejor sonrisa falsa.

Sí que importa. Para empezar, ¿quién pinta las paredes de una cafetería de rosa? A parte de que esta todo decorado con fotos de muñecas siniestras y las camareras llevan sombreros de perritos calientes. Ni siquiera a L, que tiene un gusto de mierda, le podría gustar esto.

Matsui o como quiera que se llame este tío, es idiota.

Y muy infantil.

- Me alegra que no te importe, porque tenía muchas ganas de quedar contigo. - Siguió hablando Matsuda mientras daba un gran sorbo al batido - No puedo creer lo inteligente que eres, sobretodo teniendo en cuenta que acabas de empezar la universidad. A veces cuando os veo a Ryuzaki y a ti razonando me siento un poco inútil. Pero creo que todo depende de la actitud, por eso me he prestado voluntario para esto, quiero ayudar en la investigación. Después de todo, siempre he querido ser policía y ahora que lo he conseguido no pienso echarme atrás. -Bebió un poco más de batido antes de continuar - Recuerdo que había un profesor en la universidad que siempre me decía que nunca lograría nada, que no tenía lo necesario para ser policía y no sería capaz de dispararle a nadie aunque mi vida estuviera en peligro. - Dió otro sorbo al batido, mientras fruncía levemente el ceño - Ese profesor me daba bastante asco. Pero bueno, basta de hablar de mí. ¿Qué tal tú?

Light estaba seguro de que estaría el resto del día con dolor de cabeza.

No puedo creer que este tío hable tanto, no se calla. Que ganas tengo de callarle la boca con un par de comentarios que se podrían calificar como bordes.

Pero no, necesito que confíen en mí para que no sospechen que soy Kira. Tengo que ganarme la confianza de Matsui.

- Bien, gracias por preguntar. Pero Matsui, te recuerdo que hemos quedado para hablar de como haremos la vigilancia. - Recordó Light con una ceja alzada.

- Oh sí, perdona. - Se disculpó de nuevo, sonriendo otra vez - A veces me desvío mucho. Eso es porque no suelo quedar con mucha gente, pero me alegro de estar aquí contigo. Eres muy agradable Light. ¿A ti no se te pasa el tiempo volando mientras hablamos?

Cada maldito segundo se siente como el infierno. Preferiría mil veces estar con Ryuzaki mientras este me investiga o lo que sea. Al menos así hay emoción, la emoción de que tenemos que cuidar cada palabra que decimos y pensar con cuidado nuestros movimientos. Con Matsui todo es... No sé, muy ñoño.

- Claro, tú también eres muy agradable. No entiendo por qué te sientes así, creo que a futuro serás muy importante en la investigación, Matsui. - Mintió rápidamente Light, con una pequeña sonrisa fingida.

- ¿Tú crees? - Las pupilas de Matsuda se dilataron un poco de la emoción. Entonces dio otro sorbo - Ryuzaki me suele mirar como si fuera idiota a veces.

Y con razón.

- Claro, hazme caso. El resto de policías... Incluido Ryuzaki, son unos amargados. Tú eres diferente. Estoy seguro de que serás un gran policía.

Hilo rojo del destinoWhere stories live. Discover now